El salón turístico B-Travel, organizado por Fira de Barcelona, ha cerrado puertas después de tres días de actividad que han confirmado la "plena reactivación" del sector después de dos años de restricciones. Más de 25.400 personas se han acercado al palacio 8 del recinto de Montjuïc de la Fira para visitar los stands de más de 500 empresas y 35 países. En total, la asistencia ha sido un 25% más alta que la del año pasado, pero todavía se encuentra unos 4.000 visitantes por debajo de las cifras de 2019. “Estamos muy satisfechos por reactivar el sector”, ha asegurado Marta Serra, directora del salón.
Serra ha subrayado que el B-Travel "ha vuelto a marcar el punto de partida" de la campaña turística de este año 2023. Los datos de la organización muestran que el 65% de los visitantes acaban reservando sus vacaciones de Semana Santa y de verano entre las ofertas y promociones presentadas por los expositores. Según Serra, los expositores han constatado las "ganas de viajar" del público, que se ha decantado por destinos internacionales como Argentina, Brasil, Croacia, Cuba o Portugal. Los destinos ofrecidos por agencias especializadas en África o Asia, también han estado entre los más solicitados por los visitantes.
En cuanto a las escapadas de proximidad, el visitante del B-Travel ha optado por visitar rincones de Catalunya o comunidades autónomas como Aragón, Andalucía, Baleares. El B-Travel ha sido, además, el escenario en el que se han dado a conocer diversas novedades como los nuevos trenes turísticos temáticos como resultado de la colaboración entre la Diputació de Barcelona y Renfe.
La feria también ha contado con un área ecogastronómica con sesiones musicales. A lo largo de los tres días de salón, se han servido más de 1.200 tapas, más de 1.000 hamburguesas y 600 litros de cerveza con mucho público tanto en los conciertos como en catas y maridajes. Aparte de recibir al público general, el salón ha congregado a más de 1.200 agentes sectoriales.