Opinión

'Wellness' corporativo: la solución al absentismo laboral?

Por trabajo y porque mi marido es de San Diego, voy muy a menudo en los Estados Unidos donde siempre aprovecho para llevarme algo interesando para compartir. En este caso os hablaré del corporate wellness, del porque de su popularidad en los EE.UU. y de cómo podemos aplicarlo a nuestras empresas.

En un principio, puede parecer paradójico que en un país de capitalismo extremo con una clara orientación a los resultados y donde la productividad y la rentabilidad no se cuestionan, las empresas destinen una gran cantidad de sus presupuestos (alrededor de 8.000 millones de dólares durante el 2017) a programas de bienestar corporativo para que su personal lleve una vida más saludable y disfrute de entornos libres de estrés.

Sin embargo, los americanos, como ya sabéis, no invierten porque sí. En los Estados Unidos se paga un precio altísimo para poder disfrutar de asistencia médica y uno de los objetivos de las empresas es ofrecer a sus trabajadores beneficios sanitarios para fomentar la atracción y retención de talento. En un país donde la tasa de paro es del 3,7% y dónde no es extraño que los y las trabajadores/nada tengan varias ofertas de trabajo, el employer branding se cuida y se tiene mucho en cuenta.

"Puede parecer paradójico que en un país de capitalismo extremo, las empresas destinen una gran cantidad de sus presupuestos a programas de bienestar corporativo"

Esto nos podría hacer pensar que, en nuestro país, al disfrutar de un sistema sanitario público y accesible y una tasa de paro del 14,8% (última publicación datos paro) no necesitamos invertir en wellness corporativo. Aun así, si miramos las cifras más en detalle, veremos que no es así. Desgraciadamente, somos uno de los países con la tasa de absentismo laboral más alta de Europa. Según el VII informe publicado por Adecco, las empresas españolas perdieron 75.449 millones de euros durante el 2017 (un 10,5% más respecto al año anterior) debido al absentismo laboral, que ha crecido un 21% en los tres últimos años. Esto significa 11,6 días al año perdidos por cada trabajador (a diferencia de los 4,9 días perdidos en los EE.UU.) y una bajada de la producción y productividad considerables.

Siguiendo con este paralelismo, que hace los Estados Unidos que podríamos hacer nosotros para poder combatir el absentismo y captar y retener talento? Pues entre otras cosas, invertir en intangibles y prevención porque esto no pase. Y como lo hace? Principalmente mediante programas de bienestar corporativo: mindfulness, yoga, meditación, workshops de alimentación saludable, herramientas de gestión del estrés, teambuildings, aplicaciones a través de empresas comprometidas con la salud y el bienestar como Fitbit, pensando cada vez más en medidas que ayuden a conciliar la vida familiar y laboral y un largo etcétera.

Al fin y al cabo invertir a largo plazo en una empresa no sólo la hace más atractiva, sino que también la convierte en más rentable, sostenible y productiva. Cómo dice William Arruda (uno de los grandes gurus del branding): "Las empresas son sus personas", así que si queremos tener una empresa sana y feliz para que crezca, prospere y tenga éxito, tenemos que empezar para cuidar aquella gente que lo hace posible.