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Comercio, estrategia y fondos Next Generation

Tenemos que evitar caer en la tentación de "pedir por pedir" en los fondos Next Generation

Catalunya recibirá casi 1.500 millones de euros de los fondos React-UE| iStock
Catalunya recibirá casi 1.500 millones de euros de los fondos React-UE| iStock
economista y socia de Som-hi Consulting
Barcelona
11 de Octubre de 2021

Después de los efectos económicos de la covid-19 en el comercio, la hostelería y todos aquellos negocios vinculados con el turismo y el ocio, es muy importante poder sacar el mejor partido posible de las ayudas que ofrece la Unión Europea a través de los fondos Next Generation, para la recuperacióneconómica y la resiliencia de los sectores y empresas.

 

En estos momentos, hay muchos ayuntamientos y organismos supramunicipales trabajando en la redacción de propuestas para optar a las ayudas que dentro de este programa se concederán -como señala el borrador de la convocatoria- "para la financiación de proyectos de impulso a la competitividad, innovación y modernización de los canales de distribución, mercados municipales, de las áreas comerciales urbanas, del comercio no sedentario y de los canales cortos de comercialización.... (para) aumentar la capacidad de innovación y reducir su dependencia de un ámbito territorial concreto, diversificando las cadenas de suministro a través de la transformación digital".

La convocatoria desgrana con detalle el tipo de acciones que pueden ser financiadas y cómo se valorarán, puesto que solo los mejor puntuados recibirán ayuda. Y esto, que da claridad a las reglas del juego, viendo alguna propuesta de las que se preparan, enciende para mí algunas alarmas.

 

No es que tengamos un plan de viaje y vayamos a ver cómo podemos materializarlo, sino que hemos visto un vehículo aparcado y estamos mirando de ponerlo en marcha sin haber pensado adónde ir

Los técnicos de las administraciones públicas, con la mejor predisposición, están diseñando puzzles que encajen en esta convocatoria y puedan sumar los máximos puntos. Pero en muchos casos hay un error de base que puede hacer que se haga mucho trabajo para llegar a ninguna parte. Para hacer un símil, no es que tengamos un plan de viaje y vayamos a ver cómo podemos materializarlo, sino que hemos visto un vehículo aparcado y estamos mirando de ponerlo en marcha sin haber pensado adónde ir.

Tener un relato

Primero, y al margen de la convocatoria, hay que decidir -con participación y complicidad de los sectores y de los administrados- cómo nos podemos posicionar (como empresas, como municipio) y qué hace falta para llegar a este posicionamiento. Solo entonces, con el plan en la mano, tiene sentido ver cómo nos pueden ser útiles los fondos Next Generation. Se trata de tener un relato, y hacer algo porque hace falta y creemos en ello, no porque resulta que "nos regalan" dinero para hacer determinadas cosas.

Es estratégico consensuar unos objetivos y posicionamiento con plena complicidad de los beneficiarios finales, y después ver cómo los fondos Next Generation pueden sumar

Por último, hay un detalle que no es irrelevante, y es que el periodo de la covid-19 y del teletrabajo ha hecho que las personas de las administraciones públicas se hayan quedado un poco aisladas en una burbuja. No es lo mismo trabajar a través de plataformas online y sin contacto directo con el ciudadano que pisar terreno. Por buena disposición y profesionalidad que ponen las personas, el teletrabajo ha alejado más a la administración de los administrados, y esto puede permitir que se diseñen desde los despachos unas acciones para presentar a los Next Generation en los que los empresarios del comercio y la hostelería no se sientan comprometidos ni identificados.

Por lo tanto, hay que evitar correr como pollo sin cabeza: es estratégico consensuar unos objetivos y posicionamiento con plena complicidad de los beneficiarios finales, y después ver cómo los fondos Next Generation pueden sumar. Tenemos que evitar caer en la tentación de "pedir por pedir" aquello que financian, porque el riesgo es perder el tren irremisiblemente para nuestras ciudades y su tejido comercial.