Montar una tienda de zapatos en Terrassa con los stocks de una fábrica que cerró. En este teórico fracaso, se encuentra el origen de la empresa familiar Calzados Lamolla, con más de un siglo de trayectoria, y propietaria entre otras de las zapaterías Casas. En este largo camino, la apuesta por el diseño propio y la fabricación de los productos por encargo, proceso por el cual trabaja con más de 200 proveedores, son algunos de los rasgos que le han permitido sobrevivir en un sector que ha sufrido, quizás más que ningún otro, el boom de las compras on-line. La diversificación de las marcas es el método que le ha permitido seguir adelante. Así explica este viaje el director de la compañía, Jordi Casas. En este contexto, la firma ha recibido un préstamo ICF Eurocrèdit, otorgado por el Institut Català de Finances (ICF). El apoyo financiero del organismo de la Generalitat de Catalunya servirá para la apertura tiendas e incorporar adelantos tecnológicos a sus procesos operativos.
Jordi Casas admite el tsunami que ha supuesto, especialmente en el periodo postpandémico, la moda de comprar zapatos a través de las plataformas on-line. Ante esta realidad, Calzados Lamolla ha optado por reivindicar sus atributos diferenciales. "En la experiencia de compra, el consumidor quiere la comodidad de probarse los zapatos y comprobar que se trata de un producto de calidad". A estas alturas, la venta on-line supone un 7% del total de la compañía. Eso sí, Casas detalla que "los compradores primero pasan por la tienda en un 40% de los casos". Esta combinación de establecimiento físico y on-line garantiza al cliente la certeza de haber hecho una transacción transparente.
El plan de expansión empresarial contempla consolidarse en el mercado español y explorar oportunidades de implantación en Europa
Calzados Lamolla tiene 48 tiendas repartidas por Catalunya, el País Vasco, Valencia y Madrid. Ahora, el plan de expansión contempla consolidarse en el mercado español y explorar oportunidades de implantación en Europa. Las zapaterías Casas pertenecen a la compañía Calzados Lamolla, el cuartel general de la cual está en Terrassa. El grupo de Lamolla cuenta con tres empresas más, Mont-Magast, Pair of Shoes y Calzados Marimer. Casas añade que "desarrollamos constantemente nuestra marca y la comercializamos también a través de internet en un marketplace". Como ejemplo, habla de Camila's, una marca en la que son expertos en vender zapatos a un perfil caracterizado por ser una mujer contemporánea, que valora un producto que es tendencia, elaboradas con piel de calidad y a un precio ajustado. "Representamos un tipo de establecimientos pensados para un público familiar, productos diversificados y con una elección por el diseño y la confortabilidad".
El valor del asesoramiento
Jordi Casas recuerda que el primer contacto con el ICF lo tuvieron en 2008, en que un préstamo a largo plazo favoreció la operación de compra de una finca en un momento con problemas de liquidez a consecuencia de la crisis económica. Ahora más de 15 años después, la empresa de la familia Casas se ha beneficiado de un préstamo ICF Eurocrèdit, una línea cofinanciada por la Unión Europea, de 975.000 euros, que tiene que servir para la apertura de tiendas en Barcelona, Granollers y Mataró. Además, el director remarca que "nos facilitará la mejora tecnológica de nuestros procesos y las operativas". Bajo el argumento que ser una compañía implica cuidar todo lo que tenga relación con el cliente y su entorno, Casas precisa que este hecho les hace posicionarse en el mercado ante la competencia.
Esta línea del ICF está destinada a los préstamos para pequeñas y medianas empresas que quieran financiar inversiones o proyectos para crecer, abrir nuevos mercados, hacer nuevos desarrollos o fortalecer las actividades de la empresa. Las operaciones aprobadas a través de esta línea cuentan con unas condiciones preferentes gracias a la cofinanciación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) de la Unión Europea que tiene el objetivo de invertir en crecimiento y ocupación.
Respecto a la relación con el ICF, Casas valora positivamente "el asesoramiento sobre las tipologías de crédito, el trato próximo y la accesibilidad y la profesionalidad para dar respuesta a las necesidades del día a día"
Con el préstamo, Jordi Casas avanza que "llevaremos a cabo inversiones en tecnología, empleándola en los almacenes, las peticiones de los clientes, la gestión de stocks o para ampliar la información de los productos". Analizar con Inteligencia Artificial (IA) el origen de los proveedores y reforzar el contacto digital con los clientes mediante herramientas como las 'apps' o la web son los objetivos que persigue Calzados Lamolla con este proyecto. Respecto a la relación con el ICF, Casas valora positivamente "el asesoramiento sobre las tipologías de crédito, el trato próximo y la accesibilidad y la profesionalidad para dar respuesta a las necesidades del día a día".
La competencia, en máximos
Las tiendas Casas, barco insignia de Calzados Lamolla, ha celebrado un siglo de historia con un ambicioso plan de expansión. La cadena de zapaterías facturó 38 millones el año pasado. Los últimos años se han distinguido por, los cambios en las tendencias de consumo, abandonando la venta física para dedicarse en exclusiva a la e-commerce, con precios bajo mínimos y una competencia al máximo nivel. Las armas de Casas para luchar contra este fenómeno han sido potenciar su marca propia y valorar el conocimiento del producto y del cliente, de sus gustos y una atención personalizada. La expansión geográfica que plantea también responde a la adaptación a la nueva realidad del comercio.
Con 474 empleados, Casas cuenta con un abanico de marcas diversas, como Camila's, especializada en calzado para mujer, Elevan, de hombre; Camelot, de calzado infantil, y Yuujou, juvenil y de fuerte componente de tendencia. Con las marcas propias, Casas completa la oferta del resto de enseñas que comercializa como New Balance, Martinelli, Fly London, Geox o Nike, entre otras. Toda la estrategia, tal como comenta Jordi Casas, es hacer la vida fácil al cliente tanto en la tienda como en la entrega de pedidos on-line. Este propósito es viable gracias a un triángulo logístico entre el cliente, los establecimientos y el almacén.