OPINIÓN
Empieza 2023. Estad atentos
Estamos a punto de empezar 2023, el tercer año de la tercera década del tercer milenio. El año 1401 del calendario persa, el 1445 del calendario musulmán, el 4719 del calendario chino, que este año será del conejo, y el 5783 del calendario hebreo. Este año hará ochenta años que nació Janis Joplin y cuarenta que murió Nikola Tesla. 25 años que Mónica Lewinsky saltó a la fama y 75 que asesinaron a Mahatma Gandhi. Hará solo 5 años que murió Stephen Hawking y Aretha Franklin, y 50 que asesinaron a Salvador Allende y que nos dejaron Pablo Neruda, Nino Bravo y Bruce Lee.
Claramente, el tiempo es relativo, y muy extraño. Me cuesta asimilar que Nikola Tesla estaba vivo cuando yo tenía 16 años, o que es casi seguro que Mahatma Gandhi escuchó a Janis Joplin cantando Summertime. James Joyce y Virginia Woolf nacieron el mismo año, y también murieron el mismo año, y fueron coetáneos de Pío Baroja, Unamuno, Al Capone y Coco Chanel. Pitágoras, Siddharta Gautama (Buda) y Confucio coincidieron en el tiempo. En 1783 Inglaterra reconoció la independencia de los Estados Unidos y casi enseguida en 1789 comenzó la revolución francesa, con la toma de la Bastilla. Gaudí fue coetáneo de García Lorca. Mark Twain y Nikola Tesla eran muy amigos, como también lo eran Arthur Conan Doyle y Harry Houdini, o Groucho Marx i T.S. Elliot. Michele Léglise estaba casada con Boris Vian y decidió vivir con Jean-Paul Sartre.
Cada día, cuando vamos por la calle, vamos coincidiendo con diferentes personas. Pasamos al lado de unas sin prestar atención, nos saludamos con otras, las hay que nos despachan el pan o una lechuga, y otras a las que dejamos pasar o nos apartamos para no tropezar o no molestar. Las hay que nos miran y no las vemos, y otras a las que miramos y nos daría vergüenza que lo vieran. En general pasamos bastante desapercibidos y estamos rodeados de gente que nos pasa desapercibida. Vamos haciendo, intentando ser amables cuando toca y tratando de no molestar demasiado a nadie. Y en medio de todo este movimiento y de todo este anonimato, de repente, levantas los ojos y te sorprendes. O sientes curiosidad. O te fascinas. O te enamoras. Alguien que te llama la atención por lo que acaba de decir, por lo que acaba de hacer, o sencillamente por el gesto de su mano o el olor que ha dejado al pasar a tu lado. Nunca sabes cuándo coincidirás con la persona que te puede cambiar la vida. Y cuando la encuentras, vete a saber cuántas veces ya habíais estado muy cerca, tentando a la suerte de la vida.
Nunca sabes cuándo coincidirás con la persona que te puede cambiar la vida
Channon y Dan son una pareja sudafricana que se conocieron durante la pandemia gracias a Bumble, una aplicación de citas como la famosa Tinder. Empezaron chateando y se acabaron gustando y viviendo juntos. Descubrieron que habían ido a la misma universidad y les hizo gracia pensar que probablemente mientras estudiaban quizás ya habían ido coincidiendo sin que nunca uno se hubiera fijado en el otro. Ellos eran usuarios de Google, tenían Google Maps en su móvil y si no dices lo contrario la compañía americana va registrando en el mapa los lugares por donde te vas moviendo, así que decidieron utilizar estos datos para estudiar si habían coincidido físicamente antes de salir juntos. En un período de cinco años, Google había registrado 2.729 coordenadas suyas, y averiguaron que años antes de ser pareja habían estado 33 veces a menos de 100 metros el uno del otro.
Durante tres años se cruzaron una vez cada quince días, sin verse. Uno quizás mirando al suelo, el otro quizás distraído, pasando al lado de la persona que amaría. En concreto, el 16 de agosto de 2017, tres años menos una semana antes de ser pareja, Google dice que estuvieron juntos en la misma cafetería.
Estad atentos.