
Las mujeres cobran un 12% menos que los hombres en la Unión Europea, según los últimos datos de la oficina estadística europea Eurostat correspondientes a 2023, lo que supone una reducción de la brecha salarial respecto al año anterior de 0,7 puntos porcentuales. Sin embargo, en el Estado español se registra una variación en sentido inverso y la diferencia entre el salario bruto por hora que perciben los hombres respecto a las mujeres es ahora del 9,2%, mientras que en 2022 era del 8,7%. Aun así, España sigue en la banda baja de los países europeos en este ranking, donde destacan en negativo países como Letonia (19%), Austria (18,3%) o República Checa (18%), y en positivo, Italia (2,2%), Bélgica (0,7%) y Luxemburgo, el único país donde la brecha salarial es favorable a las mujeres.
En 2023 los ingresos brutos por hora de las mujeres fueron, de media, un 12% inferiores a los de los hombres de la Unión Europea, y un 12,3% en el conjunto de la zona euro. Esto representa una reducción de la brecha salarial en la UE de cerca de un punto (en 2022 era del 12,7%), aunque hay países con situaciones muy diversas. Los dos extremos, Letonia, con un 19% de diferencia salarial entre hombres y mujeres a favor de los primeros, y Luxemburgo, el único estado miembro donde son las mujeres las que cobran un 0,9% más que los hombres.
España sigue en la banda baja de los países europeos en este ranking, donde destacan en negativo países como Letonia (19%), Austria (18,3%) o República Checa (18%)
En el Estado español, entre 2022 y 2023 la estadística ha empeorado. Según los datos publicados por Eurostat en ambos años, en el primero la brecha salarial se situaba en el 8,7%, y ahora ha subido medio punto, hasta el 9,2%. Aun así, España se sitúa por debajo de la media de la UE (12%) y, por tanto, entre los países con una brecha salarial más baja, por debajo de la de Francia (12,2%), Dinamarca (14%), Alemania (17%) y Países Bajos (12,5%), entre otros, pero, en cambio, por encima de la de Portugal (8,6%) y, con mucha diferencia, de la de Italia (2,2%).
El factor maternidad
Los datos también constatan cómo, de forma general, la desigualdad salarial es mucho inferior entre los jóvenes que se incorporan al mercado de trabajo, y que tiende a ampliarse con la edad, aunque, de nuevo, estas diferencias tienen patrones diferentes en función del país.
La oficina estadística europea señala que la brecha salarial “podría aumentar con la edad como resultado de las interrupciones de carrera que las mujeres pueden experimentar durante su vida laboral”. Un análisis compartido, entre otros, por el sindicato UGT, que en su último informe sobre la brecha salarial en Cataluña subrayó cómo esta “se dispara” a partir de los 35 años: del 10,4% en el grupo 19-25 al 18,9% en el de 35-44 (porcentajes calculados de acuerdo con el salario bruto anual y no por hora trabajada).
En 2023 en todos los países de la UE excepto Hungría y Eslovenia se registró una mayor desigualdad salarial hombres mujeres en el sector privado
Por otro lado, Eurostat también ofrece datos de la brecha en función del trabajo en el sector público o privado. En 2023 en todos los países de la UE excepto Hungría y Eslovenia se registró una mayor desigualdad salarial hombres mujeres en el sector privado. “Esto podría deberse a que en la mayoría de países los salarios del sector público son determinados por tablas salariales transparentes que se aplican por igual a hombres y mujeres”, apuntan.