OTAN: el fin de la limosna
La noticia de la reunión de la OTAN en Madrid ha pasado sin pena ni gloria en los medios internacionales. En España la propaganda desplegada por los medios del Régimen -es decir, casi toda- ha sido espectacular. Y de una gran utilidad. Yo creo -no lo sé, pero me lo imagino- que el trato propuesto por España -el Estado, quiero decir todos, gobierno y oposición- en la OTAN ha consistido en un intercambio del tipo: "Puesto que tengo que doblar el gasto en defensa, organiza el show en España. No os defraudaremos". La opinión pública lo ha aceptado porque las gotas amargas iban en terrón de azúcar. ¿O alguien se piensa que la chulería del público español ha desaparecido? "¡Tenemos que pagar más, pero somos un socio tan importante que resulta que se reúnen en nuestra casa!". Quiero decir que la aprobación de l'incremento de gasto en defensa hasta llegar al 2% del PIB a lo largo de los próximos años está ahora garantizado en el Parlamento español gobierne quién gobierne.
¿Y quieren que les diga una cosa? Que esto es lo que tocaba. España lleva viviendo del lismosnita de todo el mundo demasiados decenios y tiene que empezar a cumplir con sus responsabilidades. Estar en la OTAN es necesario y, para España, obligatorio. Por varias razones. Una es que en caso de agresión no podríamos defendernos. Pero la más importante, para mí, es que mientras España pertenezca a organismos supranacionales iremos mejor. España necesita estar supervisada. Y con las cosas de defensa no se juega.
España lleva viviendo de la limosnita de todo el mundo demasiados decenios y tiene que empezar a cumplir con sus responsabilidades
Total, que los aliados, con necesidad de financiación debida a la guerra de Ucrania, han dicho que ya era hora que algunos de los miembros dejaran de tener la barra que demuestran. ¿Por qué? Porque la OTAN es como un seguro. Y si quieres que, en caso de necesidad, te cubra los daños, tienes que pagar la cuota. Miren la contribución a defensa de los miembros actuales, a fecha de 2021 (% del PIB): Datos extraídos de la OTAN
Guapa España, ¿no? Pero hay otros que, a la vista de lo que ha sucedido en Ucrania, tendrán que hacérselo mirar. El vicio adolescente de pensar que se puede coger el coche del padre (Estados Unidos) cuando se necesita y que, por coletilla, el depósito está siempre lleno, se ha acabado.
Y les diré una cosa. Vayámonos acostumbrando a gastar aquello que generamos. Los rasgos de los próximos años irán por aquí. Hasta ahora hemos pretendido tener derechos sociales (y de defensa) de estética germánica con esfuerzo de estética latinoamericana. Hemos ido prometiendo a Europa que mejoraríamos, pero no ha sido el caso. Algunos economistas auguran dos velocidades para Europa. Pero no políticas como hasta ahora, sino económicas -países muy gobernados versus países mal gobernados-. Y si España quiere sacar pecho y no reconocer que es un país de segunda, se tendrán que hacer recortes presupuestarios. Y reformas a fondo. Miren quién paga la fiesta en la Unión Europea.
Contribución neta en el presupuesto de la UE en el periodo 2000-2018 (miles de millones de euros). En positivo la cantidad recibida neta, en negativo la cantidad aportada neta. Atención a Italia, a la que siempre nos queremos arrambar. Datos extraídos de EUROSTAT
¿Motivos para la alegría? ¿Todos. Se imaginan si no fuéramos miembros ni de la UE ni de la OTAN?