La Costa Brava tiene una longitud de 200 kilómetros | iStock

Economía

El futuro tren-tram de la Costa Brava: 50 años de reivindicaciones y 14,5 millones de pasajeros

El 80% de la Costa Brava no dispone de servicio ferroviario, mientras que un estudio promete que el futuro tren-tram "revolucionará" la movilidad de la zona

¿Cómo es posible que el 80% de la Costa Brava no tenga servicio ferroviario y sea el territorio más poblado de Catalunya sin líneas de tren? Muchos locales costeros consideran que es el momento de recuperar el “tiempo perdido” de las últimas cinco décadas. Es decir, prácticamente “no se pueden quejar de la calidad de vida”: población repartida a lo largo del territorio, una actividad económica en auge, llegada de turismo de “calidad”, pero con conexiones en tren prácticamente inexistentes. Todo esto combinado con el recuerdo y el anhelo de un pasado en el que, hasta hace pocas décadas, el Baix Empordà había tenido dos líneas, los conocidos ferrocarriles de Girona a Palamós y de Girona a Sant Feliu de Guíxols. Ahora bien, un posible futuro tren-tram de la Costa Brava ha encendido todas las alarmas, que promete “revolucionarlo” todo.

El 80% de la Costa Brava no tiene servicio ferroviario y se constituye como el territorio más poblado de Catalunya sin ferrocarril

“Lamentablemente, aquellas líneas de tren se cerraron hacia los años 60, en pleno franquismo, al igual que se clausuraron los otros ramales que conectaban Girona con Banyoles y Olot”, explica Pau Noy, ingeniero industrial especializado en transportes y presidente de la Fundació Mobilitat Sostenible, a VIA Empresa. De hecho, la provincia de Girona tiene una de las tasas más altas de cierre de ferrocarriles de toda España. Noy tiene claro que si estos ferrocarriles hubieran podido sobrevivir hasta 1975, “ahora estarían llevando millones de viajeros como lo hacen los ramales de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) en Martorell, Igualada y Manresa”.

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Bien mirado, hay un dicho recurrente que dice que la Generalitat diseña ferrocarriles para Barcelona, mientras construye carreteras en el resto del país. El experto destaca que durante los 40 años de democracia, el gobierno catalán prácticamente no ha construido ningún kilómetro de tren fuera del área metropolitana de Barcelona.

La provincia de Girona tiene una de las tasas más altas de cierre de ferrocarriles de toda España

Durante esta semana, las reivindicaciones por el futuro tren-tram de la Costa Brava han ganado protagonismo fruto de un informe que ha salido a la luz. Para ser más precisos, la Fundació Mobilitat Sostenible i Segura calcula que la línea de tren-tram de la Costa Brava podría tener una demanda de casi 15 millones de viajeros anuales. A la espera de que la Generalitat haga público el estudio de viabilidad del proyecto -que ha costado 500.000 euros- y que ya se encuentra en la fase final de redacción después de 10 meses de retraso, el ingeniero industrial Pau Noy ha presentado un nuevo informe que califica de “realista y muy conservador”.

Todos los entresijos de un tren-tram similar a los de Europa

Los tren-tram son muy habituales en las ciudades europeas | iStock

¿Cuál sería el recorrido y todos los entresijos del posible tren-tram de la Costa Brava? El recorrido saldría de la estación de Renfe de Girona, siguiendo en paralelo la línea de tren en dirección norte y haría tres paradas antes de salir del núcleo urbano de la ciudad. A partir de aquí, haría una única parada en Celrà y Flaçà, alrededor de las estaciones de Renfe, con el objetivo de lograr una mejor correspondencia. Desde Flaçà, la propuesta gira hacia el este, para en Corçà y también propone una parada única en la Bisbal, ciudad que bordea por el sur, no por el centro.

El posible tren-tram de la Costa Brava: 50 trenes por sentido de media, con una velocidad comercial media de 60 kilómetros por hora

Desde allí se dirige a Palafrugell, donde hace dos paradas, se detiene también una vez en Mont-ras y sigue hacia Palamós. Desde allí y hasta Sant Feliu de Guíxols -con Calonge, Platja d’Aro y s'Agaró como paradas intermedias-, se trataría de un recorrido totalmente urbano, con siete u ocho paradas. A partir de Sant Feliu (ciudad donde se harían una o dos paradas), el tren-tram seguiría hacia Santa Cristina d’Aro, donde también haría una parada. A partir de aquí, la propuesta incluye detenerse en Llagostera, Cassà de la Selva, Riudellots, Fornells y Vilablareix. A la entrada de Girona por el sur hasta volver a la estación de Renfe, habría una única parada adicional. Todas las líneas serían de doble sentido, para facilitar la movilidad y evitar “cualquier problema”.

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El ingeniero solicita un sistema de trenes cadenciados de unos 50 aparatos por sentido de media, con servicios semidirectos desde las ciudades principales hasta Girona, con una velocidad comercial media de 60 kilómetros por hora - y picos de 100 kilómetros por hora en los trayectos interurbanos y de 20 kilómetros por hora al atravesar Girona y el resto de ciudades.

Los futuros usuarios del tren: 42.077 viajeros en un día laborable y 14,5 millones de viajes anuales

El informe indica que la línea de tren-tram de la Costa Brava lograría captar 42.077 viajeros en un día laborable normal. Al cabo del año (con 330 días laborables), Noy calcula que la captación de viajeros nacionales sería “muy significativa”, ya que se podría llegar hasta los 13,9 millones de viajeros anuales. A esta cifra, subraya, habría que añadir un porcentaje de viajeros extranjeros, ya que se trata de una importante zona turística. Su cálculo se sitúa en un 4% adicional sobre el total nacional, de manera que serían unas 550.000 personas más. Por todo ello, su cómputo final es que la demanda estimada de la línea sería de 14,5 millones de viajeros anuales.

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Finalmente, el experto lanza una pregunta -con forma de dardo- sobre la previsión de la movilidad sostenible: “a partir de 2035 ya no se podrán vender coches con motor térmico en Europa, ¿podremos sustituirlos todos por coches eléctricos?”. Noy apunta que durante la futura década del 2030 al 2040 los problemas de movilidad y sostenibilidad quedarán “muy superados por la realidad”. Y lo tiene claro: “somos entusiastas científicos, con datos concretos. Hay que dar un paso adelante y avanzar, tan pronto como se pueda, con los tren-tram”.