Cuatro aperturas de restaurantes en Barcelona para seguirles la pista

Repasamos cuatro de las más recientes aperturas de restaurantes en Barcelona: la de un clásico del Eixample en nuevas y experimentadas manos, los dos últimos movimientos en la órbita del ya extinto grupo de restauración elBarri y un nuevo proyecto que ha visto la luz al calor de la fulgurante trayectoria de una joven emprendedora. El punto de inflexión en el sector turístico y en la restauración parece que se ha superado. Como todo apuntaba, 2022 está siendo el año de la recuperación. Y eso pese a ser uno de los sectores más afectados por la pandemia de la covid-19, atacado frontalmente por los altos precios de los alimentos, las materias primas y una escasez de trabajadores que amenaza el horizonte.

Tonet Romero abre Bodega Romería (ex Bodega 1900 y Bodega Lito)

La sombra de elBarri es alargada. Por lo que se reformula (o reabre) y por los chefs que aprovechan espacios para engendrar nuevas ideas. Tonet Romero acaba de reabrir la Bodega Lito (antigua Bodega 1900) bajo el nombre de Romería. Lo anunciaba el mismo chef de Suculent esta pasada semana, aunque a algunos ya nos había dado pistas sobre que preparaba un nuevo proyecto. Él, que fue cliente habitual del primer local de los Adrià, abre con participación de este y con el apoyo de Pace Gastro. La apertura se proyecta para la segunda quincena de septiembre y en estos momentos el chef está poniendo a punto la carta—incluirá clásicos bullinianos como el tuétano con caviar (1992) o el suquet de gambas (1988)—, cohesionando al equipo y remodelando la entrada del local. Siempre es una buena noticia que se sigan moviendo proyectos en esta zona de El Paralel (abría Enigma hace pocas semanas y Tickets se reconvertía en Teatro de la mano de los hermanos Iglesias en solitario).

El chef Tonet Romero | Cedida

Come, ex Hoja Santa

Los discípulos de elBarri no dejan de darnos buenas noticies. En este caso, Paco Mendez se ha puesto desde hace tres meses al frente de Come, el nuevo restaurante que ocupa el espacio dejado por Hoja Santa de Albert Adrià.  El chef mexicano ha redecorado el local del que fue jefe de cocina, ahora defendido junto con su mujer, Erinna Mariciano. Con el acrónimo de cocina mexicana, en su carta se conjugan los platos típicos: ceviches, tacos y moles con un empaque de alta cocina. En la Selección festival, se juega a probar varios platos habituales de la carta, alguna propuesta del día según mercado o temporada y un plato final para mesa completa a escoger: cochinita pibil o barbacoa de enoki.

Nueva vida a El Cafè del Centre

Sentido y sensibilidad. La reapertura del Cafè del Centre (Girona, 69), un bar histórico de la ciudad que ha reportado alegrías durante tres generaciones —las de la familia Bel— reabre sus puertas y muchos hemos suspirado aliviados. La extinción de la saga familiar hizo temer lo peor. Al final, los socios del Grupo La Confitería, Lito Baldovinos y Enric Rebordosa han sumado el emblemático local de la Dreta del Eixample a su porfolio. No es la primera vez, han dado una segunda vida. Lo hicieron con La Confitería (del 1912), Rilke (antiguo Beltxenea, en asociación con el grupo Kafka) o Muy Buenas (1902). Del nuevo Café del Centre han recuperado el verde de la fachada original y, en el interior, han respetado su pavimento de baldosas en blanco y negro, las guirnaldas modernistas,  las meses rectangulares de mármol blanco... En la oferta culinaria, el sello de Víctor Ferrer, chef del Betlem, con propuestas como las crestas de butifarra negra, cebolla caramelizada y crema agria de hierbas o la terrina de carrillera y cap i pota con alcaparras. Una fusión perfecta entre tradición y modernidad.

Funky Bakers Eatery, cocina hebrea puesta al día

Comparte esquina en la calle Bailén y la calle Diputación con su tienda hermana Funky Bakers Deli. Pero en este restaurante, bar, cafetería y panadería, su fundadora, Seyma Ozkaya, además de ofrecer deliciosos postres, bucea en carta en su herencia cultural turca y la comida asiática, americana y europea que ha conocido en sus múltiples viajes. Es el tercer local que inaugura, el primero fue su archifamosa pastelería en el corazón del Born y, una vez abierto el Deli, Seyma sintió la necesidad de tener un sitio fijo en el Eixample. Se puede comer bien a cualquier hora del día: del desayuno, a la cena. Todo son delicias inspiradas en Medio Oriente. De una stracciatella con tomates escalivados y limones encurtidos, a una de las especialidades de la casa para compartir: el Challah. Se trata de un precioso pan hebreo trenzado que se come durante el Shabbat judío y que se sirve con tres mezzes, una crema similar al labneh o al conocido hummus. Otras delicias para probar son los smørrebrød daneses. Tiene sus recetas separades por apartados: a la sartén, al horno o a la cazuela. Lo mejor: sus productos son locales y de kilómetro zero y tienen una buena selección de vinos naturales.