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Chesbrough: "La tecnología y la economía viven una paradoja exponencial!"

El profesor de Berkeley (California) recomienda a Catalunya seguir el modelo de innovación de Alemania

Henry Chesbrough es profesor de la Universidad de Berkeley. | Cedida
Henry Chesbrough es profesor de la Universidad de Berkeley. | Cedida
esteve almirante
Profesor y director Center for Innovation in Cities de ESADE
Barcelona
01 de Febrero de 2020

Henry Chesbrough es profesor de la Universidad de California, Berkeley, y es reconocido mundialmente como el padre de la innovación abierta. Tras más de seis años como profesor de la Harvard Business School, ahora es director ejecutivo del Center for Open Innovation. En tres palabras: "Crecimiento, estrategia e innovación". El año 2003 publicó Open Innovation, un libro que cambió la forma en que las empresas innovan: desde la producción interna de ideas hasta capturar ideas independientemente de un origen interno o externo. Ahora, acaba de publicar su último libro Open Innovation Results de Oxford University Press donde procura aclarar "la paradoja exponencial". Por qué la innovación y las nuevas tecnologías, que parecen ser exponenciales, cuando se observa su tasa de crecimiento y potencial, acaban teniendo un incremento tan bajo en productividad? Chesbrough ha vivido en Barcelona durante un año y todavía visita a menudo Catalunya.

 

Cuál es la paradoja exponencial?

Las tecnologías avanzan a un ritmo acelerado que es la misma esencia de las tecnologías exponenciales. Sin embargo, los datos económicos sobre el crecimiento del PIB, el crecimiento de la productividad y el crecimiento de los salarios muestran una desaceleración. Esta es la paradoja exponencial!

 

"La paradoja exponencial es que las tecnologías avanzan a un ritmo acelerado a la vez que el crecimiento del PIB, la productividad y los salarios muestran una desaceleración"

Se supone que la innovación es el motor del crecimiento. Sin embargo, esta década de innovación no ha producido tanto crecimiento en productividad. Por qué?

Una gran parte de la respuesta es que aquellos que estudiamos tecnología hemos prestado mucha atención en la generación de nuevas tecnologías, pero descuidamos la posterior difusión y absorción de estas tecnologías. Para tener un impacto positivo en la sociedad, nuestras últimas ideas se tienen que extender tanto en largo como en ancho, y las personas tienen que entenderlas y ponerlas en marcha en su vida cotidiana y dentro de sus procesos de trabajo.

En palabras de Peter Thiel: Queríamos coches voladores y en cambio, obtuvimos 140 carácteres. 

La brecha entre el mejor y el resto se ha ampliado sustancialmente, lo que significa que las últimas cosas interesantes no están penetrando demasiado en la sociedad y ofrecen poco valor de productividad. Pensáis en la Inteligencia Artificial (IA): las mejores empresas ya están obteniendo beneficios reales de su aplicación. Pero, la gran mayoría de las empresas ni siquiera tienen sus datos estructurados de tal manera que les permitan usarlos para entrenar un algoritmo, y mucho menos para refinarlo y mejorarlo.

"El rendimiento de China en algunas industrias, como el tren de alta velocidad, muestra que realmente podría comerse el mundo"

China es el gran éxito! Todavía compite en costes pero cada vez más en innovación. Se comerá el mundo?

De hecho, China está en marcha, y le dedico el capítulo final del libro. Cómo verá, el rendimiento de China en algunas industrias, como el tren de alta velocidad, muestra que realmente podría comerse el mundo. Y la iniciativa Belt and Road exportará la destreza de China a muchos otros países. Pero, si nos fijamos en otras industrias como la de la automoción y los semiconductores, la imagen cambia.

Por qué?

La innovación de China en estos sectores proviene de empresas privadas o empresas extranjeras, y estas representan pocas exportaciones a día de hoy. Las empresas estatales están recibiendo demasiados fondos, mientras que las fuentes clave de innovación están obteniendo muy poco.

En Catalunya hemos tenido un cierto éxito en investigación y universidades. Por ejemplo, Esade e IESE están en el ranking de las mejores escuelas de negocio. 

Hace diez años, cuando llegué a Esade, muchas de las clases se impartían en español. Ahora, diez años después, casi todo la enseñanza es en inglés. Esto refleja la creciente internacionalización de la escuela. De hecho, hay estudiantes de Esade que pasan un semestre en Berkeley, lo que hace que las cosas sean todavía más globales.

"Tener dos excelentes escuelas de negocios como Esade o IESE no es suficiente. Se tiene que difundir el conocimiento sobre cómo destacar en los negocios a toda la sociedad"

Cómo podemos transformar este éxito en innovación y crecimiento?

Bien, tener dos excelentes escuelas de negocios no es suficiente. Se tiene que difundir el conocimiento sobre cómo destacar en los negocios a toda la sociedad y proporcionar así la capacitación y el desarrollo de habilidades para poner este conocimiento a trabajar. Me gustaría ver más esfuerzos dirigidos a la difusión y absorción de nuevas tecnologías en Catalunya.

Y la Administración cómo puede ayudar a hacer que un país sea más innovador? 

En el libro también hablo de Smart Cities que es una área donde el sector público ya está tratando de ser más innovador y dar más valor a sus ciudadanos. Según tu investigación y la de tus colegas, esta iniciativa ha obtenido grandes objetivos, pero los éxitos hasta ahora han sido decepcionantes. Nuevamente, mucha generación de ideas, pero mucha menos difusión y absorción. Ahora estamos viendo una segunda generación de iniciativas que dependen mucho menos de sólo apps e IT, y mucho más de una comprensión del contexto y de los desafíos de la vida urbana y de cómo abordarlos. Estáis mostrando el camino!

Conoce mucho España, Catalunya y Barcelona... Qué haría como Ministro de Innovación? 

Durante el mandato de CarlosMoedas como Ministro de Innovación en la UE de 2016-2019 se promulgó el concepto de las tres aperturas: ciencia abierta, innovación abierta y apertura en el mundo. Este es un buen punto de partida, también en este caso. A esto añadiría algunas de las políticas que he observado en Alemania, donde las empresas brindan aprendizaje, capacitación a la vez que las escuelas brindan educación vocacional que convierte los trabajadores alemanes entre los más cualificados y más productivos del mundo. Y todavía disfrutan de muchas vacaciones y descansos, lo cual también es una cosa esencial en Catalunya.

"Catalunya podría aprender de la FP y la educación vocacional de Alemania así como de su generación, difusión y absorción de ideas"

Qué podemos copiar de Alemania?

Alemania destaca en la formación profesional, y en la generación, difusión y absorción. Su habilidad tecnológica es muy fuerte, excepto por el software. También demuestran que puedes ser excelente y aún así, cogerte largas vacaciones y los periodos necesarios para descansar.

Y de Estados Unidos? 

El espíritu optimista de "puedo hacer" es muy positivo. Estados Unidos también es un buen país a la hora de integrar los talentos de personas de todo el mundo, especialmente en puntos críticos de innovación como Silicon Valley. Pero la gente de Estados Unidos trabaja demasiada y no pueden disfrutar de suficientes vacaciones y descansos, así que esto es mejor no copiarlo.

Y de China?

China nos está mostrando el valor de construir una infraestructura de vanguardia y el poder que supone sacar a centenares de millones de personas de la pobreza. Es líder en fabricación en el sector de la electrónica, y sus universidades también se están fortaleciendo rápidamente. Pero también trabajan demasiado duro, incluso más que en los Estados Unidos...

Última pregunta: Qué podemos copiar de Israel? 

Israel es todavía más emprendedor que los Estados Unidos o China, y su economía es tan pequeña que incluso, las pequeñas empresas piensan en los mercados globales desde los primeros días. Son expertos en atraer empresas extranjeras y capital de startups extranjeras para apoyar a su ecosistema emprendedor.