OPINIÓN
MWC: 5G, IA y la Renfe
Del próximo lunes a jueves se celebra al recinto de Gran Vía de Barcelona la edición del 2019 del Mobile WorldCongress . Este año el lema del congreso es Intelligent Connectivity que se declina en ocho grandes temas: la conectividad, la Inteligencia Artificial, la Industria 4.0, los contenidos inmersivos, la innovación disruptiva, el bienestar digital, la confianza digital y el futuro.
"Hablar al móvil para decirle que nos acuerde de bajar la basura, preguntarle cuánto tardaremos en coche hasta el trabajo o que se nos desbloquee por la cara son cosas que hace sólo diez años sólo le funcionaban a James Bond"
Vamos por partes. Los cinco primeros ya estaban el año pasado. Y el otro, y hace tres. De conectividad, de redes 5G, de más velocidad y de menos latencia y consumo ya hace tiempo que hablamos. La novedad de este año pero, es que el 5G ya no es la joven prometida: empezamos a ver los primeros terminales comerciales con 5G, la primera llamada mundial con un terminal 5G ( Albert Cuesta lo explica muy bien en un apunte a su blog), y el primer quirófano del mundo con esta conectividad al Hospital Clínico de Barcelona. El 5G, con unas velocidades de hasta 20 Gbps (hasta 20 veces las actuales), una latencia de la orden de 1 ms (50 ms en 4G) y con unas conexiones más baratas permite aplicaciones como las operaciones a distancia o en general la telepresència. Con 5G conducir un coche a la otra punta del mundo desde el sofá de casa es posible y de hecho uno de los puntos de interés de este Mobile será el circuito Parcmotor Castellolí-Barcelona donde veremos coches conectados autónomos. En esta línea Seat presentará junto con Telefónica un prototipo de coche autónomo.
De IA también hace años que hablamos. El problema es que no sabemos muy bien qué es además de un reclamo marquetinià. De definiciones hay tantas como autores, pero la que encuentro más estimulante es la del ingeniero Larry Tesler que dice que "Inteligencia es todo aquello que las máquinas todavía no han hecho". Cuando un ordenador es capaz de hacer una tarea que consideramos inteligente pasa a ser percibida como no inteligente. Nuestros móviles son llenos de IA, de hecho, no funcionarían sin. El que pasa que como que inconscientemente los aplicamos el teorema de Tesler no nos damos cuenta. Hablar al móvil para decirle que nos acuerde de bajar la basura, preguntarle cuánto tardaremos en coche hasta el trabajo o que se nos desbloquee por la cara son cosas que hace sólo diez años sólo le funcionaban a James Bond.
Y el tema que me apasiona más es el último: el del futuro. Si nadie previó los cambios económicos, políticos y sociales que han comportado la confluencia de la web, los móviles, las redes omnipresentes y los satélites GPS es además pensar cómo será el futuro. Sobre todo porque este futuro se basa en un presente de tecnologías exponenciales y combinatorias; con el solapament de átomos, bits y nada; con Google indexando el mundo y nuestras constantes vitales; con una Internet de las Cosas siempre conectada y a velocidad 5G; con algoritmos de IA capaces de aprender y de decidir a la velocidad de la luz; y con todos nosotros traspasando a la nube nuestro conocimiento del mundo con los datos que generamos.
"Este futuro se basa en un presente de tecnologías exponenciales y combinatorias; con el solapament de átomos, bits y nada; con Google indexando el mundo y nuestras constantes vitales; con una YATE siempre conectada y a velocidad 5G..."
Y además de hablar de futuro, al MWC también se presentarán móviles más potentes, móviles con pantallas plegables y una marca reeditará un de sus modelos de los años 90 que hará pasar por retro con una tecnología totalmente renovada. Pero esto todo esto es presente.
Epílogo:
He empezado este artículo a la estación de Renfe del Hoyo mientras a los altavoces anuncian que los trenes de la línea R1, la que va hacia el Maresme, van con retraso. Finalmente llega el tren que tenía que coger con 15 minutos de retraso que dejo pasar porque va pleno como un huevo. Cómo que van cómo quieren, a la cabeza de dos minutos llega un donde veo que hay lugar para sentar. Va tan vacío que no hay ni carrerillas para coger asiento. Es el día antes de la huelga general del día 21, los trenes ya van de cualquier manera y tengo la batería del móvil al 9%. Es la misma línea que el lunes 25 a las seis y media de la mañana tendré que coger para echar hacia el MWC. Que el futuro llegue rápido.