La Cueva de en Xoroi, una discoteca de leyenda
El local, con más de 50 años y ubicado en Menorca, se ha convertido en visita obligada para todos los turistas que vienen a la isla, tanto para los más jóvenes cómo para las familias con niños
La Cueva de en Xoroi podría ser una discoteca cualquier si no fuera porque está situada dentro de una cueva arriba de un acantilado de Cala en Portero, en Menorca. Pero aparte del toque singular que puede ser una cueva convertida en local por la noche, también tiene su encanto. Y es que la Cueva de en Xoroi alberga la leyenda de una historia de amor. A simple vista, tiene todos los ingredientes para convertirse en un local de éxito, y así lo ha conseguido más de 50 años después de su apertura. Hoy en día, la Cueva de en Xoroi es visita obligada para muchos turistas que visitan la isla y cada verano recibe unas 150.000 personas. Una nueva temporada estival que ha arrancado ya este fin de semana.
La leyenda de la Cueva de en Xoroi se remonta siglos atrás, cuando la cueva fue testigo de una historia de amor. La de Xoroi, un hombre que llegó por mar en Menorca y se refugió en una cueva, y la de una mujer de Alaior que desapareció cuando estaba a punto de casarse. Después de años sin saber nada de la chica desaparecida, una nevada hizo aparecer huellas que trajeron a un grupo de hombres armados hasta la cueva, donde encontraron a Xoroi, con la joven alaiorenca y tres hijos nacidos de su amor. Al verse acorralado, Xoroi y su hijo grande se lanzaron al mar, mientras que la mujer y los otros dos hijos fueron traídos de nuevo al pueblo de Alaior.
Hasta el 1965, la Cueva de en Xoroi era simplemente una cueva arriba de un acantilado con una leyenda popular. Pero hace 53 años un grupo de amigos de Alaior –Àngel Hidalgo, Bernat Mascaró, German Llopis y Patricio Piris- decidieron remodelarla para construir una discoteca. "En aquella época conseguir los permisos para condicionar una cueva era bastante fácil, pero echar el negocio adelante en un momento en el cual casi no había turismo en Menorca fue más complicado", explica el actual director general de la Cueva de en Xoroi e hijo de uno de los fundadores, Miquel Mascaró.
Los menorquines, los principales prescriptors de la Cueva
Los cuatro fundadores habían visto que el turismo empezaba a surgir en Cataluña y otros territorios de la Península y, con la esperanza que también llegara a Menorca, pusieron en marcha el proyecto con un modelo de negocio bastante similar al de hoy en día. Desde los años 60, la Cueva de en Xoroi se enfocó al ocio nocturno, con los conciertos en directo y las copas. "Pero cómo que casi no había turismo, se centraron mucho en la población local. Y esta ha sido una de las variables que más ha ayudado al negocio, puesto que la misma gente de Menorca ha sido prescriptora de la Cueva", señala Mascaró.
En la trayectoria de esta empresa se pueden diferenciar dos fases: la que va del 1965 a final de siglo y la que va del año 2000 hasta hoy en día. A partir del cambio de siglo, se introdujo una gestión más profesional al frente de la compañía y se acabó de definir bien el modelo de negocio tal como lo conocemos hoy en día. Además del impulso que le da el turismo.
A partir del año 2000, la Cueva de en Xoroi empieza a crear más productos hasta el punto de ofrecer actividades durante todo el día y la noche. Y es que el local, durante la temporada alta de verano, abre todos los días de la semana desde las 11 horas de la mañana hasta muy entrada la madrugada. De este modo, ofrece actividades para todo tipos de target : desde la familia con niños que puede visitar la cueva durante el día, el público más adulto que quiere ver la puesta de sol tomando una copa y disfrutando de música en directo, hasta el ocio nocturno al estilo discoteca. Además, también realizan visitas turísticas guiadas entre las 15 y las 17 horas de la tarde.
Una programación 24/7
De todos los productos que ofrece la Cueva de en Xoroi, la puesta de sol y conciertos en directo es, "sin lugar a dudas", el que tiene más pes dentro de la facturación total de la empresa y constituye la parte principal del negocio. Cosa que se debe de, también, "al hecho que es la actividad que más se adapta al tipo de turismo que viene a Menorca", explica el empresario, quien añade que "el turista de aquí no busca la fiesta de Ibiza, por el que prefiere venir a tomar una copa antes de cenar y ver la puesta de sol después de hacer el día a la playa".
En la trayectoria de la empresa, se distinguen dos fases: antes del año 2000 y después, cuando entró una gestión más profesionalizada
La entrada para ver la puesta de sol a la Cueva de en Xoroi, con una consumición y música en directo es de 14 euros, mientras que durante el día las familias pueden visitar el establecimiento por 10 euros los adultos y 5 euros los niños. Cuando sube algo más el precio es durante la noche, puesto que "tenemos unos costes de seguridad elevadísimos", apunta el empresario. El local cuenta cada noche con 5 o 6 personas de seguridad.
"No es una entrada económica, pero todavía estamos muy lejos de los elevados precios del ocio nocturno de Ibiza", explica Mascaró, quien apunta que no pueden trabajar por menos debido a la cantidad de personal que necesitan. El mínimo para funcionar son 12 trabajadores pero en verano casi multiplican por cinco el personal. "Este año hemos llegado a ser 58 personas trabajando", señala. Y es que la Cueva de en Xoroi abre 20 horas diarias y, además, necesita personal de mantenimiento, limpieza y seguridad.
Por otro lado, la empresa también cuenta con una productora musical para todos los conciertos en directo que ofrece. Algunos de los músicos que actúan a la Cueva de en Xoroi son lo ciutadellenc Shanti Gordi, que fue uno de los finalistas de la cuarta edición del programa La Voz o el músico Guiamos Soldevila. "El 80% de los músicos que actúan a la Cueva son bandas menorquinas, a pesar de que también tenemos grupos que vienen de fuera", explica Mascaró.
Temporada alta, baja y cierre
Cómo muchos de los establecimientos turísticos de la isla, gran parte de los ingresos de la Cueva de en Xoroi se obtienen durante los meses de temporada alta, que van del 1 de mayo al 30 de septiembre. Los meses de verano, la empresa ofrece la programación completa, mientras que el resto de meses que van de marzo a medianos noviembre se reducen el número de actividades. De noviembre a marzo, la Cueva de en Xoroi permanece cerrada, principalmente debido al tiempo meteorológico. "Nos condiciona mucho porque al estar arriba de un acantilado, si hace daño tiempo no podemos abrir por temas de seguridad", señala Mascaró.
Es por este motivo que a la empresa le compensa más estar tres meses y medio cercados. Durante este tiempo, la compañera aprovecha para hacer el mantenimiento de la cueva y los controles de seguridad tan exigentes que tienen que realizar por el espacio donde se ubica la discoteca. Sin embargo, este domingo la Cueva de en Xoroi ha abierto puertas de nuevo para sus actividades de día.
Las puestas de sol es la actividad principal del negocio y la que tiene un peso más grande dentro de la facturación de la empresa
Según el director general de la Cueva de en Xoroi, que cada verano consigue el aforo completo. El año 2000 triplicaron el número de visitantes y "ya no podemos crecer más durante la temporada alta". Donde sí que tienen que enfocar el crecimiento son los meses de las colas, es decir, de marzo a mayo y el octubre y noviembre.
Aun así, Mascaró alerta que esto también depende de la cantidad de turismo que venda en la isla. "Durante la temporada baja tenemos que buscar maneras de motivar la entrada de turistas en Menorca. Es la mejor época, puesto que la isla no está masificada y hay posibilidades de hacer actividades al aire libre", señala el empresario, a la vez que hace un llamamiento a las administraciones y empresas a trabajar todos juntos para impulsar el turismo fuera de temporada alta, puesto que en Menorca "los tres meses de verano ya están completamente garantizados".