El consumo de cemento en Catalunya disminuyó un 5,3% en febrero, hasta 185.033 toneladas, en comparación con el mismo mes del año pasado, según ha informado Ciment Català. La patronal apunta que se consolida “la tendencia al estancamiento del mercado doméstico” durante el último año. Por otro lado, la producción también se redujo, pero un 10% interanual, situándose en 258.174 toneladas.
En cambio, las exportaciones siguieron al alza y terminaron el segundo mes del año con un crecimiento del 5,3%, hasta 96.059 toneladas. En la suma de enero y febrero de este año, el consumo fue de un volumen total de 2,14 millones de toneladas, un 0,9% más. En cuanto a la producción, un 6,6% más, hasta 3,3 millones de toneladas y las exportaciones 1,7 millones de toneladas, un 7,6% más.
La patronal sostiene que la situación del sector “es consecuencia y se correlaciona con la evolución de los mercados de infraestructuras y de la edificación residencial”. En este sentido, recuerda que las licitaciones de obra pública subieron un 3,7% en 2024, pero “no compensan la caída” de 2023.
La reactivación, a la espera del Govern
El presidente de Ciment Català, Salvador Fernández, ha señalado que “la reactivación del consumo” llegará con “la dinamización” de los mercados de obra pública y edificación residencial. Fernández subraya que las empresas están “a la espera de los planes del Govern” en los proyectos de construcción de vivienda y de renovación y ampliación de las infraestructuras, especialmente ferroviarias.