No están todos los que son, pero si son todos los que están, como se suele decir. El día siguiente de la elección del nuevo presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, se han escuchado varias voces relacionadas con el mundo empresarial que han reaccionado al nuevo pacto de Gobierno cerrado entre Juntos Por el Sí y la CUP este sábado y escenificado domingo en la sesión de investidura al Parlamento. Unas, nos llegan desde el mundo académico, otros desde patronales, entidades financieras y sindicatos.
Uno de los que más se ha mojado, en declaraciones a VÍA Emprendida, ha sido José María Gay de Liébana, catedrático de Economía Financiera de la Universitat de Barcelona, al asegurar que el pacto de Gobierno en Cataluña sí que puede afectar futuras inversiones. "El cambio que ha habido puede abrir incógnitas serias sobre la economía catalana, fundamentalmente desde el punto de la inversión en Cataluña y al mismo tiempo, me temo, una cierta emigración empresarial ante las incertidumbres que se abren sobre todo en cuanto a falta de seguridad jurídica si en un plazo de 18 meses Cataluña se convierte en Estado independiente", ha declarado el reconocido economista.
Para Gay de Liébana, ahora empieza un periodo de incertidumbres, puesto que habrá que ver, "cuál es el punto de vista de los otros Estados europeos, de la misma Unión y todas las aristas económicas y monetarias inherentes a esta declaración de independencia: si Cataluña quedaría dentro o fuera de la Unión Europea, que pasa con el paraguas del Banco Central Europeo (BCE), si nuestras entidades financieras catalanas seguirían bajo la protección del BCE o no, que pasará con todo el comercio entre Cataluña y España y el resto de la Unión Europea".
La reacción de los bancos
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, ha asegurado que la Ley tiene que ser respetada "por todos y en todas las circunstancias" durante la rueda de prensa ofrecida en Madrid para explicar la nueva estrategia comercial de su entidad financiera. "Es evidente que una declaración unilateral de independencia afectaría al sector financiero y a Bankia en particular", ha alertado.
Otra de las voces del sector financiero que ha dado su opinión ha sido Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell, a quien los medios han preguntado este lunes –en un acto sobre perspectivas económicas del 2016- su opinión sobre Puigdemont. Tal como recoge el ACN, Oliu se ha limitado a pedir al nuevo ejecutivo "estabilidad institucional y seguridad jurídica" para que el país vaya adelante. "Se los decimos constantemente a nuestros políticos que no hay nada peor que esto", ha explicado el presidente de la entidad.
En cuanto al posible escenario de una Cataluña independiente, Oliu ha asegurado que "tomaremos las decisiones empresariales que creemos convenientes al margen de la política" en ares, dice, de conseguir el "mejor servicio" por los clientes.
Las patronales piden diálogo y trabajo
Por otro lado, la patronal Pimec valora "positivamente que se haya llegado a un consenso para formar un Gobierno estable en un momento clave para la consolidación de la recuperación económica". La patronal de las pequeñas y medianas empresas de Cataluña considera clave y arrecia las palabras del nuevo presidente, quién durando su discurso de investidura hacía referencia a las pymes y los autónomos del país como "una de los eslabones en las cuales el modelo socioeconómico de Cataluña descansa con más confianza, con más tradición y con más identidad".
Sus demandas son armonizar las políticas sociales con las económicas, priorizar la reducción de la presión fiscal para las pymes y autónomos, medidas por reindustrializar el país, apoyo a la innovación e internacionalización y mejora de las infraestructuras y la formación.
También Cecot ha explicado su opinión sobre la noticia de la semana en el acto celebrado este lunes durante el cual su presidente, Antoni Abad, ha hecho balance de 2015 y ha analizado las perspectivas por el 2016. Tal como recoge el ACN, Abad ha considerado como positivo el compromiso de estabilidad parlamentaria expresado este domingo y ha asegurado que los disparos del discurso de Puigdemont son "buenos a la hora de empezar el diálogo y la interlocución".
Aun así, Abad se ha centrado en la necesidad de diálogo para salir adelante el mundo empresarial. En cuanto a las cuestiones políticas ha comentado que ya irán evolucionando, pero en todo caso ha rechazado que declaraciones como la del pasado 9 de noviembre sean un elemento desestabilitzador y ha reivindicado que "hay más normalidad de la que se quiere trasladar".
Desde el Foro Empresarial Creemos en Cataluña se ha celebrado que, en su discurso de investidura, Puigdemont citara el apoyo a la economía productiva y a las pequeñas y medianas empresas y a los emprendedores autónomos. En un comunicado, apuntan que "tiene que acontecer una etapa de oportunidades y la creación de nuevos puestos de trabajo", para impulsar una fiscalidad adaptada al modelo productivo catalán y una legislación laboral y social que tenga en cuenta las realidades de las pyme.
La opinión de las Cámaras
También el Consejo General de Cámaras de Cataluña han expresado su satisfacción por la próxima formación de un gobierno estable, al cual piden que trabaje para fortalecer la consolidación de la recuperación económica, "porque la recuperación observada los últimos meses a casa nuestra sea una realidad los próximos semestres".
Según el Consejo de Cámaras de Cataluña, el próximo gobierno tiene que favorecer e implantar medidas que acompañen y faciliten la recuperación de la actividad económica y la creación de puestos de trabajo. "La apuesta para mejorar las infraestructuras tiene que ser prioritaria por esta consolidación de la recuperación, así como para no frenar una actividad empresarial a la alza".
Los sindicatos reivindican el cambio social
Los principales sindicatos han mostrado su satisfacción por la configuración de un nuevo Gobierno y han querido mostrar sus exigencias que implican, principalmente, un cambio en las políticas sociales que atienda la situación de paro y la precariedad laboral.
Por un lado, UGT de Cataluña ha pedido en el nuevo Gobierno "que no pierda más tiempo y empiece a trabajar en políticas de urgencia para reactivar la economía, ayudar la industria y crear ocupación de calidad –no precaria, temporal, parcial y con bajos salarios, cómo ha sido la tendencia del 2015", han apuntado en un comunicado público. En resumen, pide en el nuevo Gobierno de la Generalitat que priorice la creación de la Renta Garantizada de Ciudadanía, la lucha contra el paro y la precariedad laboral y dé respuesta a la situación de emergencia social que vive Cataluña.
Por otro lado, CCOO de Cataluña considera que Cataluña necesita "de manera urgente" un impulso en políticas que promuevan la lucha contra el paro y la precariedad laboral e incentiven la creación de ocupación de calidad. "Emplazamos en el nuevo Gobierno que abre los espacios de concertación social con las organizaciones sindicales y empresariales más representativas del país, para impulsar la reactivación económica basada en la ocupación de calidad y un nuevo modelo productivo, la consolidación de la negociación colectiva en Cataluña y la extensión de la protección social a las personas con riesgo de pobreza y exclusión social", han argumentado.