El sector logístico catalán cerrará el año con una inversión de 400 millones, lo que representa un descenso del 40%, según las previsiones de CBRE, mientras que la contratación por su parte alcanzará los 600.000 metros cuadrados al cierre del año, en línea con el promedio de los últimos diez años. Entre enero y septiembre, la inversión fue de 199 millones, un 67% por debajo de las cifras del mismo periodo de 2022.
En total, la inversión prevista para todo este año en Barcelona representará el 30% de la cuota estatal y entre enero y septiembre ha supuesto un 20%, el mayor peso desde el inicio de la serie histórica. En cuanto a la contratación, cerrará el año con unos 600.000 metros cuadrados, un 26% por debajo del 2022 pero también online en la última década.
Según fuentes de CBRE, el descenso previsto en la inversión se debe al "contexto macroeconómico incierto ya los tipos de interés en alza". Por otra parte, según la consultora, las rentas se mantendrán estables en los próximos tres trimestres después del crecimiento de 2022. En la primera corona, la renta se situará en los 8,5 euros por metro cuadrado y mes; la segunda en 6,75 euros y en la tercera 4,25 por metro cuadrado.
Según fuentes de CBRE, el descenso previsto en la inversión se debe al "contexto macroeconómico incierto ya los tipos de interés al alza"
CBRE apunta como gran reto del sector la falta de suelo logístico. En Barcelona, el 33% de la demanda viene de nuevos desarrollos, por encima de la media española, del 21%. Los principales compradores de sol son fondos de inversión (33%), seguidos de ocupantes (30%) y propietarios (19%), procedentes de Estados Unidos (27%), Francia (25%) y Reino Unido (20%).