La Fundació La Caixa ha añadido dos millones de euros adicionales al programa CaixaProinfància, para luchar contra la pobrezainfantil. Lo hace para hacer frente a las necesidades alimentarias de las familias vulnerables durante la crisis del coronavirus. Estas ayudas extraordinarias se suman a los 60 millones de euros anuales de este programa.
A través de un comunicado, la fundación indica que 2.925 familias catalanas en riesgo de exclusión recibirán una ayuda de 300 euros a través de una tarjeta que permite comprar a los establecimientos de alimentación, mientras que en el conjunto del Estado serán más de 10.000. Unas 400 entidades sociales se ocuparán de canalizarlas.
El programa parte de la base que las condiciones del entorno influyen directamente sobre los procesos de aprendizaje y escolarización, hecho que dificulta que los niños y adolescentes que viven en contextos vulnerables logren el éxito escolar. En un contexto de crisis como el de la covid-19, indica el comunicado, "las familias con menos recursos son las que sufren más el impacto".
El objetivo del programa CaixaProinfància es romper la línea de transmisión de la pobreza de padres a hijos, favoreciendo el pleno potencial y las capacidades de los menores. Las cinco líneas de trabajo de la iniciativa son: el refuerzo educativo, la educación no formal y el tiempo libre, el apoyo educativo familiar, la atención y terapia psicosocial, y la promoción de la salud.
"Dando continuidad a nuestro intenso compromiso con las familias desfavorecidas, la Fundación "la Caixa" redobla sus esfuerzos en el marco de una crisis sanitaria sin precedentes para estar junto a los más vulnerables y ayudarlos a salir adelante en estos momentos difíciles", ha subrayado el presidente de la Fundació Bancària "la Caixa", Isidre Fainé.