Aunque aún es temprano para que las aulas empiecen a llenarse, no lo es para las residencias universitarias. Durante esta semana, la ciudad de Barcelona ha comenzado a acoger a miles de estudiantes internacionales de cara a este curso académico 2024/25, lo que consolida la capital catalana como un polo de atracción universitaria y aumenta la necesidad de residencias en la metrópoli. Esta es una de las razones por las cuales la ciudad condal concentra toda la inversión estatal en residencias de estudiantes durante el primer semestre del año, alcanzando los 219 millones de euros; un 68,5% más que en el mismo período del año pasado, según los datos facilitados por la consultora inmobiliaria CBRE.
El segmento 'Living' en Barcelona ha registrado una inversión de 269 millones de euros durante los primeros seis meses del año, un 3% más
"El crecimiento del número de estudiantes y el incremento de la población estudiantil internacional ha aumentado la necesidad de residencias de estudiantes", asegura Olga Beltrán, jefa de Living Barcelona de CBRE. De hecho, el segmento Living en Barcelona ha registrado una inversión de 269 millones de euros durante los primeros seis meses del año, un 3% más, impulsado por las residencias de estudiantes, con un peso del 81,3% sobre el total. “En 2023, el aumento de la oferta de plazas y la mejora de la ocupación de las residencias mostraron un buen comportamiento de este mercado en Barcelona, con una inversión de 130 millones de euros, una tendencia que prevemos que este año se mantenga”, añade.
Pero, ¿por qué Barcelona?
“Barcelona es un enclave atractivo para los estudiantes, no solo por su amplia oferta académica, sino también por las numerosas oportunidades de desarrollo personal y profesional que ofrece”, apunta a VIA Empresa Anna Romero, Living Operation Manager en Hines para Aparto España, la plataforma de gestión de residencias de estudiantes. La experta detalla que durante el curso 2021/22, Catalunya se consolidó como la segunda comunidad receptora de estudiantes internacionales, con un total de 29.000, mientras que la cifra de estudiantes de otras regiones del país ascendió a 42.000: “Estos datos subrayan el atractivo de la ciudad y su creciente demanda de alojamientos adecuados”, añade.
La experta de Hines destaca que entre el 90 y el 95% de los estudiantes que gestiona la plataforma son internacionales, abarcando hasta 60 nacionalidades. Como norma general, se encuentran en el intervalo de los 17 a los 22 años y este nuevo curso escolar lo protagonizarán los jóvenes estadounidenses, franceses e italianos. En cuanto al abanico de estudios, Romero asegura que “es muy diverso”, con una cierta inclinación hacia el marketing, las finanzas, el ámbito digital y diferentes ramas artísticas.
Atendiendo a las nacionalidades de los estudiantes, coincide que Francia (19%) e Italia (16%) son los países que lideran la inversión en residencias de estudiantes en Europa, por detrás de España: en 2023, el Estado representó el 23% de la inversión del continente con un total de 416 millones de euros. La cifra total del periodo comprendido entre 2018 y 2022, fue de 3.510 millones, el 24% del total de la inversión europea, y por encima de Alemania (19%) y Francia (13%), según los datos de CBRE.
De 950 a 1.600 euros: el coste mensual de la cama acompañada de servicios de vanguardia
Como curiosidad, destaca que España es uno de los países europeos con menos provisión de camas: con un 6,7%, se encuentra lejos de la media europea del 18%. Hoy día, hay un total de 115.000 camas operativas, y se prevé sumar 14.500 más hasta 2026, alcanzando las 130.000 plazas. Aunque la mitad (54%) estará repartida entre Barcelona y Madrid, el mercado catalán cuenta con 15.900 camas operativas, con la previsión de obtener 3.500 más.
Con un 6,7%, España es uno de los países europeos con menos provisión de camas
Ahora bien, ¿cuál es el costo de una cama? Las residencias universitarias no escapan de los elevados precios que ofrece el mercado inmobiliario y, a pesar de que el precio medio de una residencia para un curso universitario en la capital catalana varía en función de la ubicación, los servicios ofrecidos y la calidad de las instalaciones, Romero detalla que puede oscilar entre los 950 y los 1.600 euros mensuales.
La experta valora la importancia de ofrecer un servicio de calidad a los estudiantes, “evitando enfocarse únicamente en ofrecer un lugar donde vivir”: “Queremos crear un entorno que facilite el desarrollo académico y personal de los estudiantes y construir una comunidad con los estudiantes que les haga disfrutar de manera global de su experiencia”, comenta, destacando espacios clave para la socialización y el bienestar de los estudiantes, desde gimnasios hasta salas de estudio y espacios exteriores.
En el inicio de este nuevo curso escolar se ha reflejado que la proximidad a los centros educativos es uno de los factores más influyentes en la demanda de alojamiento. A modo de ejemplo, el distrito tecnológico 22@ cuenta con Aparto Pallars y Aparto Cristóbal de Moura, las dos residencias gestionadas por parte de la plataforma que desde el pasado lunes están acogiendo estudiantes de todo el mundo. “Esta zona se está consolidando como un punto de atracción clave por la proximidad a las universidades y la buena calidad de vida que ofrece a los estudiantes”, indica Romero, quien subraya la creciente demanda por “espacios nuevos, de vanguardia y de alta calidad” y acompañados de una amplia gama de servicios como los mencionados anteriormente.
El Flex Living, el mejor aliado de los estudiantes internacionales
“Barcelona está en constante evolución para poder acoger al número creciente de estudiantes internacionales y estatales”, continúa Romero, quien detalla que “las necesidades actuales y futuras de la ciudad implican continuar ampliando la oferta de residencias de estudiantes de alta calidad que se adapten a las expectativas cambiantes de los estudiantes”. En este sentido, todo apunta a que el Flex Living jugará un papel clave en la diversificación de alternativas de alojamiento. Precisamente, este es el segmento del Living por el que apuesta Hines, que está desarrollando un macroproyecto en Porta Diagonal tras adquirir a Sacresa una torre de 21.000 metros cuadrados por 85 millones de euros. Esta, con licencia hotelera, dispondrá de más de 520 habitaciones y supondrá una opción más que atractiva para estudiantes y jóvenes profesionales.