EMPRESA
El acceso a las materias, la seguridad energética y la inflación, grandes riesgos de las empresas
El Institut Cerdà avisa de nuevas amenazas como la inestabilidad de las economías emergentes o el auge del proteccionismo
La incertidumbre en el acceso a materias primas y la energía seguirá siendo uno de los principales retos para las empresas en 2023, según el último observatorio de riesgos del Institut Cerdà. Tal y como ha indicado la institución, otros elementos como la inestabilidad de las economías emergentes o el auge del proteccionismo también serán amenazas relevantes para el sector económico en un contexto marcado todavía por los efectos de la guerra de Ucrania y la resaca económica y social de la pandemia. Para el presidente de la entidad, Salvador Alemany, la resiliencia y la capacidad de respuesta de las empresas comienza con el conocimiento de los riesgos que representan "una amenaza" por el entorno y las organizaciones.
Entre los retos identificados para este año con la ayuda de expertos e instituciones se encuentra la persistencia de la inflación, el incremento de las tensiones bilaterales entre países y la descarbonización acelerada de la economía. También se alerta de la falta de seguridad y accesibilidad energética, la escasez de materias primas y el desajuste entre la oferta y la demanda laboral. Sin embargo, persisten problemas como la desigualdad sociales, los fenómenos meteorológicos extremos y los ciberataques, entre otros.
El observatorio de este año, la segunda edición de este informe presentado en Barcelona, señala también retos emergentes y específicos por la economía española y catalana. Entre ellos destaca la "gran dependencia" del transporte de mercancías por carretera. En este sentido, se destaca que la mejora del transporte ferroviario es una "asignatura pendiente" que tiene "incidencia directa" en la competitividad de la empresa española.
Paralelamente, se avisa también del incremento del proteccionismo de los gobiernos de todo el mundo derivado de la volatilidad económica y del incremento de las barreras comerciales. "A escala mundial, en los últimos cinco años se han implementado cinco medidas proteccionistas para cada medida liberalizadora", avisa el Institut Cerdà.
Otro elemento particular es la incidencia de la inestabilidad de las economías emergentes y la exposición de las empresas españolas en la evolución de su entorno económico, social y regulador. A esto hay que sumarle elementos también ligados a la economía, como la pérdida de patrimonio natural y biodiversidad derivada de las consecuencias del cambio climático o el desgaste del bienestar físico y mental de las personas después de dos años marcados por la gestión y control de la pandemia.