Más contratos pero de menos duración. Esta parece ser la tónica en que se ha instalado la contratación en España. Con los datos de enero de 2016 a la mano, podemos ver que durante este mes se han registrado 1.396.929 contratos, un 2,1% más que en el mismo mes de 2015. De esta cantidad, 125.612 contratos, el equivalente al 8,99% del total, han estado de carácter indefinido -un 4,5% más que en enero del año pasado-. Si consideramos contratos de calidad los indefinidos y a jornada completa, se firmaron un total de 78.754. El resto, 46.858 lo estuvieron a tiempo parcial. Los otros contratos, más de 1,2 millones fueron de carácter temporal y de estos, casi el 30% lo estuvieron a tiempo parcial. Es decir, se firman más contratos de cuatro horas durante seis meses que indefinidos. De los de la 'peor calidad' posible.
Tiempo parcial y a media jornada
Este podría ser, también, el resumen del análisis del mercado laboral en España durante el 2015: más contratos y más precarios. El año acabó con uno, podríamos decir, tímido balance positivo. Más contratos parece una buena noticia. Sin embargo, según los datos del Ministerio de Ocupación, de los 18,57 millones de contratos firmados a lo largo del año 2015, un 24,7%, más de 4,5 millones tuvieron una duración de 7 días o menos. Si se suman los que duraron hasta un mes, la cifra absoluta se eleva hasta los 7 millones de convenios, lo cual supone que el 37% del total de contratos duraron como máximo un mes.
La recuperación se constata pero la precariedad laboral es protagonista. La reducción del paro en España cerrando en 2015 significa un 8% menos que el año anterior y es la caída del paro más grande desde el 1996. Otra buena noticia es la creación limpia de lugares de trabajo, un medio millón, y el incremento de cotitzants de la Seguridad Social. A pesar de que todavía queda para llegar a los 19 millones de personas cotizando de antes de la crisis.
Viendo en perspectiva los datos, la contratación ha crecido desde el 2009. El número total de contratos firmados ha aumentado. Hablando del 2015, la mala noticia es el número de contratos temporales que se firmaron durante el 2015: 17 millones, mientras que los indefinidos fueron 1,5. El 42% de la contratación estable estuvo a tiempo parcial. Y por si fuera poco, dentro de la ocupación estable, una proporción importante de las jornadas son inferiores a 40 horas semanales. Así, el 40% de los nuevos contratos indefinidos firmados durante el 2015 al Sido Espanyol estuvieron a tiempo parcial.
El 2015 se produjo un importante incremento de la contratación indefinida a tiempo parcial. Según los datos de Ocupación, el pasado ejercicio se firmaron 642.000 contratos indefinidos a tiempo parcial, lo cual supone un incremento del 9% respecto a 2014 y un 50% más de los cuales se firmaban en el ejercicio 2011. Este aumento de la ocupación a tiempo parcial ha hecho que conseguir un lugar de trabajo de máxima calidad -indefinido a tiempo completo- sigue siendo igual de difícil que en los años anteriores. Sólo el 4,66%, menos de uno de cada 20 firmados, se podría considerar de máxima calidad.
Temporalidad en femenino
Analizando los datos en perspectiva, observamos que en el periodo 2010-2014 en general el número de contratos ha caído con la crisis económica. Mientras los contratos a jornada completa fueron cayendo hasta finales del 2011 para volver a crecer después, los contratos a tiempo parcial no han hecho más que incrementar.
Según los datos disponibles al INE, por género, las mujeres son las grandes damnificadas de la precarització. La participación de trabajadores hombres a tiempo parcial en la ocupación total masculina se ha elevado de un 5,3% el 2010 a un 7,8% el 2014, y la participación de mujeres con este tipo de jornada en la ocupación total femenina también se ha elevado (de un 22,7% en 2010 a un 25,6% en 2014). La participación masculina no es significativa, realmente, mientras que la de las mujeres es dramática.
Si se considera la ocupación total, el porcentaje de hombres a tiempo parcial sobre la ocupación total (hombres y mujeres) ha pasado de un 3,0% en 2010 a un 4,2% en 2014. El porcentaje de mujeres con jornada a tiempo parcial representó en la ocupación total un 10,0% en 2010 y un 11,7% en 2014.
Más temporalidad
Estos datos y cifras nos muestran que la crisis ha incidido fuertemente en la temporalidad de los contratos. La precarització del trabajo se ha instalado en ambos géneros y de una manera más incisiva en las mujeres. Sin embargo, como el número de contratos de trabajo a tiempo parcial ha crecido, los hombres también han visto incrementada su participación en este tipo de trabajo.
El número de contratos totales en 2009 era de 15.881.000, reduciendo esta cifra en 2014 hasta 14.285.000. Con esta reducción de lugares de trabajo, la relación entre contratos indefinidos y temporales pasa de 11.877.000 y 4.003.000, respectivamente en 2009, a 10.857.000 y 3.428.000 respectivamente el 2014. La tasa de temporalidad, por lo tanto se sitúa en este periodo en cotas bastante altas el 2009 para descender, como la contratación, hasta tocar fondo en 2012 y volver a repuntar.
En este tiempo el gap de temporalidad entre hombres y mujeres afectaba negativamente al género femenino. A medida que la contratación vuelve a repuntar, se acorta esta diferencia y el porcentaje de hombres con contratos temporales se acerca al de las mujeres.
El 2006 el paro se situó a su nivel más bajo (el 8,3%) y los contratos de duración determinada también lograron su nivel más alto: el 35,6%. Cuando estalló la crisis, la contratación cayó y, por lo tanto, la contratación a tiempo parcial. A medida que empieza a bajar el paro a partir del 2012, se hace patente el incremento de los contratos temporales.
Paro juvenil, precariedad juvenil
Por grupos de edad, en hombres los porcentajes más altos de ocupación a tiempo parcial corresponden a los más jóvenes. En mujeres, los porcentajes son significativamente más altos que en los hombres en todas las edades. El año 2014, las mujeres de 25 a 44 años el porcentaje se mantiene en torno al 25% y a partir de los 45 años, y hasta los 64 años, este porcentaje se reduce ligeramente.
La participación de asalariados temporales, tanto mujeres como hombres, ha descendido en el periodo 2010-2014. La representación de asalariadas temporales en la ocupación total femenina ha descendido 1,5 puntos porcentuales en este periodo y la participación masculina en la ocupación total crece 0,1 puntos. Esto se explica por el simple hecho que el número de trabajadores en los años más agudos de la crisis ha descendido de manera general.
Mercado laboral europeo
A la UE-28, la representación de la ocupación a tiempo parcial de las mujeres es más alta que en España. El año 2014 representaban el 32,8% de la ocupación femenina y en España el 25,6%. Si se considera la ocupación total, a la UE-28 representaban el 15,1% en 2014 y en España el 11,7%. Estos datos se han visto aumentadas desde el año 2009, tanto en hombres como en mujeres.
Sin embargo, por su parte, la participación de las mujeres asalariadas con contrato temporal a la UE-28 es más baja que en España, en 2014 representaban el 14,5% del total de asalariados (hombres y mujeres) y en España el 24,5%.
Tiempo parcial y a media jornada
Este podría ser, también, el resumen del análisis del mercado laboral en España durante el 2015: más contratos y más precarios. El año acabó con uno, podríamos decir, tímido balance positivo. Más contratos parece una buena noticia. Sin embargo, según los datos del Ministerio de Ocupación, de los 18,57 millones de contratos firmados a lo largo del año 2015, un 24,7%, más de 4,5 millones tuvieron una duración de 7 días o menos. Si se suman los que duraron hasta un mes, la cifra absoluta se eleva hasta los 7 millones de convenios, lo cual supone que el 37% del total de contratos duraron como máximo un mes.
La recuperación se constata pero la precariedad laboral es protagonista. La reducción del paro en España cerrando en 2015 significa un 8% menos que el año anterior y es la caída del paro más grande desde el 1996. Otra buena noticia es la creación limpia de lugares de trabajo, un medio millón, y el incremento de cotitzants de la Seguridad Social. A pesar de que todavía queda para llegar a los 19 millones de personas cotizando de antes de la crisis.
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| Tipo de contratos Font: INE Elaboracló VÍA Emprendida |
Viendo en perspectiva los datos, la contratación ha crecido desde el 2009. El número total de contratos firmados ha aumentado. Hablando del 2015, la mala noticia es el número de contratos temporales que se firmaron durante el 2015: 17 millones, mientras que los indefinidos fueron 1,5. El 42% de la contratación estable estuvo a tiempo parcial. Y por si fuera poco, dentro de la ocupación estable, una proporción importante de las jornadas son inferiores a 40 horas semanales. Así, el 40% de los nuevos contratos indefinidos firmados durante el 2015 al Sido Espanyol estuvieron a tiempo parcial.
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| Contratos nuevos el 2015 Fuente: INE Elaboración VÍA Emprendida |
El 2015 se produjo un importante incremento de la contratación indefinida a tiempo parcial. Según los datos de Ocupación, el pasado ejercicio se firmaron 642.000 contratos indefinidos a tiempo parcial, lo cual supone un incremento del 9% respecto a 2014 y un 50% más de los cuales se firmaban en el ejercicio 2011. Este aumento de la ocupación a tiempo parcial ha hecho que conseguir un lugar de trabajo de máxima calidad -indefinido a tiempo completo- sigue siendo igual de difícil que en los años anteriores. Sólo el 4,66%, menos de uno de cada 20 firmados, se podría considerar de máxima calidad.
Temporalidad en femenino
Analizando los datos en perspectiva, observamos que en el periodo 2010-2014 en general el número de contratos ha caído con la crisis económica. Mientras los contratos a jornada completa fueron cayendo hasta finales del 2011 para volver a crecer después, los contratos a tiempo parcial no han hecho más que incrementar.
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| Contratos por jornada Font: INE Elaboración VÍA Emprendida |
Según los datos disponibles al INE, por género, las mujeres son las grandes damnificadas de la precarització. La participación de trabajadores hombres a tiempo parcial en la ocupación total masculina se ha elevado de un 5,3% el 2010 a un 7,8% el 2014, y la participación de mujeres con este tipo de jornada en la ocupación total femenina también se ha elevado (de un 22,7% en 2010 a un 25,6% en 2014). La participación masculina no es significativa, realmente, mientras que la de las mujeres es dramática.
Si se considera la ocupación total, el porcentaje de hombres a tiempo parcial sobre la ocupación total (hombres y mujeres) ha pasado de un 3,0% en 2010 a un 4,2% en 2014. El porcentaje de mujeres con jornada a tiempo parcial representó en la ocupación total un 10,0% en 2010 y un 11,7% en 2014.
Más temporalidad
Estos datos y cifras nos muestran que la crisis ha incidido fuertemente en la temporalidad de los contratos. La precarització del trabajo se ha instalado en ambos géneros y de una manera más incisiva en las mujeres. Sin embargo, como el número de contratos de trabajo a tiempo parcial ha crecido, los hombres también han visto incrementada su participación en este tipo de trabajo.
El número de contratos totales en 2009 era de 15.881.000, reduciendo esta cifra en 2014 hasta 14.285.000. Con esta reducción de lugares de trabajo, la relación entre contratos indefinidos y temporales pasa de 11.877.000 y 4.003.000, respectivamente en 2009, a 10.857.000 y 3.428.000 respectivamente el 2014. La tasa de temporalidad, por lo tanto se sitúa en este periodo en cotas bastante altas el 2009 para descender, como la contratación, hasta tocar fondo en 2012 y volver a repuntar.
En este tiempo el gap de temporalidad entre hombres y mujeres afectaba negativamente al género femenino. A medida que la contratación vuelve a repuntar, se acorta esta diferencia y el porcentaje de hombres con contratos temporales se acerca al de las mujeres.
El 2006 el paro se situó a su nivel más bajo (el 8,3%) y los contratos de duración determinada también lograron su nivel más alto: el 35,6%. Cuando estalló la crisis, la contratación cayó y, por lo tanto, la contratación a tiempo parcial. A medida que empieza a bajar el paro a partir del 2012, se hace patente el incremento de los contratos temporales.
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| Font: INE Elaboración VÍA Emprendida |
Paro juvenil, precariedad juvenil
Por grupos de edad, en hombres los porcentajes más altos de ocupación a tiempo parcial corresponden a los más jóvenes. En mujeres, los porcentajes son significativamente más altos que en los hombres en todas las edades. El año 2014, las mujeres de 25 a 44 años el porcentaje se mantiene en torno al 25% y a partir de los 45 años, y hasta los 64 años, este porcentaje se reduce ligeramente.
La participación de asalariados temporales, tanto mujeres como hombres, ha descendido en el periodo 2010-2014. La representación de asalariadas temporales en la ocupación total femenina ha descendido 1,5 puntos porcentuales en este periodo y la participación masculina en la ocupación total crece 0,1 puntos. Esto se explica por el simple hecho que el número de trabajadores en los años más agudos de la crisis ha descendido de manera general.
Mercado laboral europeo
A la UE-28, la representación de la ocupación a tiempo parcial de las mujeres es más alta que en España. El año 2014 representaban el 32,8% de la ocupación femenina y en España el 25,6%. Si se considera la ocupación total, a la UE-28 representaban el 15,1% en 2014 y en España el 11,7%. Estos datos se han visto aumentadas desde el año 2009, tanto en hombres como en mujeres.
Sin embargo, por su parte, la participación de las mujeres asalariadas con contrato temporal a la UE-28 es más baja que en España, en 2014 representaban el 14,5% del total de asalariados (hombres y mujeres) y en España el 24,5%.
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