El mundo empresarial alza la voz por el diálogo
Los empresarios catalanes exigen a Sánchez y Torra que lleguen a acuerdos para garantizar la paz social y el progreso económico
El mundo empresarial catalán ha alzado la voz de manera unitaria para exigir al Gobierno español y la Generalitat que recuperen la relación institucional y dejen de lado "los intereses electoralistas" para llegar a acuerdos que permitan mantener "la paz social" y garantizar el progreso económico. Al más puro estilo de la reunión del Iese de 2007 para reclamar la gestión del Aeropuerto del Prat des de Catalunya, ahora los empresarios se manifiestan para que se abra una etapa de diálogo para resolver el conflicto que el Estado español ha impuesto judicializando el procés.
El mensaje ha sido lanzado en el gran acto empresarial organizado en Barcelona por las dos patronales catalanas, Foment del Treball y Pimec, y al que han asistido unos 350 empresarios, representantes de los diferentes sectores económicos, que han mostrado su preocupación y alarma por los altercados de la última semana.
"Los gobiernos y las diferentes fuerzas políticas deben asumir su responsabilidad, sentarse juntos para hablar y llegar a acuerdos. Sin excusas", subraya el escrito, que lleva por título Manifiesto a favor del progreso de Catalunya.
Tras destacar que "la salida al grave conflicto de fondo que vivimos en Catalunya es política", los empresarios reivindican "la negociación, la transacción y el acuerdo", e instan a la clase política a "liderar" este proceso "en el escenario del pacto".
El manifiesto interpela directamente a los gobiernos español y catalán y les reclama que "se esfuercen en recuperar la relación institucional perdida" dejando de lado "los intereses electoralistas", después de unos días en los que Pedro Sánchez y Quim Torra se han intercambiado reproches a propósito de la oportunidad o no de dialogar.
En este punto, los empresarios aseguran que "es el momento de que la clase política pase a la acción, llegue a acuerdos y tome decisiones" y reclaman "el máximo apoyo político y social al mantenimiento de la paz social".
"Es momento de acabar con los discursos vacíos y banales", sostiene el manifiesto, leído en la sede de Foment en Barcelona, y que hace referencia también a que la actividad económica requiere "seguridad jurídica" y la garantía de movilidad.
Con este manifiesto, Foment del Treball y Pimec quieren también lanzar un mensaje de tranquilidad dirigido al tejido empresarial y a la ciudadanía y poner en valor los puntos fuertes de Catalunya, tras las protestas en las calles a raíz de la sentencia del procés.
El presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, ha destacado que las dos patronales representan a más de 600.000 empresas catalanas y se ha mostrado convencido de que "estamos a tiempo de recuperar la normalidad, el prestigio de Catalunya y la legalidad y seguridad jurídica que necesitan nuestras empresas".
Al igual que hizo en el acto de la patronal vallesana Cecot, Sánchez Llibre ha instado directamente al presidente catalán, Quim Torra, a "liderar la recuperación de la confianza del tejido empresarial y del prestigio de Barcelona y Catalunya".
Por su parte, el presidente de Pimec, Josep González, que ha calificado de "histórica" la jornada, ha recordado a los líderes independentistas que están en prisión, lo que ha provocado aplausos generalizados de los asistentes al acto.
"Los políticos deben ponerse las pilas. Les ha faltado valentía y se han guiado más por el electoralismo. Hay que hacer política de la buena y eso requiere, primero, respeto mutuo", ha afirmado el máximo representante de las pymes, que ha advertido al Govern que "no está en posesión de toda la verdad".
En el acto han tomado también la palabra empresarios que representan a diferentes sectores de actividad, como el presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre, que ha reclamado a los políticos "que hagan su trabajo, por el que cobran", y apliquen "el sentido común y la responsabilidad".
El presidente de Salud y Social de Pimec, Antonio Torres, ha exigido que se mantenga el clima de convivencia "porque de ello dependen el bienestar y la salud de todos", mientras que el presidente de Pimec Joves, Josep Soto, ha pedido "gobiernos fuertes" y políticos "que dejen los partidismos de lado".
"Ni la sentencia ni la prisión es la solución. Hace falta valor y generosidad para encontrar la salida", ha destacado Gerard Esteva, presidente de la Unión de Federaciones Deportivas de Catalunya, tras reclamar "liderazgo" a Quim Torra y Pedro Sánchez.
Entre los asistentes al acto se encontraban también el presidente y el director general de Fira Barcelona, Pau Relat y Constantí Serrallonga, respectivamente; la presidenta del Port de Barcelona, Mercè Conesa; el presidente de la Cambra de Barcelona, Joan Canadell, y representantes de las escuelas de negocio IESE y ESADE.
Violencia gratuita
El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Joan Canadell, ha explicado que suscribe en un 80% el manifiesto de las patronales Foment del Treball y Pimec. "No lo firmaríamos tal cual, pero en el 80% del escrito estaríamos de acuerdo", ha sostenido Canadell. Coincide con ambas patronales en que no se puede judicializar la política, un punto que ha considerado "clave", y ha insistido en la necesidad de apostar por el diálogo y la negociación.
"Antes se sentaba -el Gobierno central- y no negociaba los problemas que aquí reclamábamos. Ahora ya ni se quiere sentar. Es muy grave", ha afirmado Canadell. El presidente de la Cámara de Barcelona no está de acuerdo en hablar de violencia: "Si hablamos de violencia, hay que hablar de violencia gratuita de las fuerzas de seguridad del Estado y de esto no se habla en el manifiesto".
Además, han acudido el presidente del Grupo Godó, Javier Godó; el consejero delegado de Ficosa, Javier Pujol, y otros empresarios como Pere Barrios. El manifiesto empresarial se ha elaborado después de que las principales patronales y sindicatos de Catalunya -Foment, Pimec, CCOO y UGT- hicieran el pasado domingo un llamamiento conjunto en favor de la estabilidad política, económica y social catalana y pidieran "restablecer los espacios de convivencia y de diálogo y de legalidad", así como la "normalidad institucional".