B.Braun, de 'Can Tripes' a gran multinacional

El origen de B. Braun en España se remonta al año 1955. Fue la colaboración de la familia Braun con la familia Knuth, de origen alemán, el que hizo posible un acuerdo para el suministro desde Rubí de hilos de catgut, producidos con los intestinos de vaca, para la fabricación de suturas quirúrgicas. Conocida inicialmente por este motivo como 'Can Tripes', la empresa continúa hoy siendo familiar, puesto que desde 1992 es una compañía 100% propiedad de la familia Braun. Ya no es pero, pequeña, pues forma parte de una multinacional presente además de 60 países, con cerca de 56.000 empleados, una amplia gama de productos y líder en el suministro de productos de consumo hospitalario.

"Hoy, el 'Can Tripes' de Rubí de hace más de 60 años, a la carretera de Terrassa, se ha transformado en una planta productiva moderna con casi 2.000 trabajadores y 75.000 metros cuadrados, y es centro de decisiones estratégicas para España, Portugal y América Latina", explican Jesús Donado‐Mazarrón, consejero delegado de B. Braun Medical International, y Manuel Jiménez, director de Proyectos y Relaciones Institucionales, además de ex CEO de la compañía. Actualmente, al Grupo B. Braun se desarrollan soluciones terapéuticas para el uso en el ámbito hospitalario, extrahospitalari y también veterinario. Fabrica y comercializa productos farmacéuticos y sanitarios con plantas productivas en Europa, Asia, EE.UU., América Latina y África.

"La planta de Rubí fue un proceso gradual. Se inició con la fabricación del hilo de catgut, después se añadió la fabricación de soluciones parenterales, años más tarde se amplió a productos desechables y así, sucesivamente, se fueron tirando ampliaciones", relatan los dos representantes de B. Braun. Y añaden: "Se escogió Rubí para instalar una planta porque se encuentra en los alrededores de Barcelona y cerca de las arterias de comunicación por autopista para acceder en Europa". En Rubí, la actividad industrial se concentra en la producción de sueros, medicamentos solubles en agua y productos para el tratamiento y el cierre de heridas, concretamente las suturas quirúrgicas. Al Grupo, además, se fabrica una amplia gama de productos sanitarios desechables, instrumental quirúrgico, prótesis y apósitos, entre otros. La gama de B. Braun de 5.000 productos supera hoy las 120.000 referencias.

Objetivo: Seguir creciente
Después de 175 años, "la compañía se encuentra en pleno proceso de crecimiento", según sus dos portavoces. A pesar de la crisis, a B. Braun Rubí se han realizado los mayores niveles de inversión industrial de su historia, manteniendo importantes proyectos de modernización industrial. Así mismo, al Grupo también hay otros proyectos de ampliación y crecimiento. Para llegar hasta aquí, la clave ha sido "crear un equipo de profesionales competentes y comprometidos, invertir en formación y en R D, incorporar tecnología, automatizar los procesos, crecer en exportación y estar cerca de los profesionales de la medecina". La razón de su éxito ha sido, en este sentido, "estar atentos a las necesidades del sector sanitario y trabajar conjuntamente con los profesionales de la salud para mejorar la calidad asistencial".

Su facturación, a escala de Grupo, supera los 6.000 millones de euros, y en América Latina y la península Ibérica, su área de responsabilidad ronda los 800 millones de euros. "La compañía ha ido incrementando su volumen de negocio debido a la incorporación de nuevos mercados y con el apoyo a nuevas terapias", explican los representantes. También han crecido en Responsabilidad Social Corporativa. Uno de los valores principales de la organización es la sostenibilidad: cuidar el medio ambiente, la conciliación familiar, el apoyo al desarrollo personal, el comportamiento ético y la ayuda a proyectos sociales orientados a la infancia, entre otras cosas. En este sentido, tanto a escala local como internacional, la empresa apoya a causas solidarias.

Igualdad y flexibilidad laboral
A B. Braun Rubí, según los últimos datos, hay 1.811 trabajadores, 911 hombres y 900 mujeres, resultado de trabajar la política de igualdad en el ámbito laboral. "En las áreas técnicas y administrativas no nos fijamos en el sexo de los profesionales, sino en su competencia y su actitud ante sus responsabilidades. En las áreas productivas y logísticas, la oferta de lugares es abierta, pero los candidatos tienden a ser de un sexo o de otro de forma natural en función de la naturaleza del trabajo", explican.

A la empresa, además, se facilita la conciliación laboral de los empleados de diferentes maneras: con horarios flexibles, horarios adaptados a obligaciones familiares y reducciones de jornada, entre otros.

Nuevos retos
Los proyectos de futuro de la empresa pasan, en estos momentos, para "seguir invirtiendo en el desarrollo de productos y servicios, continuar apostando por la tecnología y la automatización, abrir nuevos mercados, establecer acuerdos y mejorar el sector. El futuro es un mundo en movimiento e interconectado donde se tiene que aportar si se quiere recibir", apuntan los dos responsables.

También tienen previsto la apertura de nuevos centros. Recientemente han abierto un nuevo centro de diálisis en Martorell y un centro productivo de dietas parenterales personalizadas en Madrid. El nuevo centro productivo para productos farmacéuticos de Rubí, por otro lado, ya ha finalizado con la instalación de cuatro líneas productivas y con espacio para dos o tres adicionales que se instalarán los próximos años.