LABORAL

Tres denuncias contra Uber Eats por un presunto delito contra Hacienda y la Seguridad Social

Elite Taxi, Riders por Derechos y Txi Project 2.0 acusan a la plataforma de llevar a cabo un "abuso de la figura del falso autónomo"

Elite Taxi, Riders por Derechos y Txi Project 2.0 han presentado una denuncia contra Uber Eats por un presunto caso de estafa y delitos contra los trabajadores, Hacienda y la Seguridad Social. Los tres querellantes entienden que, desde el aterrizaje en España en 2017, la plataforma ha llevado a cabo un "abuso de la figura del falso autónomo para hacer crecer exponencialmente el mercado del reparto a domicilio". A partir de la llamada ley Rider, las entidades afirman que Uber Eats ha pasado de los falsos autónomos a la subcontratación temporal, para externalizar "fraudulentamente" toda la actividad a empresas "que imponen rotación e inestabilidad entre los trabajadores", si bien "sigue estableciendo las condiciones" y "disfrutando de las rentas de su trabajo".

Por todo ello, las tres organizaciones consideran que Uber Eats ha ideado un "modelo para fraude y lucro ilícito" utilizando "falsos autónomos para simular trabajos en beneficio propio y perjuicio de los trabajadores, a los que engañó aprovechando la necesidad de trabajo existente y la vulnerabilidad". Hace un año, Comisiones Obreras presentó una queja a Inspección de Trabajo para frenar el trato “precario” que la empresa de reparto a domicilio, según el criterio del sindicato, quería dar a sus riders. En ese momento, desde Uber Eats se defendía que si cumplen la norma y esgrimen, que los riders podrán tener "más control sobre su actividad" como, por ejemplo, establecer sus propias tarifas.

CCOO denuncia que los trabajadores autónomos no tienen derecho a contratos indefinidos, a vacaciones retribuidas, a ser incluidos en la ley de riesgos laborales, a baja médica y por accidente laboral, a tener representación sindical ya la información de los algoritmos que impactan en las condiciones laborales, una de las novedades que incluyó la ley. Asimismo, el sindicato cree que los repartidores a domicilio se están viendo obligados a aceptar la contratación como autónomos debido a la precariedad que muchos sufren y exigen que "deberían ser asalariados con condiciones dignas" en vez de tener una contratación parcial con baja remuneración. Por otra parte, Uber Eats defiende que los cambios "estructurales" que han implementado se ajustan al "marco regulador actual". Por ejemplo, aseguran que la app permite a los trabajadores establecer la tarifa mínima, conocer los detalles del pedido antes de aceptarlo o escogido cómo y cuándo cobrar.