Niki Lauda, un empresario que vuela alto
El piloto austríaco se ha consolidado como uno de los deportistas más exitosos en el mundo de los negocios gracias a su carrera como fundador de compañías aéreas
Todos los deportes tienen su santoral de grandes campeones. El Pelé, Maradona y Messi del fútbol tiene su equivalente a la Fórmula 1 con nombres como Ayrton Senna, Michael Schumacher y Niki Lauda. Este último, además de un referente de su deporte, pasará a la historia como uno de los grandes empresarios de la aviación europea al siglo XX.
El pilotaje ha sido la gran pasión que ha marcado la vida de Niki Lauda, sobre el asfalto o por encima de las nubes. Ya en su tapa como piloto de Fórmula 1, y con dos títulos de campeón del mundo a su palmarés, Lauda optó por una prematura retirada para fundar y dedicarse plenamente a la compañía aérea Lauda Air.
Aquella primera experiencia, pero, no fue del todo bueno. Una demanda de la gran compañía del país, Austrian Airlines, lo trajo a la quiebra y el obligatorio retorno a las pistas en 1982. Un regreso por motivos puramente económicos, que crearía un precedente que años después repetiría Michael Jordan, y que acabó con la consecución de su tercer título el 1984.
Lauda optó por una prematura retirada para fundar la compañía aérea Lauda Air
Con 36 años, tres galardones de campeón mundial y los bolsillos nuevamente llenos, Lauda tuvo bastante de las cursas e insistió a cumplir su sueño de crear una gran compañía aérea. Por Niki Lauda los malos augurios no existen y el 1985 vuelve a activar Lauda Air, que tres años después celebra su primer vol.
Durante la siguiente década la compañía no para de crecer, hasta el punto de consolidarse cómo uno de los operadores con quieres internacionales más importantes del centro de Europa. Gracias a la aparición de Lauda Air, el aeropuerto de Viena conectó con Australia, Cuba, Miami y varias ciudades de la Oriente Medio.
Todo y el conflicto legal anterior, Lauda no tuvo ningún problema a cerrar el siglo XX con un acuerdo con Austrian Airlines. A finales del 2000, la gran compañía austríaca se hacía con el 100% de la marca de Niki Lauda y con los suyos cerca de 40 empleados, iniciando un proceso que culminaría cinco años después con el control de todos los vuelos de la empresa.
Gracias a la aparición de Lauda Air, el aeropuerto de Viena conectó con Australia, Cuba o Miami
La historia del campeón de la Fòrmula 1 con la aviación no acaba con esta operación. Siempre atento a las tendencias, en 2003 crea la aerolínea de bajo coste Niki, que se estrena aquel mismo año con uno quiere que conectó Viena con Tenerife.
En los siguientes años, Niki combinó los trayectos en ciudades cercanas como Múnich con la conexión con grandes centros turísticos como Niza, Valencia o Grecia. Una fórmula de solo y playa a precios bajos con la que se hizo un agujero al mercado.
El 2010, con una flota de 17 aviones y 640 quieres semanales, Air Berlin toma el 49,9% de las acciones de la compañía para consolidar una integración completa al grupo a finales de 2011.
Hoy, Niki Lauda es un nombre reconocido tanto en el mundo de las curso como de la aviación.