Según los últimos informes de la Comisión Europea y organizaciones como UNICEF, en España uno de cada tres niños vive en riesgo de pobreza o exclusión social, situando al país entre los peores de la Unión Europea. La Comisión Europea emitió un informe en diciembre sobre la situación social en España, calificando de "crítica" su posición en indicadores clave como el riesgo de pobreza infantil, la exclusión social y el abandono escolar.
En el informe, Bruselas ha elaborado un semáforo en el que España suma cuatro indicadores rojos o críticos, dos naranjas o que necesitan vigilancia y otros cuatro amarillos o "débiles". Estos resultados sitúan a España como el cuarto país con más indicadores negativos, por detrás de Rumania, Grecia e Italia.
Los datos ofrecidos por la Comisión Europea señalan que el 34,5% de los menores de edad españoles estuvieron, en 2023, en riesgo de pobreza y exclusión social. Una cifra que se entiende mejor si se compara con la media de la Unión Europea, la cual se situó en un 24,8%. Este dato coloca a España como el país con la mayor tasa de pobreza infantil dentro de la Unión Europea.
El 34,5% de los menores de edad españoles estuvieron, en 2023, en riesgo de pobreza y exclusión social
Para la Comisión Europea, la tasa de pobreza o exclusión social infantil es aquella que comprende a las personas menores de 18 años que, o bien viven en un hogar cuyos ingresos económicos son insuficientes; o bien residen en una casa donde los adultos en condiciones para trabajar lo hacen un 20% o menos del tiempo disponible para ello; o bien sufren privación material y social, no teniendo acceso, por ejemplo a internet o a ropa nueva.
Las cifras van muy en línea con el indicador AROPE publicado el pasado mes de junio. Según el indicador AROPE (at risk of poverty and/or exclusion), el 28,9% de los menores en España vive por debajo del umbral de pobreza, mientras que el 33,9% está en riesgo de pobreza o exclusión social. Además, el informe también señala la incapacidad para cubrir necesidades básicas como mantener una vivienda a temperatura adecuada o garantizar una alimentación equilibrada afecta al 10,8% de los hogares con niños.
En cuanto al abandono escolar a temprana edad, la CE informe que, aunque ha disminuido hasta el 13,7%, sigue siendo una de las tasas más altas de la UE y está muy por encima del promedio europeo del 9,5%. Estos problemas se agravan por una desigualdad en los ingresos, con una ratio del 5,5 entre los más ricos y los más pobres, frente al 4,7 de media europea.