• Economía
  • BBVA y Banc Sabadell negocian una fusión para convertirse en la segunda entidad del Estado

BBVA y Banc Sabadell negocian una fusión para convertirse en la segunda entidad del Estado

​El grupo resultante tendría un volumen de activos de 600.000 millones de euros, muy cercano al de la entidad surgida de la absorción de Bankia por parte de Caixabank

El presidente de BBVA, Carlos Torres, en una imagen de archivo | Europa Press
El presidente de BBVA, Carlos Torres, en una imagen de archivo | Europa Press
ACN
Barcelona
17 de Noviembre de 2020
Act. 17 de Noviembre de 2020

El BBVA ha confirmado que mantiene conversaciones con el Banc Sabadell para negociar una fusión entre las dos entidades. En un comunicado remitido este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la entidad presidida por Carlos Torres ha reconocido que los dos grupos han iniciado un proceso de revisión de activos (due diligence) y ha designado asesores externos para evaluar la operación. En el mismo comunicado, la entidad de Bilbao subraya que "no se ha tomado ninguna decisión en relación con una potencial operación de fusión" y añade que "no hay ninguna certeza que se llegue a adoptar".

 

Si la fusión se acabara concretando, la entidad resultante tendría un volumen de activos que se acercaría a los 600.000 millones de euros, una cifra muy próxima a la de CaixaBank y Bankia conjuntamente. Minutos más tarde, el Sabadell también ha reconocido las conversaciones a través de otro hecho relevante publicado en la CNMV. En el escrito, la entidad presidida por Josep Oliu apunta que las negociaciones cuentan con la autorización del consejo de administración del banco y, en linea con lo que señala el BBVA, "no se ha tomado ninguna decisión ni hay la certeza de que se adopte".

La información ha trascendido poco después de que el diario El Confidencial publicara que el BBVA había contratado al grupo financiero JP Morgan para negociar una fusión con el Banc Sabadell. Según el digital, la entidad vasca también contaría con el asesoramiento legal del despacho de abogados Garrigues. Por su parte, el Sabadell anunció el pasado septiembre la compra de la firma de inversiones Goldman Sachs para evaluar nuevas estrategias de crecimiento. De hecho, durante la presentación de resultados del tercer trimestre, el consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, reconoció que la entidad estaría "abierta a aquellas oportunidades que suponen la creación de valor por el accionista".

 

A pesar de que todavía no hay una propuesta en firme, el BBVA se encuentra en una buena posición de liquidez para presentar una oferta. Este mismo lunes, el banco ha anunciado la venta de su filial estadounidense al grupo PNC por 11.600 millones de dólares (9.700 millones de euros). Según ha informado la misma entidad, la operación generará 8.500 millones de capital y ofrecerá "una gran flexibilidad estratégica para invertir de forma más rentable en los mercados", tal como ha señalado Carlos Torres.

A raíz de la operación en Estados Unidos, el valor en bolsa del BBVA y el Banc Sabadell se han incrementado. En caso de que se acabara completando la fusión, la entidad resultante pasaría a ser la segunda más grande en el Estado en volumen de activos. En total, sumarían activos por 589.127 millones de euros (datos a cierre de 2019), cerca de los 650.000 millones que sumarían Caixabank y Bankia, y lejos de los 350.000 millones del Santander. Teniendo en cuenta el último ejercicio, los beneficios agregados serían de 4.280 millones y el margen de intereses se situaría alrededor de los 22.000 millones.

En cuanto al número de oficinas, ambas entidades sumarían más de 10.000 (repartidas por el Estado, el Reino Unido, Estados Unidos, México, Turquía, varios países de América del Sur y algunos puntos de Asia), mientras que la cifra de trabajadores superaría los 150.000. Sin embargo, habría que definir cómo se quedaría reestructurada la plantilla en caso de que se concretara la fusión. En el caso del Sabadell, la entidad ha puesto en marcha un plan de reestructuración en el Estado con el que quiere recortar alrededor de 1.800 puestos de trabajo, un 40% de los cuales en Catalunya.