El ecosistema de las startups crece cada año. Cada vez son más los emprendedores que se lanzan al mercado con las expectativas altas y los objetivos puestos en mejorar las sociedades; y con estos mismos objetivos se da el pistoletazo de salida al 4YFN uno de los congresos mundiales dedicados a las empresas emergentes y que vuelve este año para promocionar, analizar y descubrir empresas mundiales que realmente están intentando cambiar el curso de la sociedad: "La naturaleza humana, sobre todo la manera con la cual nos relacionamos, cambia constantemente y la tecnología es una buena herramienta para adaptarnos a estos cambios y mejorarlos", explica Pere Duran, director de 4YFN..
Este año, el congreso acoge más de 450 startups de todas partes, más de 300 ponientes y más de 200 empresas emergentes que presentan su idea para conseguir hacerla realidad. En definitiva, 4YFN vuelve a la presencialidad después de la crisis de la covid-19 y lo hace de la mano de la Fira de Barcelona, pero también de patrocinadores y empresarios nacionales e internacionales.
Valls: "Las startups son el primer impulso de esta tracción que llevará al cambio"
En la conferencia de apertura tres empresarios nacionales ponen sobre la mesa los problemas principales de nuestro mundo -que ya existían antes de la covid- y que ahora podemos empezar a solucionar gracias a las nuevas tecnologías. Aún así, todavía parece que la sociedad no está del todo preparada para este cambio: "Estamos profundamente distraídos", explica Aleix Valls, CEO y cofundador de Liquid. En este sentido, el cofundador de Liquid recuerda que muchas veces sabemos lo que tenemos que hacer, pero no sabemos cómo hacerlo y esto provoca que las sociedades no avancen. Aun así, también se muestra esperanzado al hablar de las startups quién, según su parecer "son el primer impulso de esta tracción que llevará al cambio".
La ética de internet
"Somos los cinturones de seguridad de la Inteligencia Artificial", describe Gemma Galdon, CEO y fundadora de Eticas. La empresa de la poniente quiere poner punto final a la era de la no ética dentro de las redes sociales y de las plataformas. Así pues, Galdon cree que "tenemos que ser conscientes que no es bueno que no exista una regulación", puesto que necesitamos barreras para no enfrentarnos a los riesgos que provocan las redes. "La adicción en las redes es una dolencia existente y necesitamos regulaciones para pararla", añade la fundadora de Eticas.
Galdon: "La adicción en las redes es una dolencia existente y necesitamos regulaciones para pararla"
Además, Galdon recuerda que no es nada nuevo, puesto que la ética de las empresas ha existido siempre, simplemente se ha difuminado a la hora de hablar de internet o de redes sociales. "Nadie compraría un coche o se pondría una vacuna que solo necesita el juramento de su creador para comercializarse; lo mismo tendría que pasar con la Inteligencia Artificial y las nuevas tecnologías", insiste la empresaria y directiva.
Una revolución en los tejados
"El 100% energía verde y conectividad entre personas, estos son los objetivos de Holaluz", remarca Carlota Pi i Amorós, cofundadora y presidenta ejecutiva de la compañía. En este sentido, la cofundadora recuerda que hace diez años, cuando la empresa estaba empezando, podía pensar que tenían una visión "ingenua" de su proyecto, pero la pandemia ha hecho que este proyecto sea más realista que nunca, puesto que tal como explica Pi i Amorós: "La pandemia nos ha hecho dar cuenta de que necesitamos un cambio y Holaluz busca este cambio".
Pi i Amorós: "La pandemia nos ha hecho dar cuenta de que necesitamos un cambio"
En este contexto, la cofundadora de la empresa energética explica cómo solo en el Estado español ya hay millones de tejados con la capacidad técnica de convertirse en productores de energía solar y renovable. Aparte, España es uno de los países con más horas de sol en el mundo, unas 1.700 horas al año de luz, unos datos que tal como dice la cofundadora de Holaluz: "Pueden impulsar mucho más esta revolución energética".
La apertura del congreso promete startups, historias contagiosas y una gran apuesta para volver a la normalidad de los acontecimientos presenciales, toda una declaración de intenciones por parte de esta edición que, bajo el lema de la conectividad, quiere apostar por el futuro en esta nueva normalidad; un futuro que tal como describe Gemma Pi i Amorós: "Está en nuestras manos, puesto que solo llega cuando nosotros queremos que llegue".