La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) denuncia que algunas empresas eléctricas cobran hasta un 30% más de lo que tocaría por el consumo de luz que hacen los usuarios. En concreto, Competencia constata -sin especificar qué compañías son- que han aprovechado las nuevas tarifas que se implantaron el 1 de junio para incrementar el coste del término de energía, además de la variación en el componente regulado.
El organismo considera que ha habido una "falta de transparencia" por parte de las empresas a la hora de informar a sus clientes sobre los cambios de la nueva tarifa de la luz. Así pues, Competencia insta a las compañías a actualizar los contratos de manera transparente y a compensar a los consumidores que se han visto afectados por el cambio de precios.
Si bien el organismo constata que la mayoría de comercializadoras han informado "de manera transparente y comprensible al cliente" sobre los cambios en la tarifa de la luz, algunas han ignorado este punto. "Se han dado casos donde los clientes no han sido informados sobre la actualización de precios y se los ha indicado de forma incorrecta de que esta variación responde a los cambios de la tarifa regulada", ha indicado.
Este aviso llega un día antes de que el precio de la luz vuelva a marcar un nuevo récord histórico. El jueves, tendrá un coste de 122,76 euros/MWh, cinco euros más que hace dos semanas, cuando ya se registró un récord. Esto hará que los ciudadanos tengan que pagar este agosto la factura de luz más cara de la historia en el Estado español. Durante la primera mitad del mes, según la asociación de consumidores Facua, la electricidad ha sido un 43,7% más cara que hace un año.
Ante esta tendencia, el Gobierno central aprobó de urgencia un real decreto el 24 de junio para reducir los impuestos que se aplican al suministro de energía. A raíz de este, el IVA se redujo del 21% al 10% hasta finales de año y, además, se ha suspendido el impuesto del 7% a la generación eléctrica durante tres meses. El 1 de junio se había introducido ya una nueva factura de la luz, que cambiaba las condiciones de facturación de peajes. Así pues, ahora se discrimina el precio según la hora de uso, con horarios punta, valle y llano.