Arco mediterráneo, negocios (y problemas) compartidos

Representantes del sector público y privado de Cataluña, País Valenciano y las Islas Baleares denuncian las trabas empresariales y económicas que sufren conjuntamente

Corredor Mediterráneo es uno de los temas más reclamados a escala de infraestructuras
Corredor Mediterráneo es uno de los temas más reclamados a escala de infraestructuras
Aiats Agustí
02 de Marzo de 2017
Act. 02 de Marzo de 2017
El Euroregión del Arco Mediterráneo constituye un territorio de un considerable peso económico y empresarial. Las regiones que conforman este arco –Cataluña, País Valenciano y las Islas Baleares- ponen de relieve tanto su importancia conjunta como un alto grado de relaciones comerciales entre ellas. Y aún así, hoy en día es más rápido ir de Barcelona en Alicante pasando por Madrid que no cogiendo el Euromed, para no hablar del transporte ferroviario de mercancías. Este es sólo uno de los agravios que representantes del sector público y privado han denunciado en Valencia en el encuentro La hora de las decisiones organizada por el Instituto Ignasi Villalonga.

El PIB conjunto de las regiones del Arco mediterráneo representa el 45,3% del PIB español. Con 5,6 millones de trabajadores aportan en 30,2% de la ocupación del Estado y el 45,3% del VAB industrial. A la vez el 63,1% de las empresas exportadoras son en estas regiones y realizan el 50,6% de las exportaciones del conjunto de España, así como el 63% del tráfico de mercancías portuarias.

Esto quiere decir que, aparte de ser potentes económicamente, estas regiones están fuertemente orientadas al exterior: más del 60% de las ventas que se echan de la Euram se hacen afuera de España. Las compras que hacen las empresas del Arco al resto de España y a los mercados internacionales representan el 32% del total de las compras del Estado, un porcentaje cercano a la relevancia económica del área que nos ocupa.

A la vez, las interrelaciones comerciales entre estas tres regiones son, naturalmente, muy fuertes. El País Valenciano es el primer cliente español de Cataluña y a la vez Valencia es la primera región proveedora del Principado. Cataluña es el primer cliente del País Valenciano y a la vez su primer proveedor. El mismo pasa con las Islas: Cataluña es el primer cliente y su primer proveedor. Queda claro que la importancia económica conjunta del Arco mediterráneo es enorme, tiene una fuerte orientación exterior y las relaciones comerciales son profundas.

Permeabilitzar las patronales
La potencia de estas zonas es clara, pero "hoy en día las comunidades del arco operan de manera separada en el ámbito empresarial", ha denunciado Frederic Fuster, miembro de la Junta Directiva de HOSBEC (Asociación Empresarial Hotelera de Benidorm y la Costa Blanca) y del consejo de turismo de la patronal valenciana. Y esta incomunicación comporta muchas oportunidades perdidas. Por eso, Carpintero cree que "hace falta permeabilitzar las patronales de las tres comunidades" para impulsar proyectos compartidos.

Y por eso hace falta urgentemente el corredor ferroviario de mercancías "que será una pieza básica en las relaciones comerciales internacionales en el futuro". En el mismo sentido, la movilidad de las personas, fundamentalmente por vía ferroviaria, "requiere una conexión rápida tipo lanzadora que una Girona con Alicante en tres horas y Barcelona-Valencia en una y media", ha reclamando el presidente de la Cámara de comercio de Girona, Domènec Espadalé.


Debate La hora de las decisiones. Aiats Agustí

Parches y reivindicaciones
La voluntad de mejorar la calidad de vida de los habitantes de la región de la Euram es el objetivo final de todos los ponentes que han hablado durante la jornada. "Ahora es el momento de reclamar infraestructuras que tengan impacto en la competitividad económica y segur que todos, empresas y ciudadanos,saldremos beneficiados", ha apuntado Espadalé.

El representante gerundense denuncia que "existen demasiados cuellos de botella y tramos sin desarrollar". Según Espadalé, el corredor mediterráneo "es una de las infraestructuras más importantes por la competitividad catalana, valenciana, balear, española, francesa y también europea". Por eso el empresario cree que hace falta "una conexión tipo lanzadora entre Girona y Alicante en tres horas y entre Valencia y Barcelona". Pero las inversiones llegan con retraso y "mal".

Las sacudidas del corredor son muchos y los parches se suceden: "El tercer hilo se hace en una sola vía, y esto es inaudito, tenemos una red de carreteras deficitaria y de pago –sobre todo teniendo en cuenta que el Estado tiene una sobredimensió de autovías de calidad y gratuitas en otros territorios-". Espadalé reivindica que "hace falta una autovía para exportar, hacen falta la N-340 y la N-II desdoblades, un corredor ferroviario de ancho europeo y con permeabilidad que esté conectado con puertos, aeropuertos y grandes empresas que permitan la conexión con pasajeros del interior del territorio".

Colaboración y problemas compartidos
En la misma línea ha hablado el presidente de la Comisión de Comercio y Agricultura de la Confederación de Asociaciones Empresariales de las Baleares, Josep Lluís Aguiló, que encuentra que "hay que abrir líneas de colaboración de los centros que generan innovación empresarial y también las relaciones entre universidad y empresa no sólo dentro de las regiones, sino también entre regiones".

Si bien la colaboración es una voluntad compartida, los problemas de las empresas también son compartidos. Para hablar de este tema el presidente de PIMEC, Josep González, se ha levantado como denunciante de los agravios comparativos de las compañías que están establecidas en las regiones de la Euram. Las pequeñas y medianas empresas en España son el 70% del PIB y el 60% de los lugares de trabajo. Al arco mediterráneo hay 1,3 millones de empresas de este tipo. Y según González estas compañías sufren agravios comparativos muy graves. Por un lado el coste de la energía, que es mucho más alto del que se paga en Europa o inclús en el País Vasco. "Es evidente que las políticas energéticas tendrían que ser un factor de competitividad. Las empresas energéticas españolas son mucho más pequeñas de medida de la más gran empresa eléctrica alemana pero sus beneficios son cuatro golpes más grandes y esto no tiene sentido", ha denunciado González.

Así mismo el presidente de PIMEC se ha referido al problema de la morosidad y ha ironizado que "Cofidís y los usurers son angelets comparados con los pagos de las grandes empresas". Para solucionar esto ha reclamado que España aplique la norma europea que lo obliga a resolver este problema. A la vez cree que las pymes tendrían que poder acceder a contratación publica y "hasta ahora sistemáticamente las normas no dan acceso en empresas pequeñas y esto se denomina monopolio". "Si podemos mejorar estos agravios, podemos hacer que las pymes de la Euram sean más competitivas y esto beneficie sus habitantes".


Josep Rull, María José Salvador y Marc Pons al encuentro 'La hora de las decisiones'. ACN

Gestión conjunta de las infraestructuras
Y para conseguir esta mejora de la calidad de vida de los habitantes –y empresas- de las regiones de la Euram, según el representante mallorquín hace falta una colaboración de la promoción de infraestructuras: "Es necesaria la gestión aeroportuaria junto con los socios de más cerca, los socios del Euram". En este sentido Aguiló coincide con el consejero de Territorio de la Generalitat de Cataluña, Josep Rull, que ha apuntado que "desde la descentralización y la autonomía de gestión se pueden conseguir mejores beneficios por los ciudadanos".

En el mismo sentido se han pronunciado el consejero de Territorio, Energía y Movilidad del Gobierno de las Islas Baleares, Marc Pons y Pons, que ha denunciado que las regiones mediterráneas no tienen ningún control sobre sus infraestructuras aeroportuarias y también reclama una gestión colectiva de puertos y aeropuertos. Por su parte, la consejera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio de la Generalitat Valenciana, María José Salvador, ha apuntado que "el Gobierno de España tendría que dibujar de la mano de las comunidades del Mediterráneo un nuevo mapa de infraestructuras y su gestión".

Según el consejero catalán, las regiones de la Euram "somos la puerta de entrada de las mercancías de Asia en Europa por la Mediterránea y una gestión adecuada, racional y lógica abocaría todos los recursos a hacer posible que esta puerta no tuviera ningún tipo de límite. Desgraciadamente no es así. Sufrimos una carencia de recursos y centralismo: sólo hay que coger el Euromed. El centralismo ha acreditado que la manera más rápida de conectar dos puntos no es una línea recta, sino un triángulo. Ir de Barcelona en Alicante es más rápido que cogiendo el Euromed", ha lamentado. "Hay una capacidad intensa de colaboración entre las instituciones pero con un destinatario único de los beneficios: los ciudadanos de estos territorios", ha concluido Rull.