Encuentro Empresarial en el Pirineu
Más pobres, endeudados y salvados por Europa
Los economistas Alfred Pastor y Ramon Tremosa y el epidemiólogo Pere Godoy reivindican la inversión sanitaria para salir de la crisis
Los ingredientes eran casi los mismos. Ponentes de prestigio alrededor de una mesa redonda, el mismo moderador, coincidencia de fechas e incluso el barómetro para tomar el pulso al latido económico que elabora la organización. Pero eso sí, esta vez todo se ha realizado de manera virtual. La XXXI edición del Encuentro Empresarial en el Pirineu, que se tenía que celebrar los días 11 y 12 de junio en la Seu d'Urgell, reuniendo más de 600 personas y que se ha pospuesto para el 29 y 30 de octubre, ha hecho una cata previa con el título De la sacudida al impulso económico. Economía, sanidad y Europa han sido los ejes sobre los que han debatido el profesor emérito del IESE Business School, Alfred Pastor, el profesor de Economía de la UB, Ramon Tremosa y el presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Pere Godoy. Más allá de aventurarse a ofrecer recetas o augurios en pleno impacto social, económico y sanitario por la pandemia de la Covid-19, los expertos han coincidido en algunas certezas: saldremos más pobres y endeudados de la crisis, pero con el cojín de la Unión Europea (UE) el golpe será menos doloroso. Eso sí, "tenemos que hacer bondad" para recibir las ayudas condicionadas de Europa, en palabras de Alfred Pastor.
Más de 250 personas han seguido el encuentro confinado durante una sesión telemática de casi dos horas. El presidente del acontecimiento, Viçenç Voltes, ha pedido "facilidades administrativas, flexibilidad laboral y ayudas fiscales" para que los empresarios salgan de esta. Unos empresarios que, en contra de lo que pueda parecer, tienen previsto mantener sus plantillas en los próximos meses. Así lo confirmó el 49% de los encuestados en el barómetro tradicional que efectúa el Encuentro. La mitad de ellos considera que las medidas sanitarias que se han tomado son las adecuadas y un 85% de ellos está dispuesto a pagar el peaje de emprender reformas estructurales en la economía a cambio de recibir las ayudas de las instituciones europeas.
"Casi la mitad de los empresarios prevé mantener la plantilla durante los próximos meses y un 85% aceptaría impulsar reformas a cambio de recibir ayudas de las instituciones comunitarias"
La pandemia de la covid-19 ha agravado dos problemas previos que arrastraba el Estado español: una tasa de paro demasiado alta y una deuda elevada. "Para corregir este escenario, nos hace falta que las administraciones públicas suplan la carencia de ayudas del sector privado y reconstruir el déficit de productividad de la economía con pactos políticos alejados de la crispación actual". Así lo aconseja Alfred Pastor, que recomienda el camino de la colaboración publicoprivada para evitar una espiral deflacionista por una oferta deprimida.
Mejor que hace 30 años
Aunque admite que saldremos de la crisis de la covid-19 más pobres y endeudados materialmente, Pastor resalta la necesidad de dotar el sistema sanitario de más recursos "porque durante estos meses ha ido dando más de los que tiene". El punto de esperanza del profesor del IESE se concreta en que el sistema de protección económico y social es mejor que el de hace 30 años.
Tremosa: "Soy más europeísta que ayer, pero menos que mañana"
Este análisis es compartido por el profesor de Economía de la Universitat de Barcelona (UB), Ramon Tremosa. El especialista, que durante 10 años fue eurodiputado, ha acabado su intervención diciendo: "Soy más europeísta que ayer, pero menos que mañana". En este sentido, Tremosa ha recordado que desde hace 12 años, cuando estalló la anterior crisis, Catalunya ha duplicado sus exportaciones, ha atraído multinacionales gracias a la libre circulación y la presencia de una moneda como el euro, que le ha otorgado prestigio y ha alejado el fantasma de una inflación baja.
Con un ojo puesto en la realidad europea, que marca las decisiones que toman los estados miembros, Tremosa ha precisado algunos cambios en relación con otros momentos de dificultades económicas. "Alemania ha pasado de ser el rey de la austeridad a un discípulo de Keynes y la Comisión Europea está instando España a que gaste más en sanidad aunque incurra en déficit público".
Sin prima de riesgo e inflación
Ayudas y estímulos son algunos de los conceptos que están utilizando países como Alemania, que por primera vez desde el año 1980 registra un déficit comercial. Este cambio de mentalidad ha hecho que "la reacción de los bancos centrales no haya tardado cuatro años como en la anterior crisis, sino que se ha producido en cuatro semanas". Para Tremosa, ni la prima de riesgo ni la inflación serán altas en los próximos años, pero el acuerdo total de la UE por los fondos de recuperación no tendrá lugar hasta 2021. Tremosa cree que una de las opciones que tienen economías como la española y la italiana, castigadas por la pandemia por un déficit público, es utilizar el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), una herramienta que quiere salvaguardar la estabilidad financiera de la zona Euro y que está ideada para gestionar estos tipos de situaciones.
Pastor: "Para corregir este escenario, nos hace falta que las administraciones públicas suplan la carencia de ayudas del sector privado y reconstruir el déficit de productividad de la economía con pactos políticos alejados de la crispación actual"
El papel de las empresas ante la incertidumbre del futuro sanitario también se ha tratado durante la mesa redonda. El presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Pere Godoy, cree que estas se tienen que preparar para un escenario donde "la posibilidad de rebrotes puntuales será alta". El objetivo de las autoridades sanitarias es mantener el nivel de transmisión comunitaria para evitar un nuevo colapso del sistema. A la vez, Godoy aboga para favorecer la investigación investigadora.
Vacuna en 10 meses
Godoy augura que en un periodo aproximado de 10 meses, los científicos encontrarán la vacuna para combatir la pandemia del coronavirus. Mientras tanto, reivindica la importancia de implantar un sistema global de gobernación de la salud mejor dotado económicamente. A pesar de asegurar que no se puede dar nunca una negociación entre si se tiene que priorizar la economía y salud, puesto que "el resultado, si se escoge la economía, siempre es desastroso", el epidemiólogo insiste que "los científicos asesoramos, pero son los políticos quienes toman las decisiones".
Godoy: "La posibilidad de rebrotes puntuales será alta... Los científicos asesoramos, pero son los políticos quienes toman las decisiones"
Aunque los ponentes han entrado poco en el juego de valorar la evolución económica del futuro inmediato a consecuencia de la incertidumbre actual, han lanzado un mensaje de tranquilidad por la empresariado leridano. El sector agroalimentario, que acostumbra a ser resiliente en las crisis por su carácter anticíclico, puede aprovechar el boom de la digitalización para establecer un contacto directo entre el productor y el consumidor final. La manera de hacerlo queda en el aire. Igual que pasa con la celebración del Encuentro Empresarial en su formato tradicional en octubre. "Muy improbable", ha pronosticado Godoy. "En versión reducida presencial u online, lo acabaremos haciendo", ha matizado Vicenç Voltes. Confinada o no, el impulso del encuentro continuará.