El consumo de cemento en Catalunya se redujo un 0,6% en septiembre en comparación con el mismo mes del año pasado, alcanzando un volumen de 151.157 toneladas, deteniendo así su caída. En un comunicado, la patronal Ciment Català señala que se confirma la tendencia a la estabilización del mercado catalán, después de que en noviembre de 2022 comenzara a desplomarse. En los primeros nueve meses del año, el consumo fue de 2,1 millones de toneladas, un 4,3% menos respecto al mismo período del año pasado. En cuanto a la producción, creció un 15% en septiembre, hasta alcanzar las 271.718 toneladas, y en el acumulado del año se concentró en 3,31 millones, un 0,3% interanual menos.
También las exportaciones de cemento y clínker se mantuvieron en el noveno mes del año, con un incremento del 0,3%, alcanzando las 144.601 toneladas. En el total del año, retrocedieron un 25%, hasta 1,5 millones.
La patronal Ciment Català señala que se confirma la tendencia a la estabilización del mercado catalán, después de que en noviembre de 2022 comenzara a desplomarse
La patronal afirma que la industria está orientando los procesos hacia la descarbonización y que "los proyectos industriales asociados a la sostenibilidad implican inversiones extraordinariamente elevadas". En este sentido, reclama "un cambio en la dinámica y diligencia de las administraciones públicas" para realizar trámites, advirtiendo que si no se produce, "no se llegará a tiempo para afrontar ni la mitigación ni la adaptación al cambio climático".