El talento se ha convertido en imprescindible para la transformación digital. Este nuevo escenario está comportando una "guerra" por el talento que se disputa entre empresas y territorios, que se tienen que convertir en marcas atractivas para los trabajadores. Es una de las reflexiones que Josep Albet, consultor experto en cultura empresarial, hizo durante la segunda sesión del ciclo organizado por la Fundació per la Indústria para potenciar la industria 4.0 como impulsora de la transformación de la economía catalana.
"El talento es uno de los retos que plantea la industria 4.0", enfatizó Albet, que puso de manifiesto que la transformación digital hará desaparecer los trabajos manuales para hacer aumentar la importancia de los intelectuales y creativos. "Necesitaremos gente que cree y busque soluciones", resumía.
Y esta realidad genera un problema: no hay suficiente talento para satisfacer toda la demanda. Un problema, explicaba, especialmente grave en el Estado español. En este contexto, Albet advirtió que "la digitalización está acelerando la guerra por el talento".
Josep Albet: "No competimos sólo en productos y servicios, sino por el conocimiento, por las personas"
Esto obliga las empresas a convertirse en marcas reconocidas por los trabajadores y ser atractivas para que la gente quiera trabajar. "No competimos sólo en productos y servicios, sino por el conocimiento, por las personas", sentenciaba. Esto obliga las empresas a adaptarse a las nuevas exigencias de los jóvenes, que pasan para ofrecer estrategias claras, posibilidades de crecimiento o flexibilidad. Y, sobre todo, a ir a buscar el talento. Un caso de empresa atractiva es Google, que el año pasado recibió 2 millones de currículums.
"La competición por el talento acabará siendo una competición de territorios, los que ofrezcan unos entornos más atractivos, serán capaces de traer el talento. Las ciudades jugarán un papel muy importante en la competición", añadía. En este sentido, ponía de ejemplo el caso de una empresa destacada del sector de los videojuegos que, entre sus ganchos para atraer trabajadores, destacaba que tenía la sede en Barcelona.
La transformación digital, también por las pymes
Cuando se habla de industria 4.0, muchos pequeños y medianos empresarios lo ven como una cosa lejana y fuera de su alcance. Aún así, el presidente de la Fundació per la Indústria, Josep Roca, lo sitúa como "un paso necesario para afrontar los cambios que estamos viviendo".
Es el caso de Cafès Cornellà, que relató su CEO, Pere Cornellà: "La digitalización es un proceso transformador y acelerador, donde las pymes tenemos grandes oportunidades. La combinación de talento y tecnologías de la información y conocimiento nos permiten dar un paso de gigante en relación a las grandes compañías".
Cornellà: "Una máquina de café es un bien de Dios de sensores"
Una posibilidad que nunca antes había vivido, a pesar de ser una empresa nacida en 1920. En su caso, apostaron por la transformación digital a finales de los 90 con el objetivo de conseguir que los cafés de su marca que se servían en restaurantes y bares tuvieran la máxima calidad. Hasta entonces sólo se encargaban de servir los grandes de café a la restauración, pero vieron que su negocio era, sobre todo, como se convertía en bebida las tazas de los clientes.
Establecieron un sistema integral de calidad, lanzaron una app y ya disponen de una cafetera 4.0, que permite monitorizar la producción de cada café, la trazabilidad del consumo, prevenir averías o aumentar la eficiencia. Todo para conseguir una taza de café "perfecto".
En este sentido, recalcó que la tecnología "por sí misma no tiene sentido" y que hace falta que detrás haya una idea y unos objetivos claros. "Una máquina de café es un bien de Dios de sensores, que se pueden interconectar y que nos dan la posibilidades de sensorizar la presión, la temperatura, los circuitos hidráulicos", apuntaba.
Al alcance de pequeñas y medianas empresas
Xavier Armengol, vicepresidente de industria de la Zona Ibérica de Schneider Electric, destacó que la tecnología para avanzar hacia la transformación digital ya existe y está al alcance de las pymes. "Las soluciones tecnológicas que tienen que habilitar el cambio tienen que empezar con poca inversión, poco invasivas y graduales", remarcaba.
Armengol resaltaba todas las herramientas que permiten monitorizar plantas industriales, máquinas o procesos con el objetivo de aumentar la eficiencia, la productividad, la seguridad y prevenir averías. Por ejemplo, plataformas que permiten saber como está funcionando una máquina a través del móvil y, en caso de que haya alguna avería, poder actuar al instante y de manera guiada con expertos.
"La tecnología está y tenemos que ir adelante porque es la única forma de tener una industria más fuerte, más resiliente y de más futuro en Catalunya", insistió el representante de Schneider Electric.