Abierto por los turistas
La ciudad más turística del país dispone sólo de cinco domingos de apertura comercial: tres al mes de mayo y dos más en octubre.
El turismo de la ciudad no es sólo de vacaciones, está vinculado también a negocios, congresos, ferias, cultura, gastronomía, medicina, etc. Su elemento transversal es el turismo de compras. El shopping se nutre de todas las variantes del turismo. Por eso el turismo es tan importante en la actividad comercial de Barcelona. Además, la ciudad tiene el privilegio de haber sabido conjugar la oferta comercial dentro de la trama urbana perfectamente integrada con la arquitectura, el urbanismo, la gastronomía, los museos... Esto lo hace todavía más atractivo.
Consistorio, comerciantes y ciudadanos tenemos un gran reto por adelantado: mantener la identidad comercial que hace de Barcelona una ciudad diferente desde el punto de vista de shopping . Barcelona es la cuna y referencia en cuanto al shopping 'asequible'. De nuestra ciudad han nacido muchas marcas que ahora tienen gran proyección nacional e internacional. Por lo tanto, tenemos que creer en la capacidad competitiva de nuestro comercio y tenemos que confiar que el comercio local, por su singularidad, puede tener vocación de crecimiento para competir con otros formatos y a la vez ser el elemento diferenciador por los turistas que nos visitan en contraposición con la estandarización que nos ofrecen las cadenas globales.
"La ciudad más turística del país dispone sólo de cinco domingos de apertura comercial"
Por suerte, cada vez son más los comercios locales que descubren la oportunidad que significa captar las divisas que nos llegan del turismo, principalmente porque estas compras son siempre físicas, nunca online. En una situación de recuperación del consumo lenta, no podemos dejar perder oportunidades de ventas por el hecho de tener una medida tan restrictiva. Además, el actual calendario de apertura en festivos en mayo y en octubre obliga a intensificar la inversión en promoción para informar sobre cuando están abiertos los comercios y cuando no, mientras que si se aplicara una continuidad, se produciría más coherencia y también mejores resultados.
Todos tendríamos que percibir las bondades del turismo de compras, así como también la posibilidad de hacer extensiva esta realidad a otros ejes comerciales de la ciudad con potencialidad turística como Los Encantos, Glorias, Gaixample, Gaudí, Sant Antoni, Pueblo Nuevo, Diagonal o Gran Vía, para citar algunos.
"Barcelona es la cuna y referencia en cuanto al shopping asequible"
La oferta comercial de la ciudad en su conjunto contempla un gran número de establecimientos locales, de proximidad, singulares, oferta made in Barcelona capaz de ofrecer experiencias de compra diferentes y alejadas de la estandarización y la globalización. Hace falta que los esfuerzos de promoción vayan en esta línea, con objeto de democratizar al máximo los beneficios del turismo de compras, especialmente en lugares donde hasta ahora no lo han experimentado. Sólo así podremos hacer entender la necesidad de tener un calendario de domingos de apertura mucho más extenso, que nos beneficie a todos y sea una oportunidad por el sector comercial.