Seis hamburguesas que puedes comerte en Barcelona hoy mismo

Hamburguesa del chef Dani García | Cedida

¿A quién no le gusta clavarle el diente a una buena hamburguesa de vez en cuando? De origen incierto, aunque unas referencias apunten a Hamburgo y otras lo sitúen en el diminuto restaurante Louis Lunch de New Haven (Connecticut) a manos de un inmigrante danés, lo cierto es que no hace falta transportarse a un diner norteamericano para rendirse a ese placer redondo del burguer time. En Barcelona encontramos muchas y muy buenas hamburguesas, siempre en constante evolución. Con un deje francés, inspiración argentina, neoyorkina o de lo más cool, la hamburguesa sigue siendo la reina del fast food. Tampoco nos sentíamos culpables por ello, pero hemos encontrado una buena excusa para celebrar su día—el 28 de mayo— como se merece. Arremangaros y preparad las manos que la cosa es contundente y promete. Os traemos seis hamburguesas deliciosas y gourmet que puedéis comer este mismo fin de semana en la ciudad de Barcelona.

Flash Flash

Pioneros de la burguer en Barcelona en los años 70 y a punto de cumplir 52 años (el próximo 3 de julio) sus hamburguesas siguen siendo un top: desde las míticas Monty, Flash Flash o Cadillac a la más reciente, Cecilia, esa última sobre tosta de pan de coca, mayonesa y cebolla caramelizada. Pican cada día la carne de procedencia nacional (asturiana y gallega) en dos momentos; por la mañana y por la tarde. “Fue idea de Cecilia Santo Domingo, mujer de Alfonso Milá.  Dijo que no podíamos dar solo tortillas y propuso hacer hamburguesas como las de P.J. Clark’s en Nueva York. Así que cogimos un avión, nos fuimos al restaurante. Era un local sólido, con paredes de ladrillo, con mucha historia. Cecilia se metió en la cocina y pidió la receta de las hamburguesas y logró que le explicaran cómo las hacían” explica Karin Leiz, fundadora del Flash Flash junto a Leopoldo Pomés, Alfonso Milá y Cecilia Santo Domingo.  Las sirven siempre con patatas fritas, virutas de calabacín o puré de patatas y tomate asado acompañadas de la vistosa caja roja de condimentos — mostazas, el ketchup, la salsa perrins, y el tabasco— que nos recuerda a American Graffiti sin movernos del sofá y que Alfonso Milá diseñó especialmente como contenedor.

Hamburguesa de Flash Flash | Cedida

OhBo

El cielo se esconde en los pequeños detalles. Anton Brufau es el dueño de uno de los restaurantes más fiables del ángulo entre Santa Fe de Nuevo México y Doctor Fleming. En OhBo (recomendado por la Guía Repsol) se defiende una carta con producto de temporada donde no falta un ya famoso steak tartar y una burguer clásica con carne ecológica de Cal Tomas en pan de brioche con lechuga y tomate. Además, el restaurante propone un menú burguer donde se puede elegir entre una crema de hortalizas de temporada o una ensalada verde más bebida y café.

Sagàs

En pleno Born, epicentro cultural y punta de lanza de la Barcelona más auténica, Sagàs ofrece una deliciosa propuesta de bocadillos gourmet, entre ellos, claro, una hamburguesa. El chef, Oriol Rovira, reconocido con una estrella Michelin, está al frente de la propuesta que da la vuelta al concepto del finger food: de clásicos catalanes como la butifarra y el salchichón, pasando por los aromas orientales de los buns chinos o el mítico Bahn mi vietnamita. Replica las clásicas hamburguesas americanas, como la New York Burger Classic, con carne 100% bovino gallego, queso cheddar, tomate, lechuga, pepino y cebolla y pan artesano. Todo ello acompañado de ensaladas, patatas bravas de las de verdad y postres originales.

Hamburguesa de Sagàs partida per la meitat | Cedida

La Real Hamburguesería

El secreto de esta hamburguesería gourmet a punto de cumplir 5 años (solete Repsol) está en la carne. En concreto, en la ternera de Girona excelente resguardada en unos panecitos artesanos hechos a medida. Todos los ingredientes son caseros siempre, de las patatas fritas a los nachos. Nos quedamos con La Real 2.0, un delirio de burguer con doble carne de vaca vieja madurada (250 gr.) sin congelar, del mercado del Ninot, aderezada con mermelada de bacon y crema de queso cheddar gratinada en cada lado del pan (tipo brioche o sin gluten). Si no os convence, también podéis pedir una Raclette (180 gr. de picanha) sin congelar del mercado del Ninot acompañada de rúcula, pepinillos hechos en casa, salsa tártara de setas, cebollas caramelizadas con cerveza negra y queso raclette fundido. Podéis encontrarlas en el Eixample o en Poblenou.

El Filete Ruso

Abierto en 2008 por los empresarios Claudio Hoyos y Adrián Milà, puede decirse que El Filete Ruso es uno de los pioneros de la hamburguesa gourmet en nuestra casa. El restaurante está adscrito a la corriente Slow Food (asociación internacional que aboga por la ecogastronomía y el respeto por el producto y defiende la tradición alimenticia de cada territorio) y su carne es de proximidad engordada con cereales eco. Entre sus burguers (de 150gr.) encontraréis recetas con un punto casi de alta cocina francesa como la que lleva brie, berenjena suavemente rebozada y mostaza de Dijon con un pan abriochado de la panadería Baluard.

Dani García. La gran familia mediterránea

Como buen amante de las burgers, el chef Dani García busca siempre recetas e ingredientes que hagan de este bocadillo un manjar único. Aprovechando el Día Internacional de la Hamburguesa, el malagueño ha diseñado tres nuevas hamburguesas que se suman a su propuesta de La Gran Familia Mediterránea, con ingredientes que son puro umami: Fromage García, Smoked Burger y Miss Carbonara Trufada. Incorpora nuevas salsas que suben el nivel como la duxelle trufada, e ingredientes como los huevos de codorniz.