La Cambra de Barcelona ha revisado al alza el crecimiento de la economía catalana para el 2023 (2,2%) y 2024 (2,3%), a raíz del dinamismo del sector exterior y la evolución favorable de la inflación. Según el Informe de la coyuntura catalana del segundo trimestre de 2023, elaborado por la Cambra de Comerç de Barcelona y el equipo de AQR-Lab de la UB, a finales de año y principios del 2024, se prevé que el crecimiento económico se modere en un contexto de estancamiento de la actividad en la zona euro y el impacto de las subidas del tipo de interés. El informe también concluye que la ocupación creada después de la pandemia ha sido de mayor valor añadido y con una mayor participación de los extranjeros y del sector público.
El sector exterior sostiene el adelanto de la actividad
El sector exterior ha sido el motor de crecimiento de la economía catalana en un contexto de mayor competitividad por la normalización de las cadenas de suministro globales, el descenso de los costes energéticos y el dinamismo del turismo extranjero. En adelante, la debilidad económica de Europa hace prever un menor dinamismo del sector exterior catalán. De hecho, los últimos datos hasta mayo ya reflejan una desaceleración generalizada de las exportaciones (a precios corrents) en el segundo trimestre del año.
La inflación y la resiliencia del mercado laboral
La Cambra ha revisado a la baja la previsión de inflación anual de Catalunya para el 2023 del 4,1% al 3,6% en base a tres argumentos. Primero, se prevé que la tendencia favorable de los precios de los alimentos continúe contribuyendo a reducir la inflación si la moderación de los costes de producción de los alimentos sigue a la baja. Segundo, la contribución de los servicios a la inflación se ha estabilizado durante los últimos meses, a pesar de que continúa elevada y siendo uno de los principales riesgos a la evolución futura de la inflación. Y, tercero, las presiones salariales han sido menos intensas durante el según trimestre del 2023 en un contexto de mejora de las perspectivas sobre la inflación.
En concreto, el incremento de los salarios negociados en España en los nuevos convenios se ha situado entre enero y el junio del 2023 en el 4,2%, un adelanto más moderado a la dinámica que se venía experimentando durante los tres primeros meses del año (4,8%). De continuar con estas dinámicas, se espera una evolución favorable de la inflación que tendría que contribuir a mejorar la capacidad adquisitiva de los consumidores en un entorno de dinamismo y resiliencia del mercado laboral.