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Casi la mitad de la brecha salarial de género en Catalunya se debe a los complementos salariales

Comisiones Obreras (CCOO) denuncia que la brecha salarial real de género solo se ha reducido 200 euros

Presentació de l’informe anual sobre bretxa salarial de gènere a Catalunya.
Presentació de l’informe anual sobre bretxa salarial de gènere a Catalunya.
14 de Febrero de 2025
Act. 14 de Febrero de 2025

La brecha salarial de género en Catalunya sigue presente. Así lo indican los resultados del informe de CCOO Brecha salarial de género en Catalunya, 2022, que analiza el impacto y la evolución de la desigualdad salarial entre hombres y mujeres. “En Catalunya, la diferencia es del 24,24% en el salario anual y del 13,2% por hora trabajada. Es decir, por cada 1.000 euros de un hombre, una mujer cobra 760 euros”, ha asegurado la socióloga y autora del estudio Irene Galí, durante la presentación del informe en las oficinas de Comisiones Obreras (CCOO). Unas palabras que la secretaria de Mujeres y Políticas LGTBI, Mentxu Gutiérrez, ha reafirmado: “Si seguimos así, la brecha no desaparecerá hasta el 2050". 

 

La indignación ha sido la gran protagonista del acto. Y es que los hombres cobran más que las mujeres por el mismo trabajo o trabajos igualmente valiosos. Durante la parte inicial, las dos ponentes han explicado cómo la brecha salarial de género disminuye en porcentaje y la diferencia en euros se mantiene estable. Es decir, si bien en el año 2008, con una diferencia salarial anual entre hombres y mujeres de 6.425 euros teníamos una brecha salarial del 32,4%, 14 años después, en 2022, con una diferencia salarial que solo se ha recortado en 200 euros, la brecha salarial es del 24,2%. A continuación, la socióloga ha señalado que la desigualdad salarial entre las mujeres trabajadoras está aumentando, ya que empezamos a romper el techo de cristal, pero no nos libramos del suelo pegajoso. Es decir, en los segmentos más altos de la estructura salarial, los salarios de las mujeres están aumentando por encima de los hombres, pero, en cambio, en los sectores más precarios de esta estructura salarial, los salarios de los hombres están aumentando por encima de los de las mujeres. 

Galí (socióloga): “En Catalunya, la diferencia es del 24,24% en el salario anual y del 13,2% por hora trabajada. Es decir, por cada 1.000 euros de un hombre, una mujer cobra 760 euros”

Galí ha ironizado sobre la composición del salario: “A menudo hemos oído que en ningún convenio se dice que las mujeres deben cobrar menos que los hombres. Ya lo sabemos, porque eso sería ilegal. No obstante, ha añadido, “esta realidad sigue existiendo”. Según ha explicado, en muchos casos la diferencia salarial se debe a los complementos salariales. En cuanto al salario base, principal componente del salario bruto, el informe indica que en el año 2022 este fue de 1.612,8 euros para los hombres y de 1.395,6 euros para las mujeres. Esto supone una brecha de género del 15,6% en el salario base mensual, casi 10 puntos menos que la brecha del salario bruto mensual, que alcanza el 24,5%.

 

Las diferencias son especialmente pronunciadas en los complementos salariales, con una brecha del 46,3%, y en los pagos por horas extraordinarias, donde la diferencia se eleva hasta el 137% (17,04 euros mensuales para los hombres y 7,18 euros para las mujeres). En este sentido, el informe concluye que hasta el 48,4% de la brecha salarial de género en Catalunya –casi la mitad– se debe a los complementos salariales.

“Las mujeres extracomunitarias deberían duplicar su sueldo para equipararse a los hombres europeos”

Concentración para la primera huelga de mujeres trabajadoras el 8 de marzo | CCOO
Concentración para la primera huelga de mujeres trabajadoras el 8 de marzo | CCOO

Por otro lado, Galí ha afirmado que las características del trabajador y trabajadoras, como el origen, la edad o su nivel de estudios, actúan como ejes de desigualdad que a menudo se superponen y agravan las situaciones de vulnerabilidad. En cuanto a la nacionalidad, “por primera vez los salarios de los hombres y de las mujeres extranjeros comunitarios son superiores a los salarios de los trabajadores y trabajadoras con nacionalidad española”, según Gilda, quien argumenta que esto nos habla del cambio en los perfiles de los trabajadores europeos que vienen a trabajar a España. Sin embargo, “una mujer extranjera extracomunitaria debería aumentar su salario un 100%, es decir, debería cobrar el doble para cobrar lo mismo que un hombre extranjero que viene de la Unión Europea”, apunta.

Galí (socióloga): “por primera vez los salarios de los hombres y de las mujeres extranjeros comunitarios son superiores a los salarios de los trabajadores y trabajadoras con nacionalidad española”

En segundo lugar, en cuanto al nivel de estudios, a medida que aumenta el nivel de estudios alcanzados, también aumenta el salario. El salario de las trabajadoras aumenta, por tanto, un 20% al pasar de la educación primaria a la secundaria y otro 20% al pasar de la educación secundaria a la FP. Mucho más acentuada es la diferencia entre el salario de las trabajadoras con FP y estudios universitarios, que llega hasta el 62%. 

Pocos minutos después, la socióloga ha querido incidir en el hecho de que la brecha salarial no desaparece con la edad, al contrario. Las mujeres menores de 25 años la brecha salarial es del 18,8% y después entre las personas, este grupo es a causa de la jornada parcial para combinar el trabajo con los estudios. El paso a la siguiente franja de edad, que va de los 35 a los 44 años, supone un fuerte aumento de la desigualdad salarial entre hombres y mujeres, debido a que es aquella que concentra el número más grande de mujeres madres en el período de más carga de trabajo de cuidado de los niños, la brecha salarial es del 23,3%. El siguiente grupo de mujeres de más de 55 años se traduce en una brecha salarial del 30,1%, lo que afecta directamente a las pensiones, con una brecha del 57,2%.

“Por cada mujer que rompe el techo de cristal, abajo hay 10 que están recogiendo la deshecha”

Si en el siglo XX el techo era de “cemento”, en el siglo XXI hemos conseguido que sea de “vidrio” | iStock
Si en el siglo XX el techo era de “cemento”, en el siglo XXI hemos conseguido que sea de “vidrio” | iStock

Uno de los factores que explica la diferencia salarial es el porcentaje más alto de trabajo a tiempo parcial que presentan las mujeres. En Catalunya trabajan a tiempo parcial un 7,1% de los hombres y frente a un 18,9% de las mujeres. En este sentido, el sindicato ha dicho que la reducción de jornada puede ayudar a reducir la brecha de género porque puede animar a las mujeres a hacer trabajos a tiempo completo y, al mismo tiempo, revalorizar el sueldo que se contará a partir de 37,5 horas y no de 40 horas.

A pesar de que parece que con la reforma de la jornada laboral el viento sopla a favor de la mujer porque tendría un impacto positivo, ya que permitiría una mejor distribución de estas responsabilidades, con más corresponsabilidad y conciliación entre mujeres y hombres, Galí ha resaltado que los hombres con cargo de director o gerente perciben de media 10.091 euros más anualmente que las mujeres en la misma posición. Este hecho pone de manifiesto cómo, incluso cuando las mujeres logran romper el techo de cristal, al otro lado no les espera lo mismo que a sus compañeros hombres. “Por cada mujer que rompe el techo de cristal, abajo hay 10 que están recogiendo la deshecha”, añade.

El sindicato ha dicho que la reducción de jornada puede ayudar a reducir la brecha de género porque puede animar a las mujeres a hacer trabajos a tiempo completo

En la parte final de la presentación del informe anual sobre la brecha salarial de género en Catalunya, Galí ha destacado que el tamaño de la empresa influye directamente en la desigualdad salarial: cuanto más grande es la empresa, menor es la brecha.

Además, ha puesto el foco en el papel clave que siguen teniendo la educación y la clase social en la posición que ocupamos en el mercado laboral y, en consecuencia, en el salario que percibimos. Un ejemplo claro es el campo STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), donde la presencia femenina sigue siendo mínima. E incluso cuando las mujeres optan por formación profesional en estos ámbitos, sus salarios siguen siendo inferiores a los de sus compañeros hombres.

Gutiérrez ha querido intervenir en la clausura para subrayar la importancia de continuar aplicando políticas laborales, sociales y económicas que corrijan los factores estructurales que perpetúan la brecha salarial de género. “Si no lo hacemos, no acabaremos con la brecha ni de aquí a 25 años”, ha advertido.