La semana pasada veíamos como Kanye West era capaz de romper el mercado de las zapatillas deportivas con una colaboración con Adidas. Sólo con posicionar su nombre, el cantante era capaz de agotar el stock de unas sneakers de 220 euros y que podían llegar a rozar los 1.000 euros a la reventa. Pues bien, West no es el único rapero interesado en el mundo de las vambes. Eminem se convirtió en uno de los músicos más conocidos del mundo al ritmo de las canciones que narraban la vida de su alter ego, Slim Shady. Después de vender más de 110 millones de discos, el artista ha reducido su producción musical para centrarse en su vertiente emprendedora e inversora en el mundo, como no, de las vambes. Un afición que Eminem trajo al terreno del coleccionismo y de la que ahora ha hecho negocio.
La entrada profesional de Eminem al mercado de las sneakers se produjo a mediados del año pasado, con la inversión a la start-up StockX, un portal que copia el funcionamiento de los mercados bursátiles, pero donde las acciones son sustituidas por las zapatillas más preciadas por los coleccionistas.
StockX ofrece a sus usuarios todo un catálogo de zapatillas deportivas que ya no se pueden encontrar en las tiendas y, el más importante, permite consultar su valor en vivo, con cotizaciones en constante movimiento según la ley de la oferta y la demanda. Gracias a este sistema, los coleccionistas pueden encontrar ofertas, comprar ejemplares imposibles de encontrar al mercado cuando consideren que están a su pico más bajo de precio y volverlos a poner en circulación cuando consideren que pueden multiplicar su inversión.
"Las zapatillas siempre han estado de gran interés por mí y he colaborado de buen grado con marcas como Nike. Además, descubrí que los fundadores de StockX son de Detroit, por el que quise participar al proyecto", explicaba Eminem después de su inversión a una compañía de su ciudad natal.
En el tiempo que ha pasado desde la inyección de calers de Eminem, la página ha mejorado los servicios, garantizando la autenticidad de todos los productos en subasta y ofreciendo un historial del valor de todas las zapatillas disponible por los usuarios.
Una start-up cómo StockX puede parecer una apuesta sin mercado desde la perspectiva europea, pero en los Estados Unidos es todo un negocio. De hecho, Eminem no ha sido la única celebrity que ha visto una opción de incrementar ingresos invirtiendo en la compañía. En febrero de este mismo año, el actor Mark Wahlberg y el director general de AOL, Tim Armstrong, participaron en una nueva ronda de financiación que llegó a los seis millones de dólares.
StockX, pero, es una start-up generosa con sus inversores. Agradecida por el éxito conseguido en sus rondas de financiación –y buscando convencer los indecisos-, la empresa sorteó un par de ejemplares de las Air Jordan 4 Eminem Carhartt, casi imposibles de encontrar al mercado y con un precio de más de 30.000 dólares. Un gran anzuelo.