Catalunya lidera la clasificación de territorios del Estado con un mayor IRPF, concretamente en el tramo de 30.000 euros de renta. En cuanto a los sueldos de 60.000 euros, los catalanes y las catalanas ocupan la quinta posición y la decena si hablamos de los contribuyentes con una renta de 120.000 euros. Según un informe de la Asociación Española de Asesores Fiscales, en el ámbito de los 30.000 euros, la diferencia entre un contribuyente catalán y madrileño es de 312 euros a favor del segundo.
El análisis considera tres situaciones de rentas anuales, una primera de 30.000 euros, otra de 60.000 y otra de 120.000 euros de un contribuyente soltero, sin hijos, con rentas procedentes exclusivamente del trabajo y aplicando las reducciones establecidas en la normativa para este tipo de rendimientos y por el mínimo personal.
Para una renta de 120.000 euros anuales, Catalunya ocupa el décimo lugar, con un tipo medio del 36,68%, detrás de comunidades como la Comunidad Valenciana, que encabeza la tabla con un tipo del 37,93%. Por el contrario, Madrid es la comunidad de menor tributación, con un tipo mediano de 35,52%. La diferencia existente entre lo que tributa un residente en Catalunya y la de uno en Madrid es de 1.361,51 euros anuales.