Una de las máximas preocupaciones que tienen los hijos cuando los padres se hacen mayores es la medicación que estos últimos tienen que tomar. Inventos para controlarla hay mil: pequeños estuches, cajitas con un compartimento para cada día de la semana... Pero ninguno ha acabado de funcionar hasta el punto de dejar los hijos tranquilos. Roger Guasch, el creador y CEO de Berdac , vivió estas sensaciones en sus carnes y por eso decidió poner solución.
Cuando diagnosticaron Alzheimer a su madre, Guasch vio cómo era de complicado estar seguro de si había tomado la medicación. "Muchas veces, entre unos y otros no nos poníamos de acuerdo sobre si se le habían dado los medicamentos o no". En este punto, se dio cuenta de que la tecnología todavía no se había contemplado como una solución por este tipo de casos. Fue así como nació la startup Berdac.
"Es una máquina que con solo pulsar un botón dispensa los medicamentos que toca tomar en cada momento". Por eso Guasch asegura que podría decirse que es "la Nespresso de los medicamentos". Antes, bromea, "para hacer el café tenías que ensuciarte, tenías el peligro del fuego, era todo mucho más incómodo. Ahora, en cambio, con la Nespresso puedes hacerte una taza de café pulsando un botón".
Guasch: "Es una máquina que con solo pulsar un botón dispensa los medicamentos que toca tomar en cada momento"
Pero Berdac tiene otras funciones que la hacen muy útil. Por ejemplo, el aparato avisa la persona que se tiene que tomar el medicamento por medio de señales sonoras y visuales. Además, y este es un adelanto que para Roger Guasch es de vital importancia, Berdac detecta cuando el usuario no se ha tomado la medicación y avisa sus familiares para que lo puedan llamar o acudir a su casa.
Guasch comenzó la aventura de crear una startup después de haber pasado 15 años trabajando en la empresa privada y en la diputación de Barcelona como director de proyectos de tecnología. Antes había estudiado ingeniería informática, másteres en dirección de empresas e, incluso, un grado en ciencias políticas. Su vena emprendedora, sin embargo, ya apareció hace unos años, cuando participó en la creación de una startup sobre barbacoas inteligentes con unos amigos. Guasch asegura que funcionaba muy bien, pero que la tuvo que dejar porque nació su hija y no podía permitirse combinar el trabajo en la diputación –donde trabajó durante ocho años– y en la startup.
Ya se han encargado 200 aparatos a Berdac
Además de Roger Guasch, el equipo de Berdac, una startup que se está incubando en Barcelona Activa, lo forma una doctora en biología, un especialista en marketing y dos en tecnología.
Actualmente, Berdac todavía no ha sacado al mercado sus productos, que saldrán el mes de septiembre. Aun así, Guasch asegura ya tienen más de 200 reservas hechas y que más de 30 farmacias también les han encargado su producto. De hecho, las farmacias son uno de los principales nichos de mercado que contempla la startup. Su público objetivo, explica, "son los particulares, las farmacias y también las mutuas y centros hospitalarios".
Berdac tiene más de 200 reservas hechas y que más de 30 farmacias también les han encargado su producto
"A un 25% de las personas que están ingresadas, las tienen que volver a ingresar al cabo de 30 días de haber salido del hospital o antes". En muchos casos, explica Guasch, se debe de al hecho que no se ha tomado correctamente la medicación. Por eso cree que puede ser muy interesante que los hospitales incorporen Berdac y, al mismo tiempo, que tanto los centros hospitalarios como las farmacias el recomienden a sus pacientes.
Para Guasch, uno de los proyectos más ilusionantes de Berdac es el que está preparando junto con el hospital de Sant Pau. A través del matching learning (o aprendizaje automático), empresa y hospital están estudiando las posibilidades de prever cuándo los usuarios pueden olvidar de tomar la medicación.
Berdac encara el futuro con la salida inminente del producto al mercado, con proyectos nuevos y con la buena noticia de un primer inversor externo ya confirmado. La Nespresso de los medicamentos, pues, tiene el equipo, la tecnología, el producto, la inversión y los primeros compradores. Sólo le falta George Clooney para tener todos los ingredientes del éxito empresarial.