Desde el 2013 hasta la actualidad, los promotores privados habrían construido hasta el 80% de los pisos de protección oficial que se han hecho en Catalunya. Esta es una de las principales conclusiones de un informe impulsado por la Universitat Pompeu Fabra y la Asociación de Promotores y Constructores. El mismo documento prevé que, hasta el 2037, habrá que levantar otros 220.000 pisos para cubrir las demandas del segmento de población que no puede acceder al mercado libre.
Según las dos organizaciones citadas, “queda evidenciada la necesidad de articular mecanismos de colaboración público-privada por las promociones de viviendas de protección oficial, puesto que las promotoras públicas no han alcanzado ni la estructura ni el presupuesto suficientes para proveer de forma eficiente la vivienda asequible de alquiler".
Entre 2014 y 2022, el número de viviendas de protección oficial finalizadas en el Estado por promotores privados (59.928) también cuadruplicó las finalizadas por los promotores públicos (14.737). La publicación del estudio llega pocas horas después de que el portal inmobiliario Idealista haya dado a conocer que, en Barcelona, el 18% de las viviendas vendidas no llevaban ni una semana en el mercado. En la capital catalana, un 31% de los inmuebles están anunciados entre 3 meses y 1 un año, un 26% se venden entre 1 y 3 meses, un 13% entre una semana y 1 mes, y un 12% tardan más de un año. En Girona, las viviendas que se venden con menos de una semana son un 13%, en Tarragona un 12% y en Lleida un 9%.
Las ciudades en las que más rápido se venden los inmuebles son, por este orden, Granada, Málaga, Valencia, Madrid, Barcelona y Sevilla. Idealista, también apunta que el 10% de las viviendas tardó en venderse entre una semana y un mes; el 22% entre uno y tres meses; el 34% entre tres meses y un año; y el 21% más de un año. Estos datos han sido publicados después de que se prevea una caída moderada de los precios y las operaciones de compraventa de viviendas a medio plazo, según Vicenç Hernández, presidente de las asociaciones de agentes de la propiedad inmobiliaria de España y Cataluña (ANAI y AIC, respectivamente) que, según explicó en la presentación de Enlace, una consultora pensada para unir tecnología y bienes inmuebles, el retroceso de las transacciones puede llegar al 25-30%.