Hemos entrado en una era de aceleración vertiginosa. Gracias a los últimos adelantos tecnológicos, los alpinistas del Everest disfrutan de un excelente servicio de telefonía móvil y los automóviles que se conducen sólo ya se encuentran en nuestras carreteras. En el libro Gracias miedo legar tarde (Ediciones Deusto, 2018), Thomas L. Friedman aborda toda esta revolución, donde también menciona tres fuerzas aceleradoras que han cambiado nuestro planeta: la ley de Moore (tecnología), el mercado (globalización) y la madre naturaleza (cambio climático y biodiversidad).
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El puesto de trabajo, la política, la geopolítica, la ética y la comunidad son los cinco principales esos que más se han cambiado por el contexto en el cual vivimos. El autor muestra que podemos superar las múltiples tensiones de una era de aceleraciones, si disminuimos la velocidad, si nos atrevemos a llegar tarde y usamos el tiempo por reimaginar el trabajo, la política y la comunidad. Este libro se presenta como una guía esencial para entender el presente y el futuro que nos espera.
Pararse y reflexionar
Friedman afirma que vivimos uno de los puntos de inflexión por importantes de la historia. Cree que más que la llegada de la imprenta en Europa por parte de Gutenberg. Precisamente los culpables son las tres fuerzas que mencionábamos previamente: tecnología, globalización y medio ambiente. Por eso considera vital hacer una pausa y reflexionar "en lugar de entrar en pánico o replegarse [...] para aumentar las probabilidades de entender mejor el mundo que nos rodea e interactuar de forma productiva con él".
Este es el motivo por el cual escogió este título para el libro, Gracias miedo legar tardo. En las primeras páginas explica que fue en la espera de un conocido, con quién había quedado pero llegaba tarde, que consiguió para él mismo y para sentar a pensar.
Tecnología
La primera vez que se introdujeron materiales no basados en silicio fue en el transistor, el que contribuyó que la ley de Moore –la expectativa que la potencia de microchips se duplican aproximadamente cada dos años- continuara con la previsión del crecimiento exponencial de la capacidad de procesamiento.
Friedman: "Moore predijo el ordenador personal, el teléfono móvil, los coches sin conductor, el iPad, el big data y el Apple Watch"
"Se puede decir que Moore predijo el ordenador personal, el teléfono móvil, los coches sin conductor, el iPad, el big data y el Apple Watch. El único que no fue predecir fueron las palomitas para el microondas", explica el autor del libro, permitiéndose alguna licencia a hacer broma. Aún así, está convencido que algún día este crecimiento exponencial se parará, aunque no se sabe cuándo.
Otro tema que toca en este breve guía sobre el futuro es la revolución de los móviles. AT&T fue uno de los primeros actores que intervinieron, cuando llegó a un acuerdo con Steve Jobs porque la empresa fuera proveedor exlcusiva en los Estados Unidos de la novedad llamada iPhone.
Para entender por qué fue importando esta colaboración, el autor recuerda que si una persona puede ver Juego de Truenos a su teléfono no es porque Apple hiciera un smartphone mejor, sino porque Qualcomm y AT&T y otras invirtieron miles de miions de dólares al hacer más eficientes la red inalámbricas y los teléfonos.
La siguiente locura que se vivirá en el ámbito tecnológico es el 5G. "Los ingenieros de Qualcomm lo describen como la etapa en que los pronombres 'tú' o 'yo' desaparecen y el teléfono sabe quién eres y que quieres visitar y con quien quieres conectarse y después anticiparse a todo y hacerlo por tú", comenta Friedman.
A pesar de que nos parezca que todo avanza a pasas de gigante, insiste en el hecho que no toda la humanidad dispone de un teléfono o una mesita y asegura que el día que esto pase, el progreso será de verdad exponencial.
El mercado
Igual que los ríos fueron en el momento fuente de vida para las civilizaciones, hoy Amazon Web Services o Azure de Microsoft son "conectores gigantes que te permiten obtener acceso a todas las aplicaciones informáticas de la supernova, donde puedes unirte a cualquier fluxe en que quieras participar".
Singapur ha invertido a formar los ciudadanos en tecnología, mientras que en los EE.UU. se ven desbordados por los adelantos
Friedman pone como ejemplo Singapur y los Estados Unidos. Del primero dice que han invertido en infraestructuras para asegurarse que sus futuros trabajadores estén preparados para el cambio tecnológico y no se queden obsoletos. Del segundo, afirma que los ciudadanos se sienten desbordados por la globalización porque las tecnologías físicas han evolucionado mucho más que las tecnologías sociales, las cuales amplifican la opinión pública sin permitir pair los contenidos que ruedan en las redes.
El medio ambiente
"Somos la primera generación para la cual lo 'más tarde' será el momento en que se hayan agotado todos los esmorteïdors, ruedas de repuesto, artimañas de la profesión y herramientas de adaptación y recuperación de la Madre Naturaleza para adaptarse y recuperarse", critica el autor del libro.
Friedman: "Somos la primera generación para la cual lo 'más tarde' será el momento en que se hayan agotado todos los esmorteïdors"
La China, la India y el Brasil son tres de los países que menciona como sociedades que tienen que vigilar su crecimiento. Están experimentando ahora el mismo que ya vivieron los países más desarrollados, por el que no es sólo culpa de unos, sino de todos.
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