Las fiestas de Navidad están marcadas por los regalos. No es ningún secreto que el aumento de ventas por estas fechas supone un incremento de facturación para muchas empresas. De hecho, hay algunas que tienen sus esperanzas posadas en Navidad para acabar de cuadrar los beneficios del año. Un gran ejemplo de esta necesidad es el sector de la cosmética y la perfumería, que después de una bajada debido a la pandemia pretende volver a los niveles pre-pandémicos durante las fiestas: "Las previsiones de 2021 son similares a las de 2019, un referente que demuestra que estamos empezando a compensar el año de pandemia", explica Ivan Borrego, general manager del Beauty Cluster, la asociación privada con más de 200 empresas que da voz a gran parte del sector.
Desde que empezó la pandemia, el sector de la cosmética y la perfumería ha tenido que hacer cambios muy relevantes en su manera de vender. En este sentido, un sector que siempre ha estado marcado por la relación próxima y física del consumidor con el producto ha pasado transformarse en un sector mucho más digital: "Las marcas han vivido una transformación muy importante, puesto que la tendencia del consumidor es mucho menos física y pasa a concentrarse en el entorno digital", describe Borrego. De este modo, una de las primeras pautas a seguir durante las fiestas es la digitalización y la tendencia creciente de buscar nuevas maneras de acercarse al público detrás la pantalla.
Del sector, la parte que más ha sufrido esta transformación y como tal ha invertido más esfuerzo en conseguir este cambio durante las fiestas es la perfumería. Tal como describe el general manager del Beauty Cluster, "la venta de Navidad en perfumerías puede llegar a suponer el 30% de las ventas anuales". Siguiendo esta misma línea, un sector que se basaba en el testaje y la presencialidad pasar a convertirse en un modelo híbrido entre la venta en linea y la recogida en tienda: "Es un modelo innovador que ha marcado los años de pandemia, pero que también ha venido para quedarse", reconoce Borrego. Aún así, el mismo directivo también recuerda "que no todas las tendencias se aplicarán y que falta tiempo para saber como se constituirá el mercado en términos de digitalización".
Borrego: "La pandemia ha acelerado la tendencia del consumidor a no solo comprar un producto que le guste sino uno que también se acerque a sus valores en términos de marca"
Algunos ejemplos de esta evolución del sector son las nuevas marcas digitales que se han hecho un lugar en el mercado, como por ejemplo Freshly Cosmetics, una compañía que basa su modelo de negocio en el ámbito digital y "ha conseguido incidir en la nueva mentalidad del consumidor", recuerda Borrego. Por otro lado, pero, y siguiendo con la tendencia que explica el general manager del Beauty Cluster, la marca ya ha abierto su tienda física y "refuerza esta necesidad de mantener un modelo híbrido, porque repito tocar el producto es una parte esencial de nuestro sector", añade el directivo.
Un cambio de perspectiva
No es solo la digitalización el cambio principal del sector de la cosmética y la perfumería sino la evolución del consumidor. Lo que se denomina como cosmética honesta es el nuevo eslogan que han puesto en marcha las marcas para seguir manteniendo el vínculo con sus clientes: "Los productos naturales, la responsabilidad social y la percepción de la sostenibilidad como causa latente son algunos de los nuevos parámetros de esta nueva manera de vender", describe Borrego. Así pues, las compañías de cosmética ya no basan su campaña en la venta de producto sino en la consolidación de la marca: "La pandemia ha acelerado la tendencia del consumidor a no solo comprar un producto que le guste sino uno que también se acerque a sus valores en términos de marca", explica Borrego.
Para consolidar esta nueva aproximación del sector, el mismo Beauty Cluster abre la puerta a programas de formación en este nuevo ambiente digital. De este modo, la asociación muestra la necesidad de un cambio de perspectiva para adaptarse a las nuevas generaciones, pero también a la demanda del consumidor: "Al final el sector de cosmética y perfumería da trabajo a unas 30.000 personas de manera directa e indirecta, consta de unas 600 empresas y puede llegar a tener unos 10.000 millones de euros de facturación", explica el general manager de la asociación. En este sentido, Borrego aclara que "es de vital importancia seguir invirtiendo en la adaptación del sector".
La crisis de suministros
Uno de los grandes problemas de prácticamente todos los sectores en la actualidad es la ya muy conocida crisis de suministros y materias primeras. El sector de la cosmética y la perfumería no es una excepción y tal como reconoce Borrego "está afectando mucho". En el caso de las ventas durante las fiestas, el general manager del Beauty Cluster asegura que -a pesar de la incertidumbre- hay un cierto control, puesto que "existe una gran cadena de proveedores locales y esto aporta solidez". Además, Borrego también afirma que "no hay una gran preocupación porque el sector ha probado ser muy resiliente y recuperarse rápido".
La cosmética y la perfumería en Catalunya y en el Estado es un sector heterogéneo que según Euromonitor conseguirá un crecimiento del 1,6% el próximo año. Y es que, el territorio español es el segundo país del mundo en exportación de perfumería y el cuarto en cosmética: "De estos porcentajes un 60% proviene de Catalunya", asegura el general manager de la asociación. Así pues, Borrego reconoce que "ya ven la luz al final del túnel", pero que todavía queda trabajo para hacer: "Navidad será un buen escenario y esperamos que las predicciones de ventas navideñas sean las correctas para cerrar 2021".