Este 8M no habrá huelga feminista. Como el Día Internacional de la Mujer cae en domingo, las 24 horas de protagonismo laboral se han convertido en una semana de inputs feministas. La brechasalarial, la falta de mujeres en puestos de decisión y en profesiones concretas, la organización del tiempo, los liderazgos, la fiscalidad e incluso la sostenibilidad han marcado la agenda de los últimos días. Y es que la perspectivade género se puede aplicar a todos los ámbitos económicos (y de la vida). Si la canción de Cyndi Lauper de 1983 Girls just wanna have fun ya reclamaba conciliación recordando que las chicas también quieren divertirse cuando acaban la jornada laboral, ahora la frase ha mutado: Girls just wanna have funds es uno de los nuevos lemas de las mujeres emprendedoras y directivas.
"Las mujeres hemos hecho la revolución silenciosa más importante de la historia". Así empieza el manifiesto de la directora del Observatorio Mujer, Empresa y Economía de la Cambra de Comerç de Barcelona y presidenta de 50 a 50, Anna Mercadé, durante el segundo Fòrum Hipàtia, celebrado en Barcelona Activa y organizado por la asociación de mujeres empresarias, directivas y emprendedoras junto con 19 organizaciones más. Al mismo tiempo, Mercadé reclama "eliminar la brecha salarial en todos los niveles y en todas las profesiones" y advierte: "Esta és la revuelta de las mujeres contra la injustícia de la sociedad patriarcal y machista, organizada y dirigida por hombres que solo tienen en cuenta su visión del mundo".
Mercadé: "Esta és la revuelta de las mujeres contra la injustícia de la sociedad patriarcal y machista, organizada y dirigida por hombres que solo tienen en cuenta su visión del mundo"
Pero este es un problema de base y, en este sentido, hay consenso en que el problema es estructural: "Nos orientan a comportarnos de una manera determinada", avisa Sara Berbel, gerente del Ayuntamiento de Barcelona, durante su intervención en el Fòrum Hipàtia. Ante un auditorio de 200 personas con mayoría aplastante de mujeres, Berbel pone el foco en cuatro ejes: la igualdad de oportunidades, poner las personas en el centro, la organización del tiempo y los nuevos liderazgos. Entre ellas, la directora de Comunicación del Centro Internacional de HP, Eva Blanco, o la consultora Mar Gaya, entre muchas otras. Y una cara masculina conocida: la del presidente ejecutivo de Numintec, José María Torres.
Datos impactantes (y decepcionantes)
Faltan 57 años para que se elimine completamente la brecha salarial. Es uno de los datos más impactantes que expone Carme Poveda, directora de análisis económico de la Cambra de Comerç de Barcelona, durante la segunda mesa redonda de la tarde, sobre economía feminista. Pero desde UGT Catalunya, Eva Gajardo pone cifra a esta diferencia de sueldos entre hombres y mujeres: un 27%, a pesar de que un estudio del Departament de Treball la cifra en el 23%. "Los sueldos se negocian en privado, y como las mujeres partimos de unas retribuciones más bajas, siempre nos quedamos en niveles inferiores", intenta encontrar explicación Berbel.
En este sentido, el miércoles Pimec presentaba una guía para la igualdad retributiva en las empresas. Mireia Mata, directora general de igualdad de la patronal de la pequeña y mediana empresa catalana, indica que este 2019, la brecha salarial sólo se ha reducido cuatro décimas: "No nos podemos permitir hacer bajar la brecha tan lentamente, porque cada año que pasa es un año de injusticia".
Pero, ¿cuál es la clave para acelerar la situación? La consellera d'Empresa i Coneixement, Àngels Chacón, propone crear "alianzas" y generar "cooperación", alianzas donde "se añadan más hombres" para que "entiendan de una vez por todas que la aportación de mujeres tiene que ser igual". De hecho, a su parecer, "hasta que no entendamos que tenemos que integrar el 100% del talento de un país, no iremos bien". El auditorio de Barcelona Activa se escucha todas las ponentes atentamente y con una brizna de esperanza en su mirada. "Cada año decimos lo mismo, pero todavía hace falta esta denuncia", lamenta Chacón. "Tenemos que ser más feministas que nunca".
Violencia económica
Si bien en la primera edición del Fòrum Hipàtia se pedían "hechos y no palabras" para lograr la paridad y ya se hablaba de violencia económica de género, este año las ideas se han dicho de forma todavía más clara. La revuelta no silenciosa de las mujeres "ha comportado una reacción muy importante, evidenciando una clase de violeencia machista que bajo los emblemas de la extrema derecha ataca a las mujeres y pretende sustraernos los derechos que creíamos logrados", denuncia Mercadé.
Berbel: "No es que cuando haya paridad cojamos a la primera mujer que pasa por la calle, sino los mejores currículums"
El encuentro tiene un objetivo claro y así lo predica su manifiesto: "Frenar el avance machista y la violencia de género que existe en todos los ámbitos de la sociedad", "tomar conciencia de las manifestaciones sutiles que desde los poderes tácticos niegan las discriminaciones, las brechas salariales, la violoencia machista y de género", denunciar "cómo se nos victimitza y culpabilitza" y, por último pero no menos importante, para "dejar constancia de cómo se instrumentaliza el feminismo y denunciarlo".
No menos conocido es el techo de vidrio, cosa que también denuncia el manifiesto y que bautiza como "violencia económica contra las mujeres". "La primera decisión que tomé cuando llegué al Ayuntamiento fue paridad en las gerencias, y ha sido la primera vez en la historia del ayuntamiento que ha pasado", explica Berbel. Asegura que esto ha aportado nuevos valores, nuevas maneras de hacer y una cohesión que antes no existía. Y defiende las cuotas: "No es que cuando haya paridad cojamos a la primera mujer que pasa por la calle, sino los mejores currículums". La segregación vertical en puestos de trabajo no es la única que existe. La horizontal también es muy visible: hay profesiones feminizadas y otras en que las mujeres son difíciles de encontrar.
"Si no subimos al carro tecnológico, volveremos a la cocina"
El sector tecnológico es un ejemplo claro de todo esto. En la primera mesa redonda del Fòrum Hipàtia, Karina Gibert, catedrática de IDEAI-UPC, ve una amenaza inminente para las mujeres: "Si no subimos al carro tecnológico, volveremos a la cocina". Asegura que cuando ella estudiaba en la universidad, la facultad de informática tenía un 30% de mujeres; este curso, sólo se han matriculado un 7%. Gibert explica este paso atrás por la "presión social".
Chacón: "Ser feminista no es monopolio de ninguna organización política"
Berbel extiende el problema de la segregación horizontal en ámbitos como la inteligencia artificial, la industria 4.0, el 5G... Y da otra razón: "Nuestras niñas no tienen referentes y, por lo tanto, es difícil que elijan este tipo de carreras". La gerente del Ayuntamiento recuerda que los trabajos masculinizados tienen "mejores sueldos y prestigio, además de estabilidad laboral" y considera que es un camino de ida y vuelta, que los hombres también tienen que entrar en los ámbitos feminizados como la limpieza o la educación.
En este sentido, Berbel pone un ejemplo práctico: "Este año no ha habido Mobile y a todos nos ha sabido mal, pero el año pasado conté la cantidad de ponentes mujeres que había en el MWC y eran un 7%; en cambio, el 98% de las azafatas eran mujeres". Y no sólo esto. Si la imagen que se da es esta, también se considera, en palabras de la presidenta del Institut Català de les Dones, Laura Martínez, lamenta que "la emprendeduría aún tiene una imagen muy masculina". Para girar la tortilla, reclama, "necesitamos la colaboración del otro 50% de la sociedad para que nosotras también tengamos el espacio".
Son las reclamaciones de siempre, pero es más necesario que nunca que la paridad sea una realidad y no sólo tema de debate. Cómo decía la consellera d'Empresa, "ser feminista no es monopolio de ninguna organización política. Feminista lo puede ser todo el mundo tenga el trabajo que tenga, pero en el marco de la economía y la empresa también sufrimos discriminación y acoso". Y esto se debe revertir empezando porque esta no sea la única semana en que, por ejemplo, las y los periodistas recibimos infinitas notas de prensa de todos los agentes hablando de igualdad, pero las 51 semanas restantes del año se escucha hablar del tema con cuentagotas.