Bájate el app, pide un taxi

El MWC pone en el punto de mira aplicaciones como MyTaxi y Hailo, que han acercado la tecnología móvil y la digitalización a un sector acusado de ser demasiado cercado e inmovilista

Mytaxi y Hailo son las aplicaciones más utilizadas en Barcelona
Mytaxi y Hailo son las aplicaciones más utilizadas en Barcelona
17 de Febrero de 2016
Act. 19 de Febrero de 2016

El Mobile World Congress es una cita obligatoria por las marcas, gurus y forofos en la tecnología. Pero es también una fecha más que señalada en el calendario de los hoteles, restaurantes, comercios y taxistas . Y lo es especialmente por este último colectivo, con quien no hemos podido hablar y que mira con un optimismo prudente la huelga anunciada por TMB y Adif coincidiendo con la celebración del congreso. Un sector que quiere demostrar que la digitalización los ha convertido en un medio de transporte competitivo.

Las previsiones apuntan a la llegada de 95.000 visitantes, los que verán reducida sus opciones de movilidad si no se llega a ningún acuerdo entre los sindicatos y la administración. Si en un día normal los más de 4.000 taxis que circulan por Barcelona ya son insuficientes, esta situación sólo puede generar un resultado: "Caos". Así lo califica el CEO de MyTaxi en España, Antonio Cantalapiedra, quien considera que "la huelga es sólo un beneficio a corto plazo" por este medio de transporte. "Es innegable que es un beneficio por el taxista, pero no lo será tanto como se piensa, puesto que ellos sólo no podrán cubrir las necesidades de transporte y esto los acabará sacando de tino", añade.

MyTaxi, que inició su actividad coincidiendo con el MWC del 2012 y es partner en la edición de este año del 4YFN, quiere superar con bonos resultados esta campaña. Cuenta con una flota de 3.000 taxisque usan su app en Barcelona, una herramienta que, junto con otras como Hailo, han ayudado a poner orden y a modernizar un servicio que no vivía ninguna innovación desde hacía más de 30 años.

Desestigmatitzar el sector
Uber y BlaBlaCar no son el mismo que Hailo y MyTaxi. Las primeras convierten conductores particulares en un tipo de taxistas –hecho que ha puesto en entredicho su legalidad-, mientras que las segundas trabajan codo con codo con los chóferes profesionales para sacarlos la etiqueta de "sector cerrado". "Los taxistas están muy abiertos a usar la tecnología", señala la directora de Hailo en Barcelona, Mar Pallàs, "están todo el día dentro del coche, así que todo el que sirva para optimizar su trabajo, es positivo". Este medio ha intentado contactar con profesionales del colectivo, pero no ha obtenido respuesta.

Hailo recibe una solicitud de taxi cada 30 segundos y han llegado ya a una base de 200.000 usuarios y más de 5.500 taxistas. Y, en un año, ha incrementado un 200% su negocio en Barcelona, el que demuestra que no sólo optimiza recursos, sino que es también un modelo de negocio rentable. "Se tiene que tener en cuenta que el taxi es un vehículo que ya se usaba", pone de relevo Pallàs, "nosotros hemos ayudado a hacer más eficientes los recursos".

Cantalapiedra va más allá y asegura que se trata de un medio de transporte que necesitaba subir al carro de la innovación tecnológica: "Estamos yendo hacia un modelo de ciudad inteligente que, según dicen los expertos, será donde vivirá el 75% de la población mundial el 2025. Necesitábamos unirnos a esta digitalización, optimizar el servicio y que el cliente y el taxista puedan organizarse mejor, planificar la demanda y contribuir a la sostenibilidad del medio ambiente".

Para el CEO de MyTaxi los dispositivos móviles son los agentes principales de cambio en la sociedad del presente. Su creciente penetración ha provocado que la gestión en tiempo real de los servicios básicos reconvierta ámbitos tradicionales, y el taxi no podía quedarse atrás. "Los conductores seguían trucando a las emisoras o intermediarios para saber dondehabía un cliente, el que hacía que se multiplicara el tiempo de espera y fuera todo más complejo. Ahora el cliente puede pedir el coche que le queda más cerca y valorar con el app el servicio", pone como ejemplo.

Ventajas prácticas de la aplicación
Antes de tener las aplicaciones móviles, lostaxis circulaban mucho más sin rumbo fijo por las ciudades, tenían más gastada y, incluso, se encontraban con problemas para dar cambio a los clientes. "Eran situaciones habituales para los conductores, como también recibir avisos de gente que se había dejado ojeras y otros objetos y no podía recuperarlos. Nosotros ayudamos a recuperar con más facilitado aquello que se ha perdido y ofrecemos el pago a través del móvil", sigue explicando la directora de Hailo en Barcelona.

Pero la lista de ventajas que Pallàs detalla todavía es más larga: "Hemos solucionado la fragmentación quehabía en la regulación. Barcelona no funciona igual que Girona o Lleida, no podías coger un taxi e ir de una ciudad a otra, ahora sí que lo puedes hacer. También hacemos más fácil la gestión de los tickets para las empresas, ahora pueden tener un mejor control de los viajes de los trabajadores".

Compatibilizar las alternativas del mercado
La Autoridad Catalana de la Competencia también ve positivamente la aplicación de la tecnología y ha cuestionado el veto de la administración pública ante el surgimiento de aplicaciones de economía colaborativa en el ámbito. Su jefa de área de Instrucción de Expedientes, Susanna Grau, considera que "aportan innovación" y que ayudan a "mejorar el trabajo que hace el taxista y el viaje del cliente", y defiende que dan "un valor añadido y más calidad a un servicio estándar".

Su comentario, pero, hace referencia a la llegada de iniciativas como Uber. Algunos lo consideran una amenaza; otros como Cantalapiedra, prefieren leerlo cómo que los dieron un aviso: "Chicos, sois un servicio público, si no os modernizáis y no conseguís un servicio como el nuestro, os quedaréis atrás". No niega que estas compañías se tienen que ver como un peligro por la cuota de mercado que pueden tomar al taxi de toda la vida, ahora bien, opta para quedarse con esta interpretación positiva.

Por eso defiende la "compatibilització y coordinación" de todas las alternativas, puesto que a las ciudades inteligentes "nopuede haber una única opción de movilidad". Pone como ejemplo, coincidiendo con Grau, el uso del coche eléctrico, el que creen que se convertirá en una demanda importante a cubrir si la sociedad sigue tomando conciencia sobre la contaminación y la acumulación de vehículos privados.

Pero para llegar a esta compatibilització, hay que actuar desde la administración para adaptar el marco legal. Una tarea que, según Grau, no es fácil porque "el taxi es un mundo con muchas limitaciones y muy regulado". Considera que estas aplicaciones han logrado con éxito la "difícil tarea de diferenciarse y prestar un servicio de más calidad" y que no se tiene que dejar escapar esta rendija que han abierto.

Crear un nuevo segmento de mercado
Otra propuesta que trae escasamente seis meses al mercado es Ntaxi. La start-up fue creada por tres taxistas que, conocedores de la realidad que viven estos profesionales, han querido aprovechar las oportunidades que brindan las nuevas tecnologías.

Su aplicación no excluye ningún profesional, aceptan tan conductores abonados a una radioemissora como sí son independientes, y filtran las solicitudes de los clientes por código postal para evitar carreras innecesarias y un alud de información innecesaria. Dos detalles que, según el coordinador de la compañía en Cataluña, Eduardo Guía, los diferencia de Hailo y My Taxi porque ellos "dependen de una radioemissora y sólo quieren trabajar en las ciudades grandes, no llegan a municipios pequeños".

Su disparo diferencial es que permiten compartir taxi. "Queremos atraer el segmento de gente que no está acostumbrada a coger un taxi por temas económicos", apunta Guía, quienes pone como ejemplo el desplazamiento al aeropuerto: "Si se comparte coche con dos o tres personas, puede ser incluso más barato y rápido que moverse hasta el centro de Barcelona y coger el Aerobús".

Hasta aquí parece que no aporten nada nuevo, pero el cierto es que tienen entre manso otra propuesta innovadora. El equipo está trabajando en un servicio de rutas turísticas a través la aplicación móvil para el usuario, con un menú con varios idiomas y con explicaciones de los principales monumentos de una ciudad. Los turistas sólo tendrán que subir al taxi, contratar una ruta mediante la app e ir escuchando el guía virtual mientras el coche sigue el recorrido escogido.

"Queremos exprimir todo el potencial del turismo, crear una nueva línea de negocio y dar una imagen más moderna del taxi", especifica el coordinador de Cataluña. La idea viene de la experiencia de los fundadores como taxistas, quienes reconocen que hay una falta importante de conocimiento de idiomas y de la cultura del lugar donde trabajan: "Los conductores a menudo no pueden explicar nada a los turistas, con esto lo solucionamos y vamos a buscar un cliente nuevo".

Todo esto trae al centro del debate la atención al cliente. Es mejorable? "Reconozco que la atención al cliente no es la adecuada, hay compañeros que no entiendo cómo es posible que tengan la acreditación. Pero creo que es más problema de los requisitos que se ponen ahora para obtener las licencias, antes se hacían pruebas más exhaustivas de idiomas, cultura o historia", detalla el co-fundador de Ntaxi. Con el uso de su app, asegura que esto queda resuelto, puesto que obligan los conductores a traer el coche limpio y a tener una atención amable y educada para consolidarse como un servicio de calidad.