Talento digital (y femenino) para salvar el PIB
Las ofertas de trabajo que requieren perfiles tecnológicos son muy superiores a la demanda existente
Lugares de trabajo sin cubrir, carencia de talento (digital, femenino y senior) y dispersión geográfica. Estos son unos cuántos de los ingredientes básicos porque toda economía salga adelante porque, si hay mucha oferta de vacantes, pero no hay demanda para cubrir, la competitividad del país se ve resentida y, por lo tanto, afecta el Producto Interior Sucio (PIB). Si Cataluña cuenta con un 28,65% de paro juvenil, por qué no se cubren estas plazas?
El Círculo Tecnológico de Cataluña (CTecno) se ha hecho esta misma pregunta y lo ha querido responder reuniendo más de 70 profesionales de diferentes sectores en un encuentro bautizado como Como fomentar y atraer el talento digital? De la mano de Barcelona Activa, el portavoz de la Barcelona Digital Talento, Bernat Palau, modera un debate que tiene muchos temas a tratar, pero un punto común: la carencia de talento digital para garantizar la ocupación en un mundo cada vez más transformado a nivel tecnológico. Y no sólo esto. "Sólo contamos con un 50% del talento por la exclusión de la mujer en este terreno", pone de manifiesto.
Bajo la premisa que "el talento es global" y que "el mundo no es Barcelona", el presidente del CTecno, Jordi William, centra su atención en el hecho de "sí somos capaces de atraer el talento de casa nuestra y del mundo". Y abre el turno de palabra cuestionándose "si somos capaces de atraer talento. Este es el gran reto que tenemos como ciudad". Sumándose a esto, la cabeza de innovación de Barcelona Activa, Raul Sánchez, destaca que "la carencia de talento es muy importante por la inversión extranjera, atraer empresas internacional hacia Barcelona. Muchas hacen el proceso, pero uno de los motivos por los cuales no acaban de aterrizar es porque no encuentran talento suficiente". Para cambiar esta tendencia, dice Sánchez, "tenemos que conseguir que toda la ciudadanía evolucione al mismo ritmo que la tecnología".
De momento, pero, el panorama está claro: "Hay puestos de trabajo que no se están pudiendo cubrir, en un país donde el paro juvenil no es bajo", lamenta el portavoz de la Barcelona Digital Talento, al mismo tiempo que sostiene que "esto afecta la competitividad del país" y "crea alarma" porque "la carencia de talento es muy importante para la inversión extranjera y para atraer empresas internacional hacia Barcelona".
Ante esto, el remedio al problema es, según Palau, "alinear la demanda de conocimientos de las habilidades que pide la empresa con los de la universidad" bajo un órgano colegiado como lo es la Barcelona Digital Talento, que tiene por objetivo atraer talento digital en Barcelona y Cataluña.
La fábrica del talento
Pero esto no es suficiente. A pesar de que en el ámbito universitario, "la demanda encaja con la oferta", según el decano de la Facultad de Informática de la UPC, Josep Fernández, sí que hay "menos demanda en el ámbito de las telecomunicaciones: el atractivo ha disminuido y hay más oferta que demanda". La solución? En palabras del portavoz de la Barcelona Digital Talento, hay que "generar talento digital y de mayor calidad".
La directora de recursos humanos de tecnología a Schibsted Spain, Maria Larios, añade un punto más a la cuestión y reclama que, además de talento digital, sean perfiles séniors para crear un equilibrio de talentos en cada equipo. Perfiles como programadores de iOS y Android o de Java Script van muy buscados por muchas empresas porque, lamenta, "hay muy poca gente con este perfil en el mercado". Pero también hay que incorporar -y tener en cuenta- las mujeres puesto que "es responsabilidad hacerlo" en un mundo en que "la mitad de la población no está dentro".
Paula Muñoz: "Todas las empresas se están convirtiendo en compañías tecnológicas y piden talento digital"
A todo esto, se tiene que sumar el hecho que no sólo las compañías de tecnología están a la busca (y captura) del talento digital, sino que, como sostiene la responsable de recursos humanos de IBM, Paula Muñoz, "todas se están convirtiendo en compañías tecnológicas y piden talento digital". Y añade: "Antes, nuestros competidores eran los que hacían tecnología, pero ahora cualquier empresas buscan este talento".
Mientras tanto, la responsable de "recursos de las personas" -como ella se autodefine- de Nae, Georgina Fors, rompe con todos los esquemas y premisas de las cuales partía el debate y dice alto y claro que "quiero romper con una afirmación que siento muy a menudo y es que no hay talento. Sí hay talento", sostiene contundente. Y más si se añade el ingrediente mágico de la "diversidad de talento", es decir, el talento femenino, la mina todavía saca más oro.
Enamorar el entorno
A parecer de Fors, "la estrategia para enamorar el talento externo e interno gira en torno la cultura organizativa que fomente la creatividad y el aprendizaje trabajando sobre esta actitud emprendedora" porque, destaca, "las personas que ven el mundo desde esta actitud, trabajan desde su máxima autenticidad".
Ahora bien, también avisa que, en la actualidad, "el 50% de los jóvenes, cuando enfocan su investigación de trabajo, ya no sólo buscan a escala local" y esto es así "por el factor salarial y la actitud emprendedora", pero también porque "buscan generar un impacto a corto plazo y trascender con su trabajo". Si a todo esto se le suma el hecho que las personas que sí que tienen conocimientos digitales y estudios "no están satisfechas por temas de flexibilidad, conciliación... y esto los hace ir a otros ámbitos no tecnológicos".
Georgina Fors: "Los jóvenes de ahora buscan generar un impacto a corto plazo y trascender con su trabajo"
Con todos estos argumentos bajo el brazo, Fors tiene clara la estrategia: "Tenemos que enamorar a las personas con quienes tenemos contacto, todo el mundo quien tenemos al nuestro cercando y las personas que trabajan día en día porque nos continúen eligiendo, no queremos retener nadie, sino que nos elijan cada día". Y, para llevarlo a cabo, subraya, "es fundamental trabajar desde una confianza que te permita hacer equipo con los compañeros".
Decía Darwin que "no es lo más fuerte de las especies quienes sobrevive, tampoco es lo más inteligente. Es quien mejor sabe adaptarse al cambio". Si la tecnología se ha quedado obsoleta y los cambios pasan a la velocidad de la luz, hay que ir un paso más allá. Y, para hacerlo, no sólo se tienen que formar continuament aquellas personas que desarrollan trabajos tecnológicos como la programación, sino que el entorno tiene que aprender a adaptarse y también formarse para entender las personas que lo rodean. Talento digital ligado a sueños inspiracionals -cómo explica la directora de recursos humanos de tecnología a Schibsted Spain- para motivar los equipos. Y es que, concluye, "no llegamos a la luna porque fuera fácil".