"Conciliar no es sólo cuidar; es salud mental". La conciliación entre la vida familiar y laboral tiene un impacto directo en la salud mental de las personas cuidadoras. Así lo concluyó el Observatorio de Conciliación, Corresponsabilidad y Diversidad de la Universidad Pontificia Comillas en unas jornadas del año 2023 y así lo confirman también las últimas cifras publicadas por la Organización Mundial de la Salud: entre el 11% y el 27% de los problemas de salud mental en España están directamente relacionados con las condiciones laborales, entre las cuales destaca la dificultad para conciliar la vida familiar y laboral en el caso de padres y madres de hijos menores.
De hecho, el problema no es sólo no tener acceso a medidas para conciliar, sino no escoger las adecuadas o que la cultura corporativa no acompañe. Según un informe de Infojobs, uno de cada tres profesionales que han accedido a medidas de conciliación han experimentado consecuencias negativas en el trabajo. Y un 10% no se atreve a solicitarlas por miedo a sufrir estas consecuencias.
De los que han sufrido un impacto negativo, el 19% dice que ha padecido mayor estrés en el trabajo, el 11% ha recibido comentarios negativos por parte de compañeros o superiores, un 9% considera que ha renunciado a oportunidades laborales, que tiene menos acceso a formarse o a desarrollarse profesionalmente (9%) y un 8% se siente excluido del equipo.
La flexibilidad horaria, la medida estrella
En el podio de las medidas mejor valoradas por los trabajadores destaca, según una encuesta de Infojobs, la flexibilidad horaria. La han elegido el 54% de los encuestados. Le siguen la jornada intensiva (38%) y el teletrabajo, con un 37%.
Por orden, los trabajadores prefieren contar con horas anuales remuneradas para asuntos personales (28%), desconexión digital real (22%), tener la posibilidad de cambiar el turno con los compañeros (21%), hacer excedencias para el cuidado de un hijo (13%) y contar con una zona de lactancia o de cuna en el mismo trabajo (7%).
¿Quién la valora más?
A pesar de que la flexibilidad horaria es la medida mejor valorada en todas las comunidades autónomas en cuanto a conciliación laboral (la eligen el 54% de los encuestados), destaca especialmente en Catalunya, donde el 69% de los trabajadores la consideran clave para mejorar su equilibrio entre la vida personal y laboral, seguida de Madrid y la Comunidad Valenciana, ambas con un 60%.
En Madrid, además, el teletrabajo (54%) supera a la jornada intensiva (49%), situándose como la segunda opción más valorada. En Catalunya, la jornada intensiva cobra mayor relevancia (45%), mientras que en el País Vasco se observa una mayor demanda de horas anuales remuneradas para asuntos particulares (45%) y de desconexión digital real (39%). Andalucía, por su parte, presenta un caso particular: el 33% de los trabajadores señalan la posibilidad de cambio de turno entre compañeros como la tercera medida más necesaria (33%), por encima de la de teletrabajo (22%).
Los profesionales de entre 24 y 34 años son el grupo que en mayor porcentaje (63%) valora la flexibilidad horaria;
Por otro lado, la edad del trabajador también influye en las medidas de conciliación más valoradas. Las generaciones más jóvenes son las que demandan un mayor número de medidas. Concretamente, los profesionales de entre 24 y 34 años son el grupo que en mayor porcentaje (63%) valora la flexibilidad horaria; también destaca el teletrabajo (49%) y la jornada intensiva (48%), en las que están por encima del resto de rangos de edad. En el resto de grupos de edad, la flexibilidad horaria también se consolida como la opción más valorada, con un 56% en el de 34 a 44 años; un 52% de 45 a 54 años, y un 49% de 16 a 24 años y de 55 a 65.
En cuanto al modelo de trabajo, los empleados en teletrabajo muestran una mayor preferencia por esta modalidad como herramienta clave para la conciliación (63%), seguida de la flexibilidad horaria (58%) y la jornada intensiva (51%). En cambio, entre quienes trabajan 100% de manera presencial, la flexibilidad horaria continúa liderando el ranking (53%), pero con una menor inclinación hacia el teletrabajo que la media (30%).
Por género, según un estudio de la UNED, casi el 96% de los hombres con hijos menores de 15 años no se acoge a medidas de conciliación que supongan una reducción en su salario. Por otro lado, en línea con este estudio, el 34% de las mujeres sí han tomado acciones que equilibran su vida profesional y personal, a pesar de que su remuneración pueda verse afectada.
En este escenario, no es sorprendente que, entre la población ocupada en España, las mujeres sean quienes más demandan medidas de conciliación, tal como reconocen las empresas encuestadas por Infojobs. Según estas compañías, las mujeres solicitan en mayor proporción opciones como la jornada reducida (44% frente al 2% de los hombres), la zona de guardería en la empresa (34% frente al 4%) y las excedencias por cuidado de un familiar (33% frente al 2%). Por contra, también se observa un incremento en la demanda de medidas como la guardería dentro de la empresa por parte de ambos géneros, lo que podría indicar un cambio progresivo hacia una mayor corresponsabilidad.