Mercado laboral
Las puertas giratorias del proceso
El camino hacia la independencia devuelve al sector privado muchos políticos que abandonan la primera línea para incorporarse en el mundo laboral
El proceso independentista ha sido un terremoto por el sistema político catalán y ha centrifugat muchos políticos aferrados (o no) a la silla hacia el sector privado. Precisamente este martes el consejo de administración de Aguas de Busot de Banyoles ha nombrado el ex consejero Santi Vila nuevo director general. Vila fue alcalde de Figueres y después consejero de Territorio y Sostenibilidad, más tarde consejero de Cultura y finalmente ocupó la consejería de empresa y Conocimiento hasta que dimitió para estar en desacuerdo con la Declaración de Independencia. Pero no es el único, otros nombres destacados como Jordi Baiget, Felip Puig, Andreu Mas-Colell, Josep Antoni Duran y Lleida, Carles Mundó o Joana Ortega, entre muchos otros, ya han vuelto a trabajar lejos de la política. O no tan lejos.
El predecesor de Vila al frente de la consejería de empresa y Conocimiento fue Jordi Baiget. Una entrevista a El Punt Hoy lo puso contra la espada y la pared durante julio de 2017. Y abrió así la lista de dimisiones y cesados antes del referéndum. El pasado 23 de Octubre, fichó como director general de Sermetra. Una filial de la Autoridad del Transporte Metropolitano que se dedica a explotar, gestionar y mantener el sistema de validación de los autobuses. Según la Cadena Ser, Baiget tiene un sueldo de 97.000 euros sucios por año.
De empresa a la empresa
Acostumbrado al foco mediático y a menudo también a la polémica, Felip Puig sigue haciendo carrera a caballo entre la política y la empresa. El ex consejero convergente de Medio ambiente, Interior y Empresa fundó la consultoría Godes FP a mediados de mayo del 2016 especializada en "intermediación y realización de estudios técnicos y proyectos" tanto a escala empresarial como jurídica. Hace poco más de un año, se convirtió también en presidente de TRAMO, la concesionaria del tranvía en Barcelona que es princpalment propiedad de Globalvia, Alstom y Moventia. Un nombramiento que contó con el firme rechazo de la alcaldesa de Barcelona, Ada Coláis. De formación ingeniero, Puig ha aparecido también a las quinielas para presidir el Puerto de Barcelona o Ferrocarriles.
Antes de Vila, Baiget y Puig, el consejero de empresa era Francesc Xavier Mena. Con el permiso de la política, su pasión era más bien académica: catedrático de Economía de Ramon Llull y profesor de Esade en ramas de dirección económica, de marketing u operaciones. Es un habitual de escuelas de negocio de todo el mundo. De Buenos Aires en Shanghai pasando por Lima. Con una larga experiencia en el mundo de la consultoría, ha impulsado proyectos en 48 países diferentes e incluso ha trabajado al departamento de Sistemas y Control del Banco Sabadell. A su currículum, no falta tampoco todo tipo de publicaciones.
El académico de vida
La vida de Andreu Mas-Colell ha alternado siempre la política y la economía. Consejero de Universidades durante los últimos años de la era Jordi Pujol y consejero de Economía y Conocimiento durante la época de Artur Mas, su escuela han sido las aulas. Para aprender y explicar. Reconocido internacionalmente por sus nociones teóricas sobre la microeconomía y la teoría de juegos, fundó la Barcelona GSE para colocar la capital catalana en los mapas de todo el mundo. Al menos, en investigación e investigación. Como académico ha trabajado a la UPF, Berkeley o Harvard. Ahora escribe libros, publica artículos, imparte clases de microeconomía a la UPF o preside del premio a las ciencias e ingeniería de la Fundación Banco Sabadell.
Abogados y procuradores
El político de la ya desaparecida Unión, Josep Antoni Duran y Lleida, aseguró que no podía cambiar la política por la docencia: "De que viviré, que comeré?". Según él, los profesores "lo pasan muy mal, no ganan bastante, por lo tanto no tendría bastante". Duran también opinó anteriormente "los sueldos a la política son insuficientes" y que los políticos españoles "cobran poco en comparación con otros países". Pues bien, el licenciado en derecho se dio de alta al Colegio de Abogados de Barcelona y ya trabaja como abogado al bufete de la familia de su mujer, el bufete Cuellos que fundó su suegro, Josep Cuellos Alsius y y del cual su mujer es socia, así como su cuñado. Después de 30 años en política, el de Alcampell vuelve al sector privado.
Otro político que se ha tenido que buscar la vida después de la desaparición de Unión es el exdiputado del Congreso Josep Sánchez Libro. Con más de 24 años de trayectoria política, fichó el octubre de 2016 por la CEOE como adjunto del presidente Joan Rosell. Su función es principalmente organizativa: gestionar las relaciones con las cortes y potenciar las líneas estratégicas empresariales. Previamente, ya había formado parte de la asamblea general de la CEOE como representante de Fomento del Trabajo. A la vez, también es vicepresidente de Conservas Dani capitanejada por su hermano y expresidente del RCD Espanyol Daniel Sánchez Libro.
Otro abogado que volverá a trabajar después de su paso por la política es Carles Mundó. El diputado electo y consejero de Justicia cesado por el Estado ha renunciado al acta y su escaño al Parlamento, conseguido a las últimas elecciones del 21-D con ERC. La decisión implica su regreso a la abogacía que ejercía antes de aterrizar a la vida política en el Bufete Vallbé de Barcelona. Esta renuncia no implica, pero, desvincularse de su partido, ERC, con quien afirma que seguirá manteniendo un firme "compromiso". Mundó enmarca la decisión en un ámbito de motivos estrictamente "personales".
El exportaveu del Gobierno y licenciada en Derecho, Neus Munté, también ha dado un paso junto a la primera fila política. De todos modos, ha encontrado un buen lugar de trabajo a la segunda línea. La ex consejera y vicepresidenta del PDeCAT se ha incorporado como nueva asesora del grupo de su partido al área Metropolitana de Barcelona (CON), cargo que compagina con la presidencia interina de su formación, después de la renuncia de Artur Mas.
Munté, sin atribuciones públicas desde que el julio pasado dimitiera como consejera de Presidencia del Gobierno, se ha incorporado como asesora, un cargo remunerado con 49.437 euros anuales.
El consultor de Uber
El exdiputado de CIU y extinent de alcalde de Ripoll Xavier Cima colgó las botas por amor. Casado con Inés Arrimadas desde el 30 de julio de 2016, su perfil siempre ha sido más empresarial que político. Se ha dedicado a la consultoría estratégica durante más de 10 años y ha ejercido de presidente del consejo de administración de la sociedad de aguas de Ripoll Somasrsa. Junto con su amigo y exdiputado de Unión Roger Muntañola, fundó la plataforma de talento Twenty50 y Diplolicy que asesora empresas de la talla de Uber. Cima también es CEO y fundador de Diplodat Techonologies centrada en el Big Data, la inteligencia artificial o el Machine Learning y es miembro de Barcelona Tech City.
De Agricultura a hacer aceite
La psicóloga fashion
El exvicepresidenta Joana Ortega plegó del Gobierno de Mas el 22 de junio de 2015, cuando CiU se rompió y Unión decidió dejar sus funciones en palacio. Ortega marchaba con una querella por el 9-N y empezaba a buscarse la vida para reincorporarse en el mundo laboral. La licenciada en psicología desde el 2014 abrió un showroom de moda italiana junto con el asesor de imagen Rafael de Valle llamado SottoVoce. También puso en marcha una consultoría para asesorar particulares, empresas en materia de transparencia, gestión de crisis, talento e imagen de marca. Además, también imparte clases al máster en Dirección Pública de la Escuela de Administración Pública de Cataluña (EAPC), que dirige el historiador Agustí Colomines.
Su curso se titula El directivo/va ante situaciones conflictivas y tiene como objetivo "aprender a gestionar situaciones conflictivas, extremas y/o imprevistas, mediante la exposición y análisis de casos reales como el caso Germanwings, el proceso participativo del 9-N y la reforma de la Administración Pública en Cataluña.
Del Parlamento en el Sabadell
El exdiputado y exportaveu socialista Mauricio Lucena cambió la política por el sector privado a mediados de 2016. Concretamente, como director de control financiero y de rentabilidad de las inversiones del Banco Sabadell. Con trayectoria política y empresarial a Hispasat Canarias, el Centro por el Desarrollo Tecnológico Industrial o la Agencia Espacial Europea, Lucena no depende ya de Pere Navarro o Miquel Iceta sino de Tomás Varela, director general y responsable financiero de la entidad presidida por Josep Oliu. Una curiosidad: Lucena es exalumne de Mas-Colell. Quien también trabaja en el Banco Sabadell es el exdirector general de promoción económica de la Generalitat Albert Carné, entonces mano derecha de Mas-Colell. Ahora, ejerce de director de responsabilidad social corporativa del banco catalán. Al final, parece que todo es cuestión de buscarse la vida más o menos allá de la política.