La deuda de empresas y hogares se situó en 1,7 billones de euros en el segundo trimestre, un 0,4% más que hace un año en términos absolutos debido al incremento de la deuda corporativa. En cambio, su peso se moderó en términos de PIB, situándose a finales de junio en un 110,4%, lo que contrasta con el 117,7% del segundo trimestre de 2023, según los datos publicados por el Banco de España.
En total, la deuda de las empresas asciende a 1.003.800 millones de euros, un 68,7% del PIB, mientras que la de los hogares se reduce hasta los 700.500 millones, el 45,4% del PIB. La riqueza financiera de los hogares, que resulta de restar pasivos y activos, se sitúa en 2,29 billones de euros en junio, un aumento del 7,9% en un año.
En cuanto a la distribución de los activos financieros de las familias, el efectivo y los depósitos continúan siendo la opción preferida y representan el 35,8% del total. Sin embargo, las participaciones en fondos de inversión han ganado peso, representando el 15,6% de los activos financieros, en parte gracias a la revalorización.