La Fórmula 1 vuelve a vivir una época de extrema popularidad, y no solo porque ha vuelto a recuperar una gran afición -de algunos que vuelven pero también de muchos nuevos aficionados jóvenes-, sino también porque este 2024 dos sucesos han sacudido el funcionamiento habitual del Circuito de Barcelona-Catalunya, popularmente conocido como el Circuito de Montemeló. El primer hecho lo conocimos en enero: Madrid conseguía convencer Liberty Media, propietarios de la Fórmula 1, para celebrar la competición en su ciudad en el 2026: Y esto, ¿qué quería decir? Nos quedábamos sin Fórmula 1 a Catalunya? Y el segundo hecho, el más reciente -tan reciente que todavía se está cociendo- es la posible entrada de Fira de Barcelona como gestora del circuito, que a pesar de que no afectará la titularidad de los activos ni los contratos con la Fórmula 1 y MotoGP, abrirá una nueva etapa para el circuito, con nuevos modelos de negocio. Por cierto, según fuentes de VIA Empresa, este acuerdo con Fira ya tiene una fecha acontecer oficial: se firmará este 24 de abril.
El Circuito de Barcelona-Catalunya es propiedad de la Generalitat, del Racc y del Ayuntamiento de Montmeló. Por eso, para saber cómo se ha llegado a estas dos situaciones, y conocer cuál es el futuro del Circuito y de la F1 en Catalunya, conversamos con Josep Mateu, presidente del Racc Mobility Club.
La historia de estos dos sucesos empieza, en el fondo, hace apenas dos años, con la publicación del Plan Estratégico del circuito del 2022.
El objetivo de este plan estratégico ha sido apostar por el futuro del Circuito vinculándolo con la sostenibilidad, mejorar su gestión y optimizar la cuenta de resultados para reducir la aportación que significa para el erario público, puesto que la Generalitat es el accionista mayoritario. También se pretende acercar el circuito al territorio, que sea más sostenible, que fomente la industria de la movilidad neta en su área de influencia, y que puedan acoger más eventos, más allá de los deportivos, como ferias, congresos, conciertos, etc.
Paralelamente, la elaboración de este plan estratégico coincidió con un momento importante en Liberty Media, que son los propietarios de la Fórmula 1. Antes del 2016, la propiedad estaba en manos del empresario Bernie Ecclestone, quién vendió sus acciones de la Fórmula 1 a la empresa Liberty Media en el 2017 y estos cogieron el control de la competición. Bernie Ecclestone era un empresario que entendía el negocio, de alguna manera, como una empresa familiar: negociaba directamente con los circuitos para hacer los grandes premios y con los equipos y los pilotos, y hacía un tipo de negociación bastante próxima. Y no es fácil, porque económicamente son negociaciones muy complejas: coinciden muchos intereses, algunas veces dispares.
Pero eran siempre amistosas. En estas negociaciones, primava no solo la parte económica, sino también la historia y la tradición. Nosotros tuvimos años de relación muy próxima con él desde 1991. Viajábamos regularmente a Londres a negociar, y cuando venía a Barcelona, la relación todavía era más próxima, incluso venía con nosotros a ver el Barça cuando jugaba con el Chelsea o el Arsenal. Asistimos juntos a más de una final de la Champions League.
¿Qué cambió con Liberty Media?
John C. Malone, el propietario y presidente, puso al frente, como CEO, a un ejecutivo, Chase Carey, para llevar todo el campeonato de la Fórmula 1 en todo el mundo con el objetivo de hacerla crecer.
No tenemos ninguna objeción sobre la dirección de Chase Carey y de su equipo ejecutivo, simplemente es un estilo diferente. Son ejecutivos, muchos de ellos formados en Harvard y miran por el beneficio de la empresa, su carrera profesional y sus bonus por resultados, obviamente. Esto, además, sucedió en un momento bastante difícil para el Circuito: la Fórmula 1 no tenía, ni mucho menos, la tirada que tiene ahora.
Todavía nos estábamos recuperando de la crisis del 2008, una crisis financiera que provocó una caída de los esponsors, del público asistente y de las empresas que aportaban público, redes de ventas e invitados (B2B) durante los fines de semana, y solo continuaron viniendo los aficionados particulares. El Circuito pasó una etapa muy dura, con muchas dificultades económicas y financieras. Solo teníamos ticketing de particulares y éstos eran pocos.
¿Para medirlo con las cifras de ahora, cuál era la situación?
En aquel momento quizás íbamos unas 40.000 personas a ver los campeonatos, y ahora van 125.000, 3 veces más. Y el Fee para tener la carrera continuaba siendo altísimo.
Al poco de entrar la nueva Liberty Media, además, vino la covid-19. Entiendo que tampoco sería fácil...
¡Nada! Aquel año, justamente, el mes de agosto, nos suplicaron hacer la Fórmula 1 pero sin público, por su impacto televisivo y para los contratos que ellos tenían con patrocinadores. Pocos circuitos lo querían hacer y les ayudamos. Redujimos el fee para ayudar a pagar los gastos. No ingresamos nada aquel año, nuestra facturación fue cero. Fue como una carrera privada para unos pocos.
Aquel mismo año, en diciembre del 2020, nombraron a Stefano Domenicali, como CEO de la F1. Es una persona que viene del mundo de la automoción, había sido director de equipo en Ferrari y ahora era CEO de Lamborghini. Un hombre próximo y también, muy profesional.
"Stefano nos dijo, el primer día, que si queríamos continuar con la Fórmula 1, teníamos que hacer grandes inversiones"
Stefano nos dijo, el primer día, que si queríamos continuar con la Fórmula 1, teníamos que hacer grandes inversiones para renovar el paddock -que es la zona de los equipos-, los boxes, los pisos box, crear muchas más zonas de hospitality para empresas y espacios más privados, y también mejorar aspectos de sostenibilidad e infraestructuras, como mejores conexiones de redes. El público asistente tenía que poder seguir las carreras mediante el móvil a tiempo real. Y lo vimos claro: si no cumplíamos, estábamos fuera.
¿Todos estos requisitos implicaban una inversión de...?
En aquel momento, se hablaba de prácticamente 100 millones de euros.
Lo que pasa es que en aquel momento teníamos contratos de un año y, por realizar una gran inversión, pedimos que estos contratos fueran más largos. Finalmente y con el liderazgo de la Conselleria de Empresa conseguimos una renovación por 5 años. Es decir, hasta el 2026. Un hecho histórico.
"El circuito, en estos momentos, es, sin lugar a dudas el mejor circuito de Europa"
Durante estos cinco años hemos hecho el plan estratégico del circuito y hemos hecho una inversión de prácticamente 50 millones de euros. El circuito, en estos momentos, es, sin lugar a dudas el mejor circuito de Europa.
Es la mitad de la inversión inicial.
Sí, porque inicialmente es lo que se cuantificó, pero realmente, cuando presentamos los proyectos, vimos y demostramos que podíamos lograr aquellos objetivos sin llegar a hacer un gasto tan grande.
Ahora bien, hay un hecho que nos pedían, que no es tan sencillo. Querían la implicación de la ciudad de Barcelona. Que la ciudad fuera una fiesta.
¿En qué sentido?
Ellos quieren que el acontecimiento de la F1 dure una semana entera, en la que además de la carrera se pueda ampliar la experiencia en toda la ciudad. Así lo están haciendo ahora en Singapur, Miami, en Las Vegas y en muchas ciudades del mundo. Es una tendencia en el mundo del automóvil: incluso los salones de automóviles, como el de Frankfurt o el de Ginebra, que son los más importantes del mundo, ahora se celebran en la calle: las exposiciones se hacen en las avenidas y plazas de la ciudad.
"En Barcelona, hemos vivido unos cuantos años en los que el gobierno municipal ha estado de espaldas a la F1"
Pero para llevar el circuito a la ciudad necesitábamos la colaboración del Ayuntamiento, y en Barcelona, hemos vivido unos cuántos años en los que el gobierno municipal ha estado de espaldas a la competición y al acontecimiento.
Esto es el que os pidieron...
Sí, y es en lo que se ha sido trabajando todos estos últimos meses: en abrir la F1 a la ciudad. El Gobierno siempre ha apoyado la F1 y ahora Barcelona vuelve a hacerlo.
Josep Mateu, presidente del RACC | Mireia Comas
Algunas declaraciones recientes critican que la F1 es celebre en Barcelona por la contaminación que puede generar.
Seguramente lo critican sin saber que los carburantes de la F1 llevan el 10% de ethanol y que en el 2026 serán e-fuels de origen no fósil y no contaminantes, y que en el 2030 la F1 será mucho más sostenible. La F1 es innovación en todo y también en los combustibles que acabarán llegando al gran consumo. Los carburantes de la F1 serán los carburantes no contaminantes del futuro.
"Nosotros hemos cumplido con todo lo que se nos ha pedido, y hemos ido avanzando, mientras Madrid ha presentado un proyecto coetáneo por su cuenta"
Y en este proceso de intentar abriros a la ciudad, apareció Madrid.
Exacto, ofreciendo un proyecto en la ciudad: en la zona de Ifema, una zona bien conectada por metro y con el aeropuerto, y con unas ofertas económicas mucho más elevadas. Es decir, nosotros hemos cumplido con todo lo que se nos ha pedido, y hemos ido avanzando, mientras Madrid ha presentado un proyecto coetáneo por su cuenta.
"Madrid hace 40 años que no tiene la carrera y ha visto las ventajas que puede representar recuperarla"
Dicen que es de capital privado.
Es imposible. No da la rentabilidad suficiente para que sea de capital privado. Los grandes acontecimientos son proyectos de ciudades y de país. Su impacto mediático, económico y fiscal es para todo el territorio y no para unos accionistas locales. Madrid hace 40 años que no tiene la carrera y ha visto las ventajas que puede representar recuperarla.
¿Y un circuito exluye al otro?
No tiene por qué. No hay incompatibilidad entre la celebración de la F1 en Madrid y nuestra renovación. Ellos van en su línea, tienen que montarlo todo, y nosotros vamos a la nuestra: la renovación. Y de hecho, nosotros creemos que sí, que renovaremos el contrato con Liberty Media.
"No hay incompatibilidad entre la celebración de la F1 en Madrid y nuestra renovación"
Está claro que Barcelona no celebrará la competición en medio de la ciudad, porque ya tiene el circuito, pero ¿sí que está abierta a celebrar eventos paralelos en caso de renovarse el contrato?
Barcelona ahora sí que está abierta, aunque la implicación económica del Ayuntamiento hasta ahora ha sido limitada y decreciente. La cifra máxima que ha aportado el Ayuntamiento en su historia fue en la época de Xavier Trias, época en que se decidió poner al Circuito el nombre de Barcelona-Catalunya.
¿A Madrid le saldrá bien económicamente?
Es cierto que ellos van con cierto desconocimiento, por la novedad, y que les costará bastante dinero montar y desmontar el circuito cada año. Pero si han apostado por eso, lo harán bien.
¿Y a Fira? ¿En qué momento se la ha invitado a la fiesta?
A Fira la tenemos en cuenta a raíz del plan estratégico del circuito, que prevé que en el circuito se hagan muchas más cosas de las que se hacen ahora, que no dependa únicamente del gran premio de Fórmula 1 o de Moto GP: que se hagan conciertos, acontecimientos, ferias, congresos ...
Por eso, el Consejo de Administración del Circuito decidimos buscar la posibilidad de hacer un arrendamiento por actividad en el circuito. Y, después de varios estudios, concluimos que Fira podía ser una buena entidad. Hablamos con ellos para ver si estaban dispuestos a estudiarlo, y dijeron que sí. Y de aquí el encargo que se ha hecho público en el que el Gobierno de la Generalitat le ha pedido a Fira que estudie esta posibilidad. Es posible que los próximos días se llegue a un acuerdo.
¿Cómo se desarrollará su rol?
Fira tendrá que pagar una cuota para explotar la actividad en el circuito. Se creará una sociedad que será 100% de Firac y que gestionará la explotación del circuito.
Al Racc nos hace mucha ilusión que lo coja, puesto que podremos sumar a nuestra plantilla un equipo profesional de alto nivel y nos permitirá abrirnos a más actividades además de la actividad deportiva, automovilística o de motos.
Antes de acabar, hemos visto muchas fluctuaciones en los últimos años respecto al éxito de la F1. ¿Qué momento vive ahora?
La Fórmula 1 ha hecho un cambio enorme en los últimos 3 años. De repente el público ha aumentado de manera muy significativa y nos han aparecido de 100.000 o 150.000 personas tanto los domingos como los días previos; similar a lo que históricamente pasaba em Silverstone o en Monza.
Y esto viene, en parte, de la promoción que ha hecho Liberty Media, que es más profesional y entiende bien la industria mediática. Ha ayudado también la serie de Netflix que hicieron sobre la F1 que ha atraído un público más joven. Se trata de un tipo de serie para gente no experta, y han conseguido atraer un gran número de nuevos espectadores presenciales que no se quieren perder el espectáculo y el ambiente.
Hoy la F1 vive una profunda transformación, evoluciona hacia un modelo de entertainment, y el excelente desarrollo de la actividad deportiva es imprescindible, pero no suficiente. Estamos ante un cambio de era.