La importancia de los datos y la inteligencia artificial ha centrado la nueva jornada sobre la industria 4.0 de la Fundació per la Indústria, organizada para favorecer la transformación digital de las pymes catalanas. Las experiencias del Banc Sabadell y Bon Preu han protagonizado el encuentro, que ha servido para poner en valor la vital importancia que tiene la gestión y el análisis de datos para las empresas.
"Los datos son un tesoro", ha enfatizado Enric Rovira, director general adjunto de Banc Sabadell, que ha insistido en que la dificultad es saber qué hacer con la gran cantidad de datos de las que disponen las empresas y como convertirlos en un lenguaje con sentido común que pueda servir para tomar decisiones acertadas. Si la internacionalización fue clave en la salida de la crisis de 2008, ha asegurado que ahora lo será la transformación digital. La diferencia, ha remarcado, es que ahora llegarán 140.000 millones de la Unión Europea para incentivarlo.
"Nuestra economía tiene una gran oportunidad de progreso, aprovechando los fondos de recuperación europeos y dirigiendo las acciones e inversiones hacia la transformación digital y sostenible", ha resaltado Josep Roca, presidente de Fundació per la Indústria.
Los datos, un "tesoro escondido"
Pier Paolo Rossi, director de Inteligencia de Negocio del Banc Sabadell, ha marcado la hoja de ruta para que una pyme pueda incorporar el análisis de datos en su negocio. El primer paso es encontrar este "tesoro escondido" que tienen todas las empresas. Un tesoro que puede estar en discos duros u ordenadores y que si se procesa adecuadamente, pueden ser fundamentales para definir la estrategia empresarial. "Hasta ahora las decisiones en las pymes se tomaban en base a la experiencia", ha explicado. Ahora, con el conocimiento que aportan miles de datos, se puede hacer de manera mucho más analítica y eficiente.
Y para hacerlo es necesaria la inteligencia artificial. Rossi ha querido romper mitos y ha asegurado que la tecnología ya es trueque y accesible. No hacen falta grandes inversiones. A partir de aquí, el secreto es convertir los miles de datos de los que disponemos (de los clientes, proveedores...) y convertirlos en patrones de comportamiento que, con un modelo matemático, puedan establecer predicciones. "Te permite conocer cómo son y que necesitan tus clientes. A partir de este conocimiento, puedes predecir qué harán en un futuro y tomar decisiones", ha detallado.
Los datos (que tienen todas las empresas), la tecnología (accesible y económica) y el talento son los ingredientes necesarios de este nuevo paradigma. Rossi ha recordado la guerra por el talento que existe, especialmente en profesionales en analítica. Pero ha animado las empresas a aprovechar también sus profesionales, formarlos y capacitarlos para poder desarrollar esta tarea.
Bon Preu, los datos como patrón
"Los datos son indispensables", ha sentenciado Pere Anglada, director financiero de Grup Bon Preu. Para la empresa catalana, han sido fundamentales en su crecimiento que los ha traído de la primera tienda el 1974 además de 200 puntos de venta y a facturar alrededor de 1.500 millones de euros. Pero también ha remarcado que por sí solas no son suficientes: "Esto suele no hace milagros. El empujón, la voluntad de mejorar cada día, continúan siendo tan imprescindible como antes. Pero el empujón sin los datos hoy es totalmente insuficiente".
Pere Anglada: "Hemos pasado del conocimiento personal del cliente con nombres y apellidos a tener datos del millón de clientes que tenemos"
Para Bon Preu, los datos han sido una herramienta imprescindible para poder hacer frente a sus competidores, verdaderos "monstruos" del sector como pueden ser Carrefour, Mercadona, Cepsa o Shell. Y ha explicado de manera sencilla qué quiere decir este uso de los datos: "Hemos pasado del conocimiento personal del cliente con los nombres y apellidos en las primeras tiendas a tener los datos de todo el millón de clientes que nos compra recurrentemente y a conocer su comportamiento". Todo, ha remarcado, garantizando la privacidad, un aspecto que valoran mucho: "Bon Preu se podría hundir perdiendo la reputación que tiene".
Uno de los campos donde utilizan el análisis de datos y la inteligencia artificial es en relación con el conocimiento de los clientes. A través de la segmentación, saben los gustos y preferencias de todos ellos. Si antes enviaban publicidad a los buzones de manera indiscriminada, ahora las promociones llegan a aquellas personas interesadas en determinados productos. Una "cirugía" para dar aquello que quiere a cada cliente".
"Si yo soy capaz de dar el máximo a cada cliente, sin derrochar dinero en promociones estériles sin regreso, ofreciendo a cada cliente lo que le gustará, es fantástico, Con menos inversión, consigues mejores resultados", resume.
Pere Anglada: "Cómo hacíamos los pedidos hace 20 años en las tiendas? No lo debían hacer muy bien"
Otro ejemplo es la gestión de las provisiones y productos, vital en establecimientos que superan las 25.000 referencias. "Cómo hacíamos los pedidos hace 20 años en las tiendas? Casi no lo debían ni hacer", ha reflexionado. Ahora, con una aplicación permite hacer los pedidos de manera automatizada teniendo en cuenta miles de variables que ningún humano podría considerar. El objetivo, que no falte nunca ningún producto en los estantes. "Es un reto monstruoso que sin tecnología no podríamos conseguir", ha apuntado.
Ahora también establecen los precios a través del análisis de datos, con aplicaciones que recogen los precios de los productos de toda la competencia y estableciendo lo que más interesa en Bon Preu. Todo ello, con el objetivo de maximizar la eficiencia y lograr el objetivo de satisfacer y fidelizar al cliente.