Son muchas, muchísimas las empresas que estos días están dando ejemplo y colaborando en el combate común contra la pandemia del coronavirus. La forma de ayudar es diversa: con donaciones económicas, cesiones de servicios de forma gratuita u ofreciéndose para trabajar de forma altruista. Es imposible citar todas las que están poniendo su granito de arena en el País Valencià y se esparcen por diferentes sectores, desde el campo, hasta el textil, la robótica industrial o los Chatbots. Explicamos cómo contribuyen a superar este momento. Quién sabe, quizás sirven de inspiración para otras empresas.
Donación de 300.000 a los hospitales
La empresa Neolith de Almàssera (Castelló), especializada en piedra sintetizada aplicada a interiores y exteriores y que cuenta con 500 trabajadores, ha tomado la decisión de dar 300.000 euros en tres hospitales de sus alrededores: el Hospital General Universitario, el Hospital Provincial y el Hospital Universitario de La Plana, todos de la provincia castellonense. A falta de ideas para colaborar con conocimiento y/o servicios, siempre queda la vía de ayudar a la causa global -desde la acción local- con una aportación económica.
Maquinaria agrícola para desinfectar los espacios públicos
Vamos ahora al campo, donde los agricultores continúan trabajando como nunca para garantizar el suministro alimentario. Además, desde la organización agraria La Unió de Llauradors i Ramaders, se han puesto en contacto con las diferentes administraciones del País Valencià -ayuntamientos, sobre todo- para poner a su disposición las cubas y atomizadores de sus asociados que lo desean para ayudar en las tareas de desinfección de los espacios públicos.
El sector del calzado y la robótica confecciona material sanitario
También son muchas las empresas que han centrado sus esfuerzos a ayudar con uno de los materiales más necesarios estos días: los sanitarios. Encontramos el ejemplo de altruismo de empresas de calzado y textil de la comarca del Vinalopó Mitjà. Alardo Festero, dedicada a la elaboración de zapatos para las fiestas de Moros y Cristianos, hace una semana que está confeccionando mascarillas para los hospitales de la zona y para personas en riesgo de exclusión social; su jefe, Juan Membrive, ruega que grandes empresas como Inditex hagan lo mismo: "Con sus máquinas tardan 20 segundos en hacer una; en tres días podrían fabricar 80 millones. Nosotros tardamos dos o tres minutos por unidad". También está fabricando Stuart Weitxman, con fábrica en Petrer. La empresa de textil Comertex (también de Petrer) es la que está aportando el material para fabricar las mascarillas; Calzados UNISA de Monòver se ha ofrecido a suministrar las gomas.
Otra es IT Infotec Robotics, con sede en Elche (Alicante), que es una ingeniería especializada en la integración de robots industriales para automatizar tareas en diferentes sectores productivos. Ante la bajada importante de pedidos, su CEO, Antonio Requena, confiesa que tenía "ganas de ir a casa y llorar"; no lo hizo, y en cambio, decidió ser útil a la sociedad poniendo a disposición de las administraciones públicas toda su maquinaria y material de impresión 3D. Están colaborando en proyectos coordinados por la Generalitat Valenciana y la Universidad de Burgos y ya están imprimiendo mascarillas de tipo FFP3 y viseras de protección para el personal sanitario con los archivos STL que les han enviado. Las máquinas, valoradas entre 30.000 y 400.000 euros, están trabajando ahora 24 horas en el día y siendo supervisadas por tres trabajadores; el material lo pone la empresa, pero asegura que al ser plástico, "no es caro". "Cómo no tenemos actividad, hacemos esto", señala Requena.
'Chatbots' para no saturar las consultas de los organismos públicos
Por otro lado, tenemos el caso de la empresa 1MillionBot de Alicante, líder en inteligencia artificial mediante chatbots y partner de empresas cómo IBM o Telefónica. En la crisis sanitaria del coronavirus, han cedido uno de ellos de forma gratuita e indefinida: se trata de la asistenta virtual 'Carina', que da información sobre la enfermedad, sus síntomas, qué hacer ante un contagio o las normas derivadas del estado de alarma gubernamental. Hace una importante labor social, puesto que permite gestionar durante 24 horas al día un número muy alto de consultas que pueden evitar saturar todavía más los canales telefónicos habilitados por las administraciones públicas. Toda la información que ofrece la bebe de fuentes oficiales (OMS, Ministerio de Sanidad y otras) y está dirigido por la doctora en Biología Raquel Pomares.
Desde 1MillionBot señalan que están ofreciendo su chatbot a "todas las instituciones públicas y empresas privadas" que lo necesitan para hacer frente a esta crisis. Actualmente lo han cedido a 70 clientes, como el Ayuntamiento de Alicante, el Síndic de Greuges valenciano, el Ayuntamiento de Elche, la patronal Hosbec, Visit Benidorm, Presidencia de la Generalitat Valenciana. Han llegado incluso a empresas de Sudamérica. Todo el equipo está involucrado en el proyecto y que 11 (de 15) son las que trabajan full-time, ya sea revisando su funcionamiento, actualizando la información de manera continua o atendiendo a las solicitudes de las instituciones.
Formación empresarial online y clases de baile gratuitas
Otros empresas están compartiendo sus conocimientos de forma gratuita porque la gente confinada aprovecho el tiempo. Son muchas las que lo están haciendo. Dos ejemplos del País Valencià: la escuela de negocio Level UP de Alicante imparte ahora formación gratuita online a empresas para reorientarlas con el teletrabajo, captación de clientes, optimización del negocio, planificación, gestión del equipo o uso de redes sociales. Una buena manera para que los empresarios aprovechen el tiempo y vuelven a la actividad económica con ideas que les ayudan a rentabilizar mejor las tareas.
Y otros que no piensan en sus ganancias y ofrecen entretenimiento para toda la ciudadanía, en general, como es el caso de la escuela de baile Savoy Benimaclet de València, que cuenta con casi 500 alumnos e impartía 25 clases semanales; sus propietarios están ofreciendo ahora clases gratis de swing, authentic jazz o lindy hop que publican en su Instagram y Facebook. Hay tres niveles -iniciación, avanzado e intermedio-. En un intento de emular clases normales y obligar al alumnado a seguir una rutina, las clases sólo las dejan publicadas dos horas; después las borran.
Unos pocos ejemplos de empresas en el territorio valenciano que ayudan a hacer más soportable la vida en tiempos difíciles.